A comienzos de abril, el Frente Amplio decidió frenar la aprobación de algunas venias de designaciones en organismos estatales porque no había un buen “clima” político con la oposición.
A comienzos de abril, el Frente Amplio decidió frenar la aprobación de algunas venias de designaciones en organismos estatales porque no había un buen “clima” político con la oposición.
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáUn mes después y luego de reuniones con el presidente Tabaré Vázquez, el clima cambió, según el oficialismo. Por eso, el miércoles se votaron las venias para completar el Directorio de Ancap: Ignacio Berti por el Frente Amplio y Diego Labat por el Partido Nacional.
También se aprobaron las venias para designar al directorio del Instituto de Inclusión Social Adolescente (Inisa): Gabriela Fulco y Eduardo Katz por el oficialismo y Álvaro Viviano por el Partido Nacional.
El Senado también aprobó la designación de embajadores, aunque en este caso se generó un debate entre legisladores de la oposición y del oficialismo.
Marion Blanco fue designada como embajadora en Bolivia y Fernando Arroyo en El Salvador. El hecho de que ambos sean diplomáticos de carrera y no políticos fue destacado por legisladores de la oposición, mientras que desde el Frente Amplio defendieron la posibilidad de que el gobierno designe a personas de confianza política.
“Es muy bueno lo que viene haciendo la Cancillería, privilegiando a los embajadores de carrera, el profesionalismo, a los formados frente a las designaciones de índole política”, dijo el colorado Pedro Bordaberry.
El legislador evaluó que el actual período de gobierno “es mejor” respecto a la administración de José Mujica, en el que dos decenas de embajadores no eran de carrera sino de confianza política.
“Mucho se habla en materia de política exterior, de política de Estado, creemos que una política de Estado es justamente apostar al profesionalismo. Esa política que reclamamos la sustentamos con la convicción de los hechos, porque es públicamente conocido en esta cámara, que ante alguna solicitud que ha venido últimamente, y que no llegó a tratarse en el plenario, nuestra posición, pese a contemplar intereses partidarios fue en contra de ello”, dijo.
De esta manera, Bordaberry se refirió a la decisión del gobierno de retirar la solicitud de designar al ex vicepresidente Luis Hierro López como embajador uruguayo en Perú. El planteo salió de la Cancillería pero no contaba con el respaldo de la bancada del Frente Amplio ni de Bordaberry. La semana pasada, Hierro escribió una carta en la que lamentó la decisión del oficialismo de no acompañar la propuesta de su propio gobierno. “Prevalecieron en la bancada oficialista el sectarismo y la intolerancia, así como la confesada intención de que los cargos deben ser para ‘los frentistas’, actuando con mezquindad y sin altura de miras, lo que recorta y achata las perspectivas del país”, afirmó.
Pablo Mieres (Partido Independiente) resaltó la decisión de la Cancillería de “recuperar la profesionalización del servicio exterior”.
El senador oficialista Ernesto Agazzi dijo que no le parece válido distinguir entre embajadores de carrera y de confianza política. “Los señores embajadores tienen que ser los mejores para representar los intereses del Uruguay. Hay países que acuden a dirigentes empresariales que tienen un conocimiento de su actividad. Eso hace el gobierno japonés o el norteamericano, porque tienen como objetivo defender los intereses económicos y comerciales de su país”.