Comisión.
Desde 2007 De Santa Ana es gerente de Exploración y Producción de Ancap. Desde 2009 organizó dos rondas en las que se presentaron empresas privadas, algunas de las cuales exploran hoy en tierra y mar. Según el gerente, con la fórmula encontrada, el Estado obtiene más del 70% de las ganancias de los proyectos entre los impuestos, el profit, la contribución al Estado y la ganancia del consorcio por la vía de Ancap, que puede asociarse en los proyectos.
La Ronda III fue aprobada por Ancap en diciembre de 2012, pero todavía no tiene el visto bueno del Ministerio de Industria. Para De Santa Ana, el retraso se debe a que el gobierno evalúa si “era oportuna una nueva ronda ahora, si había que pensar otros temas”.
Desde hace tres meses está trabajando la Comisión Nacional de Hidrocarburos, creada por el gobierno para “ir preparando al país para que esté en las condiciones adecuadas para que el petróleo se transforme en una bendición” y no se genere un “recalentamiento de la economía” ni haya consecuencias sociales y ambientales indeseables, explicó a Búsqueda el director nacional de Energía, Ramón Méndez.
“Hay transformaciones que no se pueden hacer cuando aparece el petróleo sino que hay que prepararlas con anticipación. Es mejor tomar las decisiones cuando no tenés petróleo que cuando ya tenés el petróleo. Era el momento”, dijo.
La Dirección de Energía del Ministerio de Industria generó un equipo de trabajo en el que participan todos los ministerios menos los de Salud y Desarrollo Social, más Ancap y la Oficina de Planteamiento y Presupuesto “para empezar a montar una política petrolera en Uruguay”. Se crearon siete grupos de trabajo.
Una es la coordinación de actividades en el territorio, en la que trabaja la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara). La idea es generar una línea de base de los recursos del mar.
El director de Dinara, Daniel Gilardoni, considera que la creación de un grupo de trabajo para discutir y tomar decisiones coordinadas sobre el uso del espacio marítimo “era una aspiración que Dinara empezó a manejar desde el 2011”, cuando comenzaron a trabajar con Noruega en un proyecto de cooperación que recomendó formar una comisión de alto mandato político para tratar de abordar los temas relativos a las aguas uruguayas y su margen continental.
“De alguna manera la Comisión Nacional de Hidrocarburos abordó este tema, en especial uno de los grupos sobre la coordinación de las actividades —que se harán en aguas uruguayas—. Llegado el momento de coordinar pesca e hidrocarburos se tendrá que tener en cuenta” a todos, dijo Gilardoni a Búsqueda.
Otro grupo estudia la capacitación de recursos humanos, con la intención de dejar un plan de capacitación porque “se precisa gente”, dijo Méndez.
También se trabaja en el desarrollo de capacidades en investigación para generar una cadena de valor.
Además hay un grupo de trabajo legal. Méndez informó que “en algún momento” será necesario hacer “alguna modificación” para definir “cómo se fiscaliza”. Puede haber “desde ajustes menores hasta algún tema mayor”.
Un quinto grupo estudia el manejo de la renta petrolera, “un tema central”. El director de Energía sostuvo que los países exitosos no vuelcan en la economía todos los ingresos del petróleo sino que generan un fondo. Noruega, el modelo que tomó Uruguay, vuelca al presupuesto solo el 5% de la renta; el resto va a un fondo intergeneracional. Uruguay tiene “una deuda social” que puede hacer “interesante” usar un porcentaje mayor al 5% al principio, sostuvo Méndez. La comisión ya ensayó algunos modelos posibles para el manejo de esa renta.
También se trabaja en un grupo de salud, seguridad y ambiente. Las actividades de sísmica en el mar en busca de petróleo —que se realizaron en el último año y que suponen un riesgo para el ecosistema— no requieren una autorización ambiental previa en el país.
Gilardoni informó que Dinara propuso un proyecto de decreto que “todavía está a estudio” para que las operaciones de sísmica necesiten un autorización ambiental previa. “El Ministerio de Ganadería lo compartió. Había consenso, a esta altura debe estar en el Ministerio de Vivienda”, estimó.
Además, en la próxima etapa habrá un pozo en aguas profundas a 250 kilómetros de la costa. La empresa Total pidió a la Dinama las condiciones para hacerlo. “La idea es hacer todos los controles”, dijo Méndez.
La Administración Nacional de Puertos negoció con Ancap un sitio para operar los trabajos. Según Méndez, si hay petróleo explotable,“el puerto de aguas profundas se paga solo”.
El último grupo de trabajo evalúa redefiniciones institucionales. El director de Energía dijo que “en casi todos los países del mundo hay una autoridad específica que se llama agencia de petróleo, que maneja cosas que en Uruguay están sin una definición clara, como el tema de las licencias”.
“El Estado históricamente concentró en Ancap todas las responsabilidades del sector y en el mundo se observa que el petróleo exige una gobernanza colectiva. Es un armado institucional que hoy no tiene nuestro país”, explicó.
El objetivo de la Comisión Nacional de Hidrocarburos es tener un primer balance para cuando termine el actual gobierno, el último día de febrero, y dejar una hoja de ruta para que tome la próxima administración.
Méndez dijo que algunas cosas son urgentes, como establecer la línea de base y fortalecer capacidades, entre ellas recursos humanos de diferentes sectores. “La idea es que el gobierno lo tenga en cuenta para el armado presupuestal”, afirmó.
Pero no todos en el Estado están de acuerdo.
“Mando yo”.
Héctor de Santa Ana es crítico sobre la Comisión Nacional de Hidrocarburos, que “constituye cientos de personas”.
El gerente reconoce que “los temas que se están planteando son importantes” y que hay “una preocupación real, que es la capacitación”.
“Pero seguimos siendo, hasta que haya cambio de ley, los que regimos en el tema petrolero. Si hay un cambio en cuanto a la visión de dónde debe estar la actividad de exploración y producción, porque el país lo resuelve, uno tiene que asumir la nueva visión del país y punto”, dijo a Búsqueda.
“La comisión es una parte, hay cientos de partes que miran la actividad, lo cual para nosotros está bueno. Pero acá en esto mando yo. Las comisiones son comisiones de apoyo muy importantes pero la responsabilidad, si pasa algo, que pueden pasar muchas cosas malas, es mía. A mí no me digas tú lo que yo tengo que hacer. Yo ya demostré con resultados lo que yo puedo y sé hacer. ¿Querés otro proyecto? Hay mucha más gente capaz, pero decir desde una oficina lo que yo tengo que hacer, absolutamente no”, afirmó.
El jerarca dijo que Ancap trabajó en “todas las líneas que planteó la comisión” pero “no tuvo otra opción que integrarse como uno más y contribuyó en lo que le dijeron que podía contribuir”.
“Trabajamos con la comisión, estamos de acuerdo con la comisión. Tenemos que tener más confianza. No hay la suficiente. Y más equilibrio. Y eso no quiere decir que Ancap lidere la exploración y producción de petróleo. A pesar de que por ley la lidera. Lo que no queremos es tener una participación que no sea igual en todos los que estamos participando”, agregó.
Sostuvo que en la preparación de las rondas petroleras participó el Ministerio de Industria y analizó contrato por contrato. De Santa Ana afirma que “hay proyectos que no se pueden detener”.
“No hay que dejar de pensar que no tenemos petróleo todavía, que estamos explorando la posibilidad de tenerlo, y no estamos cerquita, cerquita, como podemos pensar”, afirmó.
A diferencia de lo que opina Méndez, el gerente de Ancap cree que no se puede “hacer un crecimiento” mientras no se sabe si hay petróleo explotable.
“Vamos a producir gente para trabajar en el área petrolera dentro de tres años porque va a haber petróleo. Eso no está bien. La formación tiene que ser equilibrada y escalonada en función de las necesidades”, sostuvo. Dice que Ancap ya dicta posgrados y cursos de capacitación porque se precisan “muchos técnicos”.
La “única condición” que puso para estar al frente del proyecto petrolero era que su gerencia fuera “la agencia petrolera uruguaya”.
“Quiere decir que nosotros no podemos participar ni competir como agencia petrolera en nada de lo que tiene que ver con la exploración petrolera. ¿Yo cómo participo como operador? Tomando un bloque piloto que tiene otros objetivos que explorar petróleo. Yo dije que hago este proyecto como unidad regulatoria del Estado. No voy a pedir jamás ni competir en un bloque con una empresa. Es la potestad que tengo, controlo los contratos, controlo los pagos. Eso lo puede hacer, cambiando la ley, cualquiera. Es el Ministerio que nos cede la potestad de hacerlo”
Pero Ancap tiene la potestad de asociarse con quienes sigan adelante hacia la producción petrolera, y para eso De Santa Ana propuso crear una sociedad anónima dentro de Ancap para “cuando trabaje dentro de un ámbito que no es el de regulación o donde el Estado pueda funcionar fluidamente”.
“Tendrás que tener todos los mecanismos de control que se quieran, pero tenemos que tener un instrumento que pueda ser rápido”, explicó. Dice que Ancap necesita esa empresa antes de confirmar que haya petróleo. Piensa usar alguna sociedad anónima que ya exista, “dejarla stand by pero definir un lineamiento estratégico”.
El gerente está “a favor de que cuando haya producción se genere un ámbito diferente” pero no ve sentido a que “no teniendo todavía petróleo se genere una unidad con una estructura administrativa y política”.
“Esa es la diferencia que tenemos. Una vez que se defina que hay petróleo, que sea comercial y que Ancap decida participar con una empresa, en esas circunstancias lo lógico es que haya una agencia o el Ministerio se ocupe directamente de eso. Tenemos una diferencia profunda en hacerlo ya, armar una estructura en un ámbito en que todavía no tenemos petróleo. La agencia debería venir con el primer yacimiento económico desarrollable de petróleo”.