“No es solo tener una compañía, sino tener una buena compañía”. Para Yissa Pronzatti esa es la clave de Amec, una empresa de servicio de acompañantes, de la cual es cofundadora, que hoy se ha diversificado y ofrece muchas otras opciones. Amec nace en 1992, luego de que su hermana y una amiga le propusieron emprender un proyecto de servicio de acompañantes para adultos mayores, algo que aún no existía en Uruguay. Para las hermanas Pronzatti, embarcarse en el emprendimiento les significó cambiar el rumbo de sus vidas. Ambas estudiaban Arquitectura. Yissa también hacía canto en la escuela de ópera y participaba de actividades de voluntariado con niños enfermos y adultos mayores. Pero, convencidas de la idea, dejaron esos planes y comenzaron a estudiar Administración y luego Administración en Servicios de Salud. “Teníamos un estudio primario de Europa, cuya población es muy similar a la uruguaya, en cuanto a composición por edades, pero nos dimos cuenta de la importancia de crear un servicio que fuera económico y eficiente. Fue una aventura”, señala Yissa en conversación con Trayectorias. Ingresar en el mercado uruguayo no fue fácil; al ser un servicio nuevo, costó que la gente entendiera en qué consistía. Pero ellas desde el principio se propusieron transformar al acompañante en una profesión y hacer, de este servicio, un servicio accesible para todos. Por eso desde siempre apuntaron a la calidad. “Eso fue lo que nos permitió seguir creciendo”, afirma.
Hoy Amec cuenta también con un área de recreación y otra de bienestar, con distintas actividades como gimnasia, taichí y paseos por Montevideo, el interior uruguayo y hasta viajes al exterior. Su objetivo es brindar “experiencias memorables”. Con esto en mente, hoy la empresa trabaja en un proyecto para inaugurar el año que viene Forum Bienestar, “un compendio de actividades para lograr la longevidad feliz y saludable” ubicado en la zona de Tres Cruces. De los servicios que ofrecerá Forum Bienestar, de la economía plateada en Uruguay y de los comienzos de Amec, conversó Yissa con Trayectorias. Acá, un tramo de la entrevista.
Sí, tomamos la idea, pero en Europa no existe lo que nosotros tenemos en Uruguay. En aquel momento lo que existía en Europa era el tipo de población y un tipo de servicio a domicilio y en sanatorios. Nosotros quisimos replicarlo acá, pero para poder acceder a eso la sociedad uruguaya tiene sus límites en cuanto a lo económico, porque son servicios caros. Entonces, hicimos todo un estudio y llegamos a la conclusión de que lo ideal sería un seguro, y quienes no utilizan el servicio paguen a los que lo utilizan. De alguna manera, queda económico para todo el mundo y es un sistema de prevención. Así empezamos con acompañantes de sanatorio y a domicilio. Hoy tenemos más de 100 fórmulas, es decir, distintas opciones para diferentes edades. Planes diferenciados.
Que sea un seguro, ¿quiere decir que uno por ser socio paga una cuota mensual, aunque no lo esté usando en el momento?
Claro, es una cuota mensual sumamente accesible. Cuanto más joven, pagás menos, porque tenés menos riesgo. De esa manera llegamos a que una persona de 35 años pueda pagar una cuota ínfima, pero, si tiene un accidente, está cubierto. A medida que uno va creciendo, la tarifa aumenta porque cambian los índices de uso. El servicio tiene su complejidad, pero después de 30 años hemos llegado a un nivel óptimo de compensaciones. Hoy tenemos 31 años y estamos felices de nuestro índice de satisfacción. Para nosotros la calidad es la base de todo. Somos una empresa moderna, en la cual tenemos que pensar primero en la calidad de lo que ofrecemos. Fue lo que nos permitió seguir creciendo.
¿Fue fácil para el mercado uruguayo entender el servicio que ustedes ofrecían?
Fue difícil porque no se comprendía. Nosotros hicimos personalmente la venta e íbamos a la casa de las personas. Cuando empezamos a crecer un poquito más, nos pasó de recibir llamadas, en las cuales nos llegaban a pedir: “Quiero que me manden una rubia, de tal edad”. Teníamos que explicar que ese no era el servicio que ofrecíamos.
A través del software Compañía Ideal, Amec busca el mejor acompañante para cada paciente
¿Cuáles son los valores con los que se identifica Amec?
Nosotros tenemos una filosofía, que está presente en todas nuestras capacitaciones, y es la vocación de servicio. Antes yo daba algunos de los cursos de servicio de acompañantes y siempre les decía: “Si alguno no quiere o no le gusta esto, que no lo haga por dinero, por favor. Si es así, le pido que levante sus cosas y se vaya”. Es que es importante que te guste lo que hacés. Después está la comprensión, que es ponerse en el lugar del otro. Qué pasaría si yo tuviera su edad, si tuviera ese dolor, cómo me sentiría. Es fundamental pensar así. También son valores importantes el recto pensar, el recto hablar, el recto actuar.
¿Todos los acompañantes tienen que hacer el curso?
Tienen que hacerlo todas las personas que trabajan en Amec. No importa quiénes sean, todos hacen el curso adaptado a lo que va a ser su trabajo. El curso se corona con el amor, el altruismo y la paz. Por eso somos una empresa en la que tú entras y todo el mundo te saluda y te sonríe.
Los acompañantes además hacen prácticas, ¿no?
Sí, es algo en lo que empezamos a trabajar desde el día uno. Al principio hacían prácticas en el Hospital Pereira Rossell, de forma gratuita, antes de empezar a trabajar. Hoy hacen las prácticas in situ. Tenemos un diploma, que es un certificado como acompañante profesional. Fue una de nuestras primeras visiones, transformar el acompañante en una profesión. En aquel momento, la competencia eran las enfermeras, que cobraban por hora al cliente. No existía aún la regulación del sector. Pero es diferente, el enfermero toma la presión, mide los valores y se va. El acompañante es el que recrea a la persona. Hoy tenemos un sistema de software, llamado Compañía Ideal y creado por nosotros mismos, que cruza las preferencias y gustos de los clientes con las habilidades y gustos del acompañante. Esto se ha realizado desde el día uno de forma manual, lo que nos ha permitido el desarrollo del software. El sistema busca el mejor acompañante para la persona. Por ejemplo, si a la persona le gusta la música, buscamos un acompañante con el mismo gusto. No es solo tener una compañía, sino tener una buena compañía. Esa es la clave de nuestro éxito.
A través del contacto con la cultura tailandesa, especialmente mediante el taichí, Amec procura el bienestar terapéutico y la prevención de enfermedades
Intentan dar un servicio personalizado.
Sí, el servicio es 100% personal. Nosotros medimos la satisfacción de nuestros clientes de forma permanente. Hoy tenemos un 98% de satisfacción. Nuestro principal objetivo es brindar experiencias memorables. Nuestros acompañantes se ocupan de tres aspectos. El más importante es la recreación de la persona. El segundo es la parte técnica, la evaluación de la persona, si comió, tomó los medicamentos, etc. Y el tercero es la relación con la familia.
¿Cómo funcionan las actividades recreativas?
Nosotros éramos un servicio de acompañantes que después migró a algo diferente y agregamos recreación y bienestar. El área de recreación tiene casi 15 años, empezamos con paseos a distintas partes del Uruguay. Luego, como vimos que había personas con dificultades para hacer esos viajes, lanzamos Tardes Montevideanas, un servicio que sale todos los días y realiza paseos por Montevideo guiados por una persona especializada. Es para personas mayores de 70 años, afiliados a ese plan. También buscamos propuestas internacionales. Vamos a Europa, Estados Unidos, Argentina, Brasil, Perú, con la especialidad del adulto mayor. Son viajes de calidad, no de cantidad. Viajes de disfrute, con calma. Son experiencias memorables.
Las clásicas caminatrotas de Amec promueven la vida saludable
¿En el área de bienestar qué ofrecen?
Empezamos hace bastantes años con educación física, con actividades al aire libre. Incitamos a la persona a salir, inclusive en invierno, para aprender a disfrutar también del frío, pero bien abrigados. Tenemos tres grupos distintos: el grupo de personas con andador o bastón, de las cuales muchas terminan dejando el bastón; el grupo intermedio, que hace tonificación de músculos, estiramiento y trabaja la parte cardiovascular; y en la pandemia sumamos gimnasia online.También tenemos taichí desde hace unos años. Hoy nuestra visión es ayudar a nuestra sociedad a tener una longevidad saludable. Empezamos con el área de recreación, hace muchos años, porque nos dimos cuenta de que lo que provoca más enfermedad es la mente y la posición mental de la persona ante la enfermedad. Queremos llegar a la persona antes de que esté enferma, queremos hacer prevención. Por eso, ahora estamos construyendo un forum, cerca de Tres Cruces, de 1.300 metros cuadrados, donde la persona va a poder hacer distintos tipos de actividades y terapias.
¿Va a ser como un gimnasio?
Se va a llamar Forum Bienestar y va a ofrecer un compendio de actividades para lograr la longevidad feliz y saludable. Va a ser para todas las edades, a partir de los 35 años. Vamos a tener una área de gimnasia, con todo tipo de gimnasia, taichí, yoga y aparatos de última generación traídos de Europa, como bicicleta en el agua. También va a tener una zona de spa, en lo que ya hemos incursionado. Tenemos un centro de terapias tailandesas, que se llama Espacio Zen y se encuentra en Zonamerica. Las terapias las practican nativos de Tailandia. Luego las empezamos a ofrecer a domicilio a nuestros clientes adultos y fueron un éxito. Las vamos a tener ahora en Forum. También habrá acupuntura, shiatsu y fisioterapia. Forum va a tener una cuota diferente, como una cuota de club. Y los tratamientos van a tener un costo aparte.
En 2017 se realizó Expo Amec, un día lleno de experiencias para celebrar el aniversario de la institución
Todo lo que ofrecen es parte de lo que hoy se llama economía plateada, un sector en crecimiento. ¿Cómo se proyectan a futuro?
Consideramos importante luchar para conseguir un sistema social flexible que permita al adulto mayor trabajar a su ritmo cuando lo desea; esto tiene dos consecuencias muy favorables: mantener la salud física y mental por medio de una ocupación y aumentar su nivel de ingresos. Por eso hemos mandado una carta abierta al gobierno en la que solicitamos eso. Así como un inversor puede ver en Uruguay un océano de mercado, cuando estás acá te das cuenta de que el adulto mayor siempre se queja de que su jubilación es poca y los precios son altos. Pero nuestros servicios no solo apuntan a la economía plateada. Las terapias tailandesas son para todo público, incluso son muy recomendables para jóvenes en plena actividad laboral, ya que combaten el estrés.