Próxima instalación de IMAE en el Hospital Militar genera controversia en el oficialismo y la academia y acelera apertura del primero del interior

Los IMAE son centros públicos y privados que brindan asistencia altamente especializada en diversas áreas, como por ejemplo la cardiológica, financiados por el Fondo Nacional de Recursos (FNR). De hecho, ya hay siete centros en la capital dedicados a hacer intervenciones quirúrgicas y no quirúrgicas para pacientes con problemas cardiológicos. En el oficialismo, por tanto, existe el debate respecto a cómo fortalecer el sector público y, más aún, cómo revertir el hecho de que la mayoría de los procedimientos son financiados con dinero público pero realizados en centros privados.

Según chequeó Búsqueda, la mayoría de los sectores que conforman el Frente Amplio —entre ellos los que integran el Frente Líber Seregni, Partido Socialista y miembros del Espacio 609— tienen reparos o directamente rechazan la iniciativa del Hospital Militar, que solo cuenta con el respaldo explícito del PC y del ministro de Defensa, ya que Sanidad Militar necesita ser fortalecida. En varias oportunidades Fernández Huidobro ha hecho alusión a esa necesidad. “Venimos codo a codo, trabajando al unísono e incluso resistiendo ataques públicos notorios, con el Ministerio de Salud Pública, y reforzando en todo lo posible este instrumento que tiene el país (Sanidad Militar) para resolver sus problemas”, manifestó a fines del 2012 en el Centro de Altos Estudios Nacionales (Calen).

El otro punto conflictivo es que, de acuerdo al decreto emitido en diciembre de 2012 cuando el ministro de Salud era Jorge Venegas, el nuevo IMAE en el Hospital Militar está “justificado” puesto que la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) debía derivar a ese centro todos los pacientes que surgieran al sur del Río Negro. Esa propuesta es la defendida por la ministra de Salud Pública, Susana Muñiz, y también por la presidenta del Fondo Nacional de Recursos y adjunta a esa jerarca, Cristina Mier (PC). Pero eso no es aceptado en ASSE y en el FNR, ya que contradice una norma de ese organismo que indica que los pacientes tienen el derecho de elegir.

En ese contexto, el asunto llegó al presidente José Mujica, quien semanas atrás ordenó “estudiar” todos los detalles al respecto. Ayer miércoles, el oficialismo presentó en el Directorio de ASSE una propuesta que plantea “una estrategia para integrar” la iniciativa del IMAE en el Hospital Militar a “una lógica de funcionamiento en redes” con el sector público, es decir, con el Hospital de Clínicas, para asistir a la población de ASSE.

La propuesta denominada “Programa de Atención Cardiológica de Alta Complejidad en la Red Pública de Salud” aspira a tratar a los pacientes “desde la prevención hasta la resolución de situaciones más agudas”, dijeron participantes en la reunión del Directorio consultadas por Búsqueda.

Entre otras cosas, se plantea acelerar la aprobación para la apertura de un IMAE cardiológico en Tacuarembó para tratar a los pacientes al norte del país. Del total de 4.095 cateterismos cardíacos realizados en IMAE y financiados por el FNR en 2012, la mayoría (2.175) fueron en personas que residían en el interior del país que tuvieron que viajar a la capital para asistirse. La misma tendencia se cumplió para las cirugías cardíacas, la mayoría en personas que vivían en el interior.

Además, pretende ampliar un convenio que ya existe por el cual los pacientes de ASSE en urgencia son trasladados al Hospital de Clínicas directamente e intervenidos ahí a menos que el paciente diga lo contrario y prefiera otro centro.

Según dijeron las fuentes, en este contexto se pretende que, de habilitarse el centro en el Militar, este absorba las intervenciones que superen la capacidad del Clínicas pero no compita de forma independiente por los pacientes. Hoy el Centro Cardiovascular del Clínicas tiene muy buen equipamiento —luego del préstamo emitido por Venezuela—, docentes y recursos humanos en formación. Pero precisa más salas de operaciones y disponibilidad de blocks para aumentar el número de intervenciones.

En la Facultad de Medicina, que ha participado en reuniones para discutir la conveniencia de la instalación del nuevo IMAE, ha existido “preocupación” porque consideran que es “un contrasentido con la política descentralizadora” del gobierno en la salud.

Público.

La mayoría de los uruguayos se asisten en IMAE del sector privado mientras el Hospital de Clínicas es minoría en el sector. En 2012 en el IMAE de la Asociación Española asistieron a 3.055 personas en el área de cardiología, en Casa de Galicia fueron 2.135 personas y en el Hospital de Clínicas 704, según datos del FNR. Mientras que en Casa de Galicia se realizaron 558 cirugías cardíacas en el Hospital de Clínicas solo 77. Estas diferencias entre los centros son relevantes ya que a nivel internacional se recomienda un alto número de cirugías por año para que el cirujano mantenga el entrenamiento y así lograr mejores resultados.

Según explicaron especialistas a Búsqueda, el Hospital de Clínicas está muy por debajo de este número —aunque con buenos resultados según las evaluaciones del FNR— por lo tanto desde el punto de vista técnico no sería recomendable además abrir otro IMAE en el Militar.

En la academia no se ve con buenos ojos la apertura del nuevo IMAE en la capital y se destaca la necesidad de fortalecer el del Hospital de Clínicas, que necesita un mayor flujo de pacientes para poder capacitar a los futuros cirujanos que están en formación.

Fondo.

El 15 de julio de 2013 el MSP “autorizó la habilitación” del IMAE Cardiológico del Hospital Militar y ahora necesita la aprobación del FNR para comenzar a funcionar. Es el Fondo quien debe decidir si le otorga la cobertura financiera. La puesta en marcha de un IMAE cardiológico requiere una inversión inicial de entre dos y tres millones de dólares, informó el diario “El País” en 2012. El tema ya se discutió en la reunión de su Comisión Honoraria en donde hay visiones encontradas. El jueves 3 de octubre la Comisión tomará una decisión tras evaluar informes técnicos, informaron a Búsqueda fuentes del FNR.

La Asociación de Institutos de Medicina Altamente Especializada solicitó plazo para discutir el tema a la interna aunque la visión es “negativa” a la puesta en marcha de un nuevo IMAE. Visión similar tienen los prestadores de salud que también están representados en la Comisión pese a que aún no adelantaron posición oficial. En cambio, la presidenta del FNR (Mier) mantiene una posición favorable.

Gustavo Varela, presidente de la Asociación de IMAE, quien representa a los 64 centros privados de todo el país en el Fondo Nacional de Recursos, informó a Búsqueda que su postura será “negativa” a la hora de votar la aprobación de financiamiento por considerar que es un “profundo error” y una “mala decisión”. Varela fundamentó esa definición en “razones políticas y técnicas”. Por un lado, entiende que demuestra una “clara intención de transferir pacientes públicos a un IMAE público” con lo que echa por tierra el “criterio establecido en el FNR de la libre decisión del centro y el consentimiento informado” de los pacientes. Según dijo, más gente elige a los privados porque “en este mundo súper informado la gente sabe dónde se hacen más intervenciones o dónde es más sencillo”.

Las personas que necesitan recurrir a un IMAE tienen, por estatuto del FNR, la libertad de elegir a qué IMAE concurrir, si bien suele primar la recomendación del médico que es quien en definitiva sugiere a qué centro acudir. Esta decisión “atentará contra algo que está prolijo desde el punto de vista técnico”, señaló.

En relación a las razones técnicas Varela comentó que “cuando se consideran los números críticos hay que tener en cuenta la calidad” debido a esto “si se fraccionan más institutos se tienden a hacer menos operaciones por cada uno” y eso atenta contra “la calidad”. Hoy, recordó, los IMAE uruguayos tienen calidad del nivel de Europa, pero si se dispersan los pacientes la calidad probablemente va a bajar. “Eso está escrito en cualquier manual”, añadió.