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Los senadores del Frente Amplio aún no tienen claro de dónde se sacarán los recursos para evitar que la educación se vea resentida con la aprobación de la Rendición de Cuentas. Y tampoco definieron qué harán con el polémico artículo que elimina la posibilidad de que las empresas puedan exonerar impuestos cuando hacen donaciones a las universidades privadas.
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El Poder Ejecutivo había planteado postergar para 2017 los gastos previstos en distintas áreas, por un total de $ 2.588 millones. Durante la discusión en la Cámara de Diputados, los legisladores oficialistas acordaron que $ 860 millones destinados al área social, y en especial a la educación, no se postergaran. En el oficialismo aún no acordaron de qué área se recortará para resignar ese dinero.
“Esperamos que la instancia de Rendición de Cuentas en el Senado sea fructífera y permita finalizar el trabajo de la redistribución”, se limitó a comentar el subsecretario de Economía, Pablo Ferreri.
El otro tema que deberán analizar los legisladores oficialistas refiere a qué hacer con las exoneraciones a las empresas que donan dinero a las universidades privadas. Para algunos legisladores se debe aprobar la medida mientras que otro grupo, perteneciente al Frente Liber Seregni, plantea que se trate en un proyecto aparte.
Al asistir al Senado el lunes 15, Ferreri reiteró la postura contraria del Ministerio de Economía a eliminar la exoneración.
“Tanto el señor ministro de Economía y Finanzas como en mi caso nos hemos manifestado con respecto a este régimen, que entendemos que es positivo. Fue instaurado en el primer gobierno del Frente Amplio y se trata de aspectos que no solo tienen que ver con universidades privadas, sino también con otros tipos de instituciones educativas. En el caso de las universidades privadas, los fondos tienen determinados destinos, que era lo que se preveía cuando esto fue instaurado y que me parecen positivos. En concreto, estamos hablando del financiamiento de becas, por un lado, y de aspectos vinculados a investigación e innovación, por otro. Pero además del destino de los fondos, también se genera algo que para nosotros, tanto en el caso de las universidades privadas como de la Universidad de la República —que recordemos que también puede utilizar, y utiliza, este mecanismo—, es muy importante: una interacción entre la academia y el sector privado. Muchas veces vemos que la producción de conocimiento científico puede tener problemas de trasvase en su aplicación real en el sector privado y entendemos que esta es una herramienta que colabora para solucionar esos problemas”, afirmó.
El miércoles 17, la ministra de Educación, María Julia Muñoz, fue consultada en la comisión del Senado sobre este punto. Según informaron participantes de la reunión, la ministra prefirió no opinar.