La llegada del verano europeo causó expectativas de reactivación de la demanda, ya que reabrieron bares y restaurantes, aunque con capacidad limitada por las medidas sanitarias aplicadas (Búsqueda N° 2.073).
En el período 2017-2018 el ingreso por concepto de exportaciones cárnicas realizadas dentro de las cuotas fue de US$ 72 millones en Hilton, de US$ 143 millones en 481 y de US$ 115 millones en EE.UU., indican los registros del Inac, que muestran además que en el ejercicio 2018-2019 el monto de esos negocios fue de US$ 68 millones, US$ 131 millones y US$ 128 millones, respectivamente. Mientras, según Inac, en el reciente período 2019-2020, cerrado el 30 de junio pasado, los ingresos fueron de US$ 47 millones (Hilton), US$ 116 millones (481) y US$ 158 millones (EE.UU.).
Precios
La mirada a mediano plazo, que es posible realizar mediante los datos de Inac, deja en evidencia una constante reducción de los valores de los cortes históricamente más valiosos del cupo europeo (bife angosto, lomo y cuadril).
El precio promedio de la cuota Hilton bajó de US$ 11.600 la tonelada en 2017-2018 a US$ 10.510 en 2018-2019 y luego volvió disminuir para quedar en US$ 10.240 la tonelada en 2019-2020, según Inac.
Fue así que atrás quedaron los mejores años para los exportadores de carne uruguaya, cuando lograban precios de unos US$ 14.000 por tonelada dentro de ese contingente.
Es que desde la epidemia de fiebre aftosa, que afectó al rodeo uruguayo en 2001, cuando varios países cerraron sus mercados a las exportaciones de carne uruguaya, en adelante nunca se dejó de cumplir con los embarques dentro del cupo arancelario Hilton para Europa y mucho menos en un volumen considerable como ocurrió ahora, dijeron a Búsqueda operadores del sector.
En el reciente ejercicio 2019-2020, cerrado el 30 de junio, quedaron casi 1.770 toneladas sin enviar a ese mercado, ya que del total de 6.376 toneladas de carne vacuna de alta calidad que le asignó la Unión Europea al país hubo 28% de ese volumen que no se cumplió debido a la caída de la demanda por la pandemia de Covid-19, según Inac.
Del total de ese cupo hubo certificados utilizados por 4.530 toneladas, lo que comprende 71% del volumen asignado a Uruguay.
Considerando el volumen que no se cumplió y el precio promedio de la Hilton en el último ejercicio, el monto que se dejó de percibir por ese concepto es de unos US$ 18 millones, según cálculos de Búsqueda.
La carne exportada dentro de ese régimen tiene un arancel intracuota de 20% y los envíos por fuera de cupo deben abonar un arancel de 12,8% más 3.034 euros por tonelada.
Con granos
Uno de los negocios que tuvo mayor impulso en la última década fue la exportación de carne de vacunos alimentados con granos en cierto período de su engorde, específicamente para colocar en el mercado europeo.
La carne embarcada para el cupo 481 (número de la resolución europea q±ue establece las condiciones de ese negocio) debe cumplir con ciertos requisitos como ser producida de novillos menores de 30 meses y engordados únicamente con raciones constituidas por no menos de 62% de concentrados o coproductos de cereales piensos en los 100 días previos a la faena.
El volumen total de esa cuota es de 48.200 toneladas de carne vacuna producida en esas condiciones y a la que pueden acceder EE.UU., Nueva Zelanda, Canadá, Australia, Uruguay y Argentina.
A partir de un reclamo del gobierno estadounidense en cuanto al acceso a dicho contingente, en 2019 la UE dispuso algunas modificaciones en las que se considera que esa alternativa de negocios fue creada como una compensación a los ganaderos norteamericanos en un litigio comercial anterior.
Lo cierto es que EE.UU. tendrá una mayor porción del volumen total de la 481, mediante un proceso gradual de incremento hasta quedarse con casi el 80% en siete años. Eso representará una reducción progresiva de la cantidad de cuota que podrá acceder Uruguay, al igual que otros países competidores.
Otra diferencia de ese cupo respecto al Hilton es que se otorga a los importadores y abarca una canasta más amplia de cortes cárnicos, además de tener un arancel 0.
La pérdida de atractivo del negocio puso en alerta a los exportadores locales y a los empresarios del feedlot que buscan alternativas de mercados para ese tipo de producción. Uno de los nichos apuntó a Asia, específicamente a China y Japón, pero también surgieron planteos relativos a Europa.
En ese sentido, las gremiales de la industria frigorífica y la Mesa de Alimentación a Corral realizaron gestiones en el Ministerio de Ganadería y en el Inac para avanzar en la propuesta de modificar el término dispuesto en la normativa europea de la cuota Hilton, en cuanto a que los vacunos a ser faenados para ese negocio deban ser “exclusivamente” alimentados a pasto. La idea es poder cambiarlo por “preferentemente” con base pastoril, lo que podría dejar abierta la posibilidad de producir ganado con raciones de granos, algo parecido a lo previsto en la 481.
Ese planteo no es compartido por algunos sectores ganaderos y políticos vinculados al agro, que argumentaron la importancia de mantener y defender la diferenciación de la producción cárnica uruguaya, así como el riesgo de que los frigoríficos propietarios de feedlot se apoderen del negocio.
Del total de la faena de vacunos del primer semestre de este año el 14% correspondió a animales provenientes de corrales de engorde, así como el 22% de los novillos y el 29% de las vaquillonas faenados, según datos de Inac divulgados por el representante de la Comisión de Fomento Rural en la Junta Directiva de ese organismo, José Mesa, en su cuenta en twitter.
Indican además que la participación de ganado de feedlot en la faena aumentó 11% en la primera parte de 2020, registrándose picos de 25% en febrero y de 17% en mayo.
La cuota USA
A diferencia de lo ocurrido con el ingreso total y el precio promedio de las cuotas europeas, el contingente arancelario para exportar carne a EE.UU. de 20.000 toneladas anuales registró mejores resultados en el último ejercicio, con una tendencia al alza en sus indicadores.
El valor promedio de la tonelada embarcada para ese cupo pasó de US$ 6.314 en 2017-2018 a US$ 7.124 en 2019-2020, conforme a los registros de Inac.
La cuota USA recobró interés de los exportadores de carne uruguaya en los años recientes, ya que en algunos años de la década pasada no se llegó a cumplir en su totalidad, debido a que otros mercados daban mayores márgenes de rentabilidad.
Ese contingente de uso exclusivo y administrado por Uruguay tiene un arancel intracuota de US$ 44 por tonelada, y por la carne vacuna exportada por fuera debe pagar un arancel aduanero de 26,4%.
Las exportaciones cárnicas de Uruguay en 2019 requirieron el pago de US$ 222 millones en concepto de aranceles aduaneros, de los cuales US$ 205 correspondieron a carne vacuna y US$ 17 millones a menudencias, señala un informe del Inac divulgado en los últimos días, lo que indica que el monto abonado de aranceles para concretar la exportación de esos productos tuvo un incremento significativo (42%) desde 2013, cuando fue de US$ 152 millones.
En 2018 y 2019 hubo un aumento del pago de aranceles de los embarques cárnicos debido al mayor volumen exportado a China, que tiene un arancel aduanero de 12%.