Cuando en 2009 Pilay comienza su camino en Uruguay, prácticamente nadie hablaba de inversión en el rubro inmobiliario, menos aún de hacerlo en pesos uruguayos. Su producto era totalmente innovador: ahorrar en ladrillos, para esto lanza un fideicomiso con el objetivo de invitar a cinco mil inversores a pensar a largo plazo. Desde entonces, ha construido más de 400 apartamentos y tiene previsto construir 900 más en los próximos seis años, ubicados en distintas zonas como Parque Rodó, Tres Cruces y Ciudad de la Costa. “Creemos que hay que darle la oportunidad a todos, por eso pensamos siempre en aquel ahorrista que generalmente es desatendido, por los elevados valores de las propiedades”, comenta Javier Agustín Vigo, presidente de Pilay Uruguay a Trayectorias.
En 2021, la empresa fue aprobada por el Banco Central de Uruguay por el fideicomiso financiero M2 Pilay Uruguay. Otra revolución para el mercado inmobiliario, que permite al inversor ahorrar en inmuebles comprando metros cuadrados, desde 50 mil pesos, con un único pago y en pesos. “Nosotros queremos derribar mitos”, no es necesario asumir una deuda para comprar un inmueble, señala Vigo.
Pilay Uruguay tiene su inspiración en el modelo argentino, una empresa familiar que se propuso inculcar el ahorro en un país que no suele pensar a largo plazo, debido a los vaivenes económicos. Al desembarcar en Uruguay mantuvo su carácter familiar. “Queremos que quienes trabajan con nosotros sientan que esto es una familia, con valores. De hecho, tenemos la particularidad de que el 88% de nuestro personal son mujeres. Esto es porque siempre hemos contratado por capacidad”, subraya. De los comienzos del nuevo producto Metros Cuadrados y de los planes a futuro, Vigo conversó con Trayectorias, en las oficinas de Pilay Uruguay, ubicadas en un edificio de Campiglia Pilay VI en Buceo, junto a Paula Ferreira, gerente comercial y Victoria Cicala, responsable de Logística.
Con el primer fideicomiso, Pilay Uruguay ya construyó junto a una empresa constructora de renombre, 400 apartamentos. Fotos: Santiago Chaer
¿Cómo fueron los primeros años en el mercado uruguayo?
Javier: Fueron diferentes a lo que nos habíamos planteado. Nos encontramos con un producto que no tenía competencia en el mercado y con un mercado que prácticamente no hablaba de inversión. Nadie pensaba invertir en inmuebles en pesos uruguayos, nosotros fuimos los primeros. También nos encontramos con que más allá de que teníamos más de 30 años de experiencia en Argentina y un montón de inversores, la gente quería ver cómo cumplíamos en Uruguay. Entonces, los primeros inversores vinieron a las entrevistas con escribanos y contadores. El grado de innovación era muy fuerte para el mercado. Hoy estamos en un punto en que la gente nos compra metros cuadrados por la web. Hemos ganado esa confianza. Denominamos a nuestro producto base ahorro en ladrillo. Desde 2021 tenemos la aprobación del Banco Central de Uruguay para un nuevo fideicomiso financiero: M2 Pilay Uruguay, donde volvimos a innovar. El producto más nuevo se llama Metros Cuadrados Pilay y tiene como objetivo que todas las personas puedan invertir desde medio metro cuadrado en inmuebles. Siempre pensando en el ahorro a mediano y largo plazo en un mercado que quiere invertir en inmuebles, pero no encuentra opciones. Nosotros queremos derribar mitos. Hoy las propiedades en Uruguay tienen valores muy altos y son difíciles de acceder. Entonces parece que, para comprar un inmueble, hay que asumir una deuda. Nosotros decimos: no, podés ahorrar mensualmente con nosotros, a tu ritmo y sin un compromiso de esa magnitud.
En 2009, cuando arrancamos, no había nada parecido, hoy hay uno que otro fideicomiso financiero, pero no con las características que planteamos nosotros.
¿Siguen sin tener una competencia directa?
Paula: Sí, es un producto único por las características que mencionaba Javier. Sobre todo con el segundo fideicomiso, lo que se buscó fue democratizar la inversión de los uruguayos, dado que ya no te limitas a comprar una unidad en un punto de referencia. El producto Metros Cuadrados te permite comprar desde medio metro cuadrado, pudiendo comprar cinco metros en una ubicación y 10 metros en otra ubicación distinta. Esto da la posibilidad a casi todos los uruguayos que tengan una capacidad de ahorro desde 50.000 pesos, de ir obteniendo rédito a través de una inversión con un fin inmobiliario.
¿Las personas que invierten en Metros Cuadrados no necesariamente están comprando un inmueble para vivir?
Paula: Exacto, el producto Metros tiene tres modalidades. La modalidad simple consta de invertir, respaldado el capital en inmueble y obtener una rentabilidad a los 36 y 42 meses. La modalidad compra te permite adquirir el inmueble o tener una posición de expectativa sin tener que tomar una decisión en el momento, como pasa hoy en un pozo o con un desarrollador. La modalidad renta te permite tener una renta una vez que la obra está terminada, ya sea un apartamento o una cochera, se pone en alquiler y recibís la renta correspondiente semestralmente. Durante un plazo de 12 meses tenés una renta además de obtener el reintegro del valor de tus metros adquiridos. Una vez que se termina ese período, tus metros se colocan a la venta. Entonces ahí obtenés el reintegro de los metros que te correspondan.
Las oficinas de Pilay Uruguay se encuentran ubicadas en el Buceo en un edificio construido con el primer fideicomiso
Eso es diferente al que compra los ladrillos, ese sí está comprando un inmueble directamente, ¿no?
Paula: No necesariamente. En el producto tradicional, que es lo que nosotros llamamos producto ladrillos, tú realizas aportes mensuales con una cuota que puede ser desde los 11.000 pesos, para respaldarte desde un monoambiente, también puedes capitalizarte con unidades de uno o dos dormitorios. Pero no tenés que elegir la unidad a priori. Te aseguramos que los proyectos constructivos van a estar en zonas de alto valor locativo, por lo tanto cuando surja un proyecto, tu podés licitar por una unidad y ver efectivizada tu inversión con una unidad específica. En esto también nuestro sistema es muy innovador porque las licitaciones pueden ser de dos modalidades: por puntos o por dinero. La licitación por puntos implica que la persona puede sumar por el avance de los estudios tantos propios como de la familia, la antigüedad laboral, por estar casado y tener hijos o por presentar amigos al sistema. Con esos puntos se compite con otros clientes, sin tener que ingresar un capital para la licitación. La otra modalidad es ofertando dinero para competir con otros que quieran esa misma unidad.
¿Con qué empresa construye Pilay Uruguay?
Javier: Como política siempre elegimos una empresa constructora de renombre, porque es la forma de revalidar la confianza. Tenemos un hito y es que nuestra oficina está en la planta baja de un edificio nuestro. La mayoría no quisieran estar acá, sobre todo, cuando se entrega porque ahí es cuando suelen aparecer los problemas de humedades, pisos, etc. Nosotros ahora estamos cumpliendo un año acá y no hemos tenido clientes que nos hayan tocado la puerta. Eso da cuenta de la buena calidad de nuestras construcciones.
De las dos líneas de negocio, ¿cuál es la más requerida?
Paula: Los 14 años de experiencia de Campiglia Pilay difícilmente puedan competir con dos años aproximadamente de un nuevo fideicomiso y de un producto muy innovador, como Metros Cuadrados. El producto tradicional sigue cumpliendo con las necesidades que tiene el mercado de proyectarse a futuro, pero es difícil compararlo porque el otro producto es un producto más innovador. Metros Cuadrados llega a otro público, que está especulando dónde está la mejor rentabilidad. Al ser un producto en pesos, tiene además una connotación muy positiva por todo lo que ha pasado con el dólar en este último tiempo. Así que auguramos un muy buen crecimiento a corto plazo. Estamos tratando de instalar una manera de invertir totalmente innovadora: podés comprar desde medio metro cuadrado en una unidad de referencia sin tener que afrontar una deuda, ni de un inquilino el día de mañana.
¿El uruguayo se anima a invertir en propuestas innovadoras?
Paula: Creo que cada vez más se animan, sin lugar a dudas. Hoy más que nunca nos damos cuenta de que nuestra trayectoria viene a sumar confianza, pero también hay un mercado que está muy abierto, muy ávido de innovación y ya no quiere invertir o ahorrar en dólares. Quiere dinamizar sus inversiones y diversificar. El uruguayo tiene muy claro el concepto de que no debe colocar todo el dinero en una misma canasta, ahí es cuando nosotros somos una opción interesante. Victoria: La pandemia ayudó muchísimo a acelerar los tiempos. Algo que quizás hubiera demorado años, como la compra digital de metros cuadrados, la pandemia con el tema de la digitalización ayudó a que la gente se animara.
¿Tienen algún proyecto entre manos a corto plazo?
Javier: Tenemos proyectos ambiciosos. En el fideicomiso nuevo que lanzamos, pedimos una autorización para administrar 2.400 millones de dólares, eso representaría 14.000 viviendas, lo que realmente tendrá un impacto muy fuerte en Uruguay. El concepto Metros Cuadrados realmente está revolucionando el mercado y nos imaginamos que en un mediano plazo la gente va a tener diferentes tipos de metros. Hoy vas a un desarrollador tradicional y te dice: “Tenés que elegir esta unidad y comprarla”. Nosotros decimos: “Vamos a cambiar la cabeza, vamos a comprar cinco metros en Parque Rodó, cinco en Tres Cruces y cinco en Malvín”. Y a su vez, damos un paso más: que sean metros de cowork, metros de oficina, metros de cochera, que diversifiques. Estamos cambiando la forma en que se invierte en inmuebles en Uruguay y la forma en que el consumidor va a querer comprar.