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Si bien en 2012 la economía uruguaya creció más lento que en años anteriores, el mercado laboral se mostró en una situación de virtual “pleno empleo” —lo que implica que la mayoría de las personas sin trabajo lo están de forma transitoria o porque sus características los hacen más difíciles de contratar—. Con la convicción de que algunos de esos grupos requieren de políticas especificas para que logren acceder a un puesto, la Dirección Nacional de Empleo (Dinae) está ejecutando algunas medidas e impulsa otras, como subsidiar parte del salario para la contratación de personas mayores de 45 años de edad que se encuentren desocupadas.
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Según informó el Instituto Nacional de Estadística (INE) el jueves 14, en diciembre la tasa de empleo alcanzó su máximo registro desde que la releva, un 62,1% de las personas en edad de trabajar (14 años o más).
A su vez, la tasa de actividad también se ubicó en un nivel récord y 65,7% de los que tenían edad de trabajar pretendieron conseguir un empleo.
Por ello, la tasa de desempleo se aproximó a sus valores históricos más bajos; 5,5% de las personas que desearon trabajar en el último mes de 2012.
En el promedio del año pasado dichas tasas fueron 59,9% la de empleo, 63,8% la de actividad y 6,1% la de desocupación. Hubo unas 104.000 personas sin trabajo y 1.620.000 empleadas cada mes de 2012, en promedio.
El 29% de los ocupados eran trabajadores “precarios”; unas 430.000 personas realizaban su actividad sin cobertura de la seguridad social (“en negro”) o menos de 40 horas semanales y que deseaban fueran más (“subempleo”).
El ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, destacó “el significativo crecimiento” que mostró el nivel de empleo en diciembre, lo que según dijo “implica la generación, de un mes a otro, de más de 50.000 puestos”, según una nota de prensa publicada en el sitio web de su cartera. En base a ese dato afirmó que en diciembre se salió “del período de meseta” para entrar “nuevamente en un proceso de generación de nuevos puestos de trabajo”.
Los diez analistas privados consultados por el Banco Central para su encuesta de expectativas económicas de febrero opinaron —en mediana— que el nivel de empleo prácticamente se mantendrá este año respecto al 2012.
Planes.
En la Dinae se proponen continuar apoyando en la búsqueda de empleo a las categorías de trabajadores que son más difíciles de emplear, dijo a Búsqueda Eduardo Pereyra, director de esa repartición del Ministerio de Trabajo.
El sitio web “Vía Trabajo” tiene unas 40.000 personas inscriptas y 1.100 empresas. De esos aspirantes unos 1.300 recibieron orientación directa para poder acceder a un puesto; desde instrucciones para crear su currículum hasta los valores sobre puntualidad y presentismo que sirven para la inserción laboral.
Este año la Dinae espera duplicar esos servicios de orientación y también las empresas inscriptas, dijo el jerarca.
Un colectivo a atender es el de los trabajadores rurales mediante una campaña para informar sobre sus derechos y obligaciones, entre otras acciones.
Por otro lado, a través de los Centros Públicos de Empleo (Cepe) que hay en cada departamento también se direccionan los recursos del Programa de Inversión Productiva (PIP) que financia la compra de herramientas que permitan a los solicitantes realizar su trabajo o contratar más trabajadores (lavadoras industriales, soldadoras, hornos, etc.). Las cuotas de esos créditos son sin intereses y luego forman parte del fondo adicional de cada departamento para otorgar el próximo año.
En 2012 la totalidad de créditos del PIP fue poco más de un millón de pesos, un monto que se prevé duplicar este año, informó Pereyra.
Por otra parte, destacó que se comenzó a trabajar con Argentina y Brasil en el intercambio de información de la que disponen los Cepe locales y sus similares en esos dos países, de manera de facilitar la circulación de trabajadores que se puedan necesitar en un país y estén disponibles en el otro. “Se ha avanzado bastante con Argentina, con Brasil aún no”, detalló.
A su vez, a partir del Diálogo Nacional por el Empleo realizado en 2012 se alcanzó un acuerdo para unificar las opciones de capacitación que actualmente brindan distintos organismos públicos. En esa línea, este año comenzará a funcionar un grupo conformado por el Ministerio de Educación y Cultura, la Universidad de la República y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto que prevé lanzar planes de capacitación para trabajadores de los sectores forestal y de la construcción, informó.
Mayores de 45.
Dentro de los planes de la Dinae para este año se destaca el lanzamiento de un subsidio para la contratación de desempleados de 45 años o más. Pereyra explicó que es una franja “compleja” de desocupados, ya que si bien no se trata de la de mayor número de personas sin trabajo, la integran en general jefes de hogar cuya situación laboral “incide fuertemente en el contexto familiar”. Además, la duración del desempleo en esas edades supera a la de los jóvenes.
En 2012 los desempleados mayores de 45 años eran unos 20.000.
Los subsidios propuestos serán equivalentes a 60% de dos salarios mínimos ($ 9.500 en la actualidad) para los hombres y 80% ($ 12.700) para las mujeres. “Es una discriminación positiva”, ya que a su vez se espera fomentar el empleo femenino, explicó Pereyra.
Añadió que esos subsidios no significan un aumento del gasto ya que se utilizarán recursos de otros programas como Objetivo Empleo, del que también se financiarán los subsidios para los jóvenes.
Las condiciones de este plan para mayores de 45 años serán definidas en los próximos meses y se espera que esté operativo en 2013. Sin embargo, ya está resuelto que se exigirá que la empresa contratante no tenga despidos recientes y que el trabajador haya estado previamente desempleado (por un período a definir). Esa persona no se requerirá que esté inscripta de antemano sino que incluso puede ser propuesta por la misma firma para su reclutamiento laboral.
Jóvenes.
Pereyra da por hecho que en los primeros meses del año el Parlamento aprobará el proyecto de ley que prevé subsidios a la contratación de jóvenes estudiantes o que tengan hijos a cargo, fija horarios que les permitan continuar los estudios, la realización de prácticas laborales para egresados y exoneraciones a la capacitación dentro de las empresas, entre otras medidas.
A su vez, el plan “Yo estudio y trabajo” que se delineó en “tiempo récord” en la primera mitad del año pasado mientras se discutía sobre la problemática de los llamados jóvenes “ni-ni”, fue evaluado como de “gran éxito” por Pereyra. Resaltó el interés desde empresas privadas y organizaciones sindicales por participar.
En 2012 unos 46.000 jóvenes de entre 16 y 20 años se anotaron en ese programa y 614 fueron sorteados para trabajar un año en empresas y organismos del sector público mientras continuaban con sus estudios. Según Pereyra, prácticamente no hubo deserción por parte de los participantes.