“Y le fuimos dando forma, y en ese darle forma nos dimos cuenta de que para que funcionara tenía que ser algo que pisara fuerte, generarle una identidad, una estética, hacer un lindo lanzamiento a nivel creativo”, contó Corleto a Galería. Una vez decididos, alquilaron un apartamento chico y salieron a buscar algunas figuras conocidas para poner frente a las cámaras y los micrófonos y dar vida a su primer programa. “Pero yo no quería que fuera toda gente conocida en esa primera mesa, porque me parecía que estaba lindo también darles voz a personas nuevas, que no estuvieran en los medios tradicionales”, explicó la directora de Aweno TV.
Los convocados fueron Agustina Morales y Camila Rajchman como personas conocidas; y a ellas se sumaron Patricio Rebufello y Julián Pintos. El primero a partir de castings, y el segundo porque Corleto lo conocía de la universidad. Ese primer programa, llamado Weno qué pasó, vio la luz en octubre de 2022, siete meses después de que surgiera la idea.
Para definir los contenidos de ese primer programa y de los que vendrían, y darle una personalidad a Aweno TV, Corleto se basó en un objetivo que se convirtió en misión: “romper estructuras y animarse a decir”. “Tengo 30 años y en mi adolescencia no se hablaba tan libremente de ciertas cosas, había muchos tabúes”, dijo.
Weno qué pasó tuvo una buena recepción, y Aweno TV decidió llevarlo a Punta del Este durante el verano, para transmitir en vivo desde un parador en la playa. Al regresar a Montevideo, tras el final de la temporada, se dieron cuenta de que había potencial para crecer, entonces, rápidamente lanzaron otros dos programas. Uno de ellos fue Warda con estos, que tiene a Lali Sonsol entre sus conductores y es, hasta la actualidad, uno de los programas más exitosos de Aweno TV. “Son cinco varones hablando de fútbol, pero no como los programas deportivos formales, sino más de fútbol de amigos, que es algo que a todo el mundo le llama la atención”, contó Corleto.
La grilla de programación de Aweno continuó creciendo y en la actualidad son 10 programas en total, que salen en vivo de lunes a viernes de ocho de la mañana a ocho de la tarde. “Eso lo que nos da es una continuidad y poder ser tratados como un canal, que fue a lo que apostamos”, subrayó su directora. En Aweno trabajan entre 40 y 45 personas —entre empleados fijos y otros que realizan colaboraciones puntuales—, y el financiamiento principal proviene de las marcas que invierten en publicidad a través de los distintos programas.
Dopamina
"Un medio digital"
Marcos Casas_Fernanda Kosak_Matias Maciel
Marcos Casas, Fernanda Kosak y Mathías Maciel, de Dopamina.
Mauricio Rodríguez
Ellos sabían que tenían algo para decir y que el formato o el soporte eran lo de menos. Fueron primero contenidos grabados “en una casa con una pantalla verde y unos (micrófonos) solaperos horribles”, recordó a Galería Fernanda Kosak, quien en la actualidad es una de las responsables del canal Dopamina. Luego alquilaron uno de los estudios de la productora MediArte, para empezar a transmitir los contenidos de un canal que, en sus inicios, se llamó Miedo al Éxito.
Ese canal nació en agosto de 2023, con la intención de generar contenido digital sobre actualidad en la antesala de las elecciones en Uruguay. La primera emisión fue en octubre de 2023, con contenidos grabados, y en 2024 comenzó a emitirse su primer programa en vivo, llamado Campaña del miedo.
A mediados de 2024, comenzaron a surgir diferencias creativas y de proyección a futuro entre los integrantes de Miedo al Éxito, lo que los llevó a dividirse en dos canales de streaming separados: Dopamina y Desembarco.
Dopamina, dirigido por Kosak, junto con Marcos Casas y Mathías Maciel, se define más como un “medio digital” que como un canal de streaming. “Porque también tenemos contenido que va más allá de lo que es el vivo. Tenemos pastillas informativas, tenemos móviles. Pero entendemos que el streaming en vivo sirve mucho para fidelizar tu comunidad”, dijo Casas.
En la actualidad, la programación en vivo de Dopamina se emite de lunes a viernes, de 9 a 11 de la mañana, con los programas Campaña del miedo, Poco se habla y Bufete sentimental. El primero es de actualidad, el segundo de deporte y el tercero sobre relaciones humanas. El modelo de financiamiento es a través de tres vías: aportes de su comunidad a través de suscripciones mensuales en Mercado Libre y PayPal, pauta publicitaria de marcas, y pauta pública (de entes que comienzan a aportar a los canales de streaming).
La apuesta de Dopamina a su comunidad siempre fue fuerte. Los tres responsables valoran los comentarios y el intercambio en vivo con su audiencia, y de allí han salido vínculos y aportes importantes. Por ejemplo, su community manager era un usuario que siempre escribía en el chat y un día decidieron reunirse con él para conocerlo y terminó contratado en ese rol. A través de esa comunidad también han conseguido detalles, como los cubos para sus micrófonos con el logo del canal. Además, comentan que, lejos de molestarse, sus seguidores y fanáticos se alegran cada vez que en un programa de Dopamina presentan un nuevo “chivo” publicitario. Porque, claro, es señal de que su éxito y sus ingresos están en aumento.
“Lo importante no es la guita ni lo que te invierten a vos. Lo que te hace diferenciarte es generar comunidad, que la gente te banque, porque ahí aparece un carpintero que te hace algo al costo, el herrero que te cobra menos, porque se siente parte, porque te quiere ayudar”, resaltó Maciel.
La apuesta de Dopamina está, entonces, en crecer en audiencia. Antes que eso, el desafío había sido posicionarse y lograr la legitimación del sistema político con su primer programa, Campaña del miedo. Pero el equipo siente que ese primer desafío ya está superado. Comenzó con una entrevista a la colorada Carolina Ache y alcanzó su punto cúlmine cuando el actual presidente Yamandú Orsi decidió dar cierre a su campaña para las elecciones presidenciales con una última entrevista en ese programa. “Los políticos saben que el streaming es un medio en el que tienen que estar”, aseguró Maciel.
Desembarco
"Potenciar al país"
Diego Lois_Gaston Duffour
Diego Lois y Gastón Duffour, co-fundadores de Desembarco.
Mauricio Rodríguez
Tras la separación de Miedo al Éxito, quienes crearon Desembarco quisieron mantenerse como un canal de streaming. Fue algo que casi no se discutió. Para uno de ellos, Diego Lois, un pilar importante era mantener la comunicación, el intercambio con la audiencia y también los contenidos sobre temas políticos. Su socio, Gastón Duffour, se enfocó en las posibilidades de expansión y alcance que ofrece el streaming. Se pueden hacer cortes que luego se transforman en pequeños videos para publicar en redes sociales, llegar a otros países y salir a mostrar Uruguay al mundo. En resumen, el objetivo era “generar una plataforma que permita potenciar todo lo que genera Uruguay como país”, explicó Duffour.
Con ese objetivo en mente, a los responsables de Desembarco no les interesa competir y destacarse entre la vasta oferta de canales de streaming, sino que entienden que “hay que colaborar”. “Somos muy poquitos y hay que poder mostrar el país para afuera de una forma unificada y potente”, dijo Duffour. Sin embargo, sí destacó que su canal tiene algo que lo diferencia del resto. Primero, una definición política: se dicen de izquierda no partidaria, feministas, democráticos, antirracistas, antifascistas y artiguistas.
“Tenemos ciertos programas que se pueden agrupar juntos, pero cada uno tiene su propia forma de construir contenido. Entonces, el hecho de tener diversas formas de construir contenido de calidad hace que no nos cerremos a una perspectiva única de hacer las cosas. Genera una diversidad que creemos que nos alimenta positivamente”, subrayó Lois.
La grilla actual de Desembarco se compone de cuatro programas. Culturiza, que se emite los domingos; Núcleo delirante, los lunes; Desorden internacional, los martes, y Juernes, los jueves. Además, hay dos programas que están inactivos, que Lois aseguró que volverán en algún momento, que son Miedo al lunes y Miedo a los fallos. Entre todas estas propuestas, el canal cubre temas que van desde política y actualidad hasta cultura, carnaval e improvisación en vivo.
En el canal trabajan unas 27 personas de forma fija y, sumados a colaboradores y columnistas, alcanzan cerca de 50. Todos son voluntarios, no perciben un salario por su trabajo. “Tenemos un esquema de financiamiento a través de suscriptores, que nos permite pagar el estudio, porque lo alquilamos. También poder sostener la producción, redes”, explicó Duffour. “Estamos empezando a explorar todo lo que tiene que ver con la conformación de una cooperativa, que nos permita también acceder a fondos y consolidar la legalidad. Pero es un proceso que nos va a llevar de acá a fin de año”, añadió.
Para Lois, sin embargo, todos los programas de Desembarco surgieron casi como “passion projects”, es decir, proyectos guiados por la pasión, más que proyectos laborales. “Tenemos un lindo canal, un lindo colectivo, nos llevamos bárbaro, nos juntamos, nos matamos de risa”, dijo.
Yunta
"Generar ciudadanía y democracia"
Gabriel Pereyra
Gabriel Pereyra, director de Yunta.
Lucía Durán
Entre quienes se dedican al periodismo desde hace muchos años, también está latente este ya no tan nuevo formato para entrevistar, para comunicar, para informar. El periodista Gabriel Pereyra tenía la idea de fundar su propio canal de streaming desde hacía tiempo, y encontró en la productora Mariana Secco a su compañera ideal. Tenían experiencia de trabajo juntos en el programa En la mira, de VTV, y se llevaban bien. Además, a Pereyra le interesaba la experiencia que Secco tiene en la parte audiovisual, ya que consideraba que un canal de YouTube no tenía por qué ser de baja calidad, sino todo lo contrario. Su objetivo era marcar la diferencia no solo en contenido, sino también en imagen.
Pereyra y Secco se juntaron, hicieron números, contactos, sumaron a su equipo a Diego Ríos y se tiraron al agua. “Nos largamos con la idea de que sea algo más que un canal que tenga actividad online, sino también que tenga actividad offline”, contó el periodista a Galería. Entonces, por ejemplo, hace unos meses transmitieron en vivo una conferencia sobre narcotráfico, en la que participaron unas 700 personas. Esa es una de las líneas en las que su canal de streaming llamado Yunta, surgido en abril de este año, pretende seguir explorando.
Pereyra tenía experiencia y contactos tanto en televisión como en radio, y pudo haber elegido cualquier formato, o proponer una idea a cualquiera de los medios en los que ha trabajado. Sin embargo, sabía que el streaming le permitiría “tener el control total de los contenidos”. “Porque sabemos que los medios tradicionales tienen un determinado vínculo con los avisadores y hay mucha gente corriendo atrás del clic. No nos interesa correr atrás del clic. Por supuesto que nos interesa tener audiencia, pero más nos interesa que nuestros contenidos sean muy bien seleccionados desde el punto de vista no solo de la calidad, sino también de la importancia”, dijo.
A diferencia de los canales anteriores, cuyos seguidores son universitarios de hasta 30 años, el perfil del público que consume Yunta, según su principal responsable, es mayor de 35 años. Personas de clase media y media-alta, interesadas por contenidos informativos y políticos, más mujeres que hombres.
El canal cuenta con tres programas: Nexo, de entrevistas; Contámela de nuevo, que Pereyra define como una “segunda entrevista artificial” en la que analiza con perspectiva irónica y crítica, y ReSuma, en el que Diego Ríos realiza un resumen de lo que sucedió en la semana. Próximamente se sumará una nueva propuesta, llamada Historias criminales, y también documentales sobre policía científica y los casos más resonantes que han sido aclarados con el uso de la tecnología.
“Tenemos proyectos de cosas divertidas, tenemos proyectos de cosas para un público más joven, pero nuestra columna vertebral son estos contenidos que buscan generar ciudadanía en este momento tan complicado. Buscan generar democracia y poner sobre la agenda aquellos temas que nos parecen importantes para el país y que no se suelen mirar”, dijo Pereyra.
En sus pocos meses de existencia, Yunta obtuvo financiamiento de amigos de Secco y Pereyra. Para poder seguir subsistiendo, el periodista y la productora tienen pensado un plan de auspicio que difiere del de los canales tradicionales. Se asemeja más a acciones de responsabilidad social empresarial, en el sentido de que pretenden que las marcas se asocien con su canal porque consideran que tienen el deber de contribuir con los contenidos que allí se difunden, y no para vender su producto a través de ese medio.
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¿Un nuevo medio consolidado o una moda pasajera?
Todos los entrevistados coincidieron en que el streaming en Uruguay llegó para quedarse. El problema es que hay demasiados canales —y cada vez más— para disputarse el tiempo y la atención de un público muy poco numeroso. Entonces, ¿quiénes son los que van a triunfar? ¿Cuáles son las claves del éxito? ¿El streaming le robará público a la televisión tradicional o será un medio complementario? Son muchas las preguntas y no tantas las respuestas. Pero sí hay opiniones, debates que podrían volverse eternos.
Para Corleto, el streaming irá cambiando y los formatos se irán adaptando. “El formato como tal y la idea de generar programas que tengan llegada a todos, sin importar si hay que pagar o no, va a quedar. Estoy segura de que el streaming llegó para quedarse, pero va a ir cambiando, porque la gente se aburre muy rápido. Capaz que algo que en un momento recontrarrendía, pasa un año y ya está, si no le das una vuelta, moriste”, opinó.
"Estoy segura de que el streaming llegó para quedarse, pero va a ir cambiando, porque la gente se aburre muy rápido. Capaz que algo que en un momento recontrarrendía, pasa un año y ya está, si no le das una vuelta, moriste”, opinó Corleto. "Estoy segura de que el streaming llegó para quedarse, pero va a ir cambiando, porque la gente se aburre muy rápido. Capaz que algo que en un momento recontrarrendía, pasa un año y ya está, si no le das una vuelta, moriste”, opinó Corleto.
Casas coincidió con esta postura y se refirió al desafío de poder vivir del streaming en Uruguay, algo con lo que sueñan todos los integrantes de Dopamina. En ese sentido, dijo que el principal reto es lograr un modelo de negocio sustentable, que vaya más allá de que las marcas inviertan por “moda”.
“La industria tiene que madurar. Acá las cosas las digerimos de a poco, estamos más tranquilos, de repente los análisis son totalmente distintos, la radio todavía tiene su peso, la televisión todavía tiene su peso. Competir con ese prestigio va a llevar un tiempo”, agregó Maciel.
Duffour, por su parte, mencionó un estudio internacional reciente que mostró que la publicidad tradicional ahora se está volcando al streaming. Opinó que, por lógica, si el público está yendo para ese lado, los patrocinadores también deberían volcarse hacia allí. Además, para las marcas, pautar en canales de streaming tiene una gran ventaja: la segmentación de la comunidad; tener la cifra exacta (y no en puntos de rating) de qué cantidad de público consume el programa en vivo, de qué edad, de qué parte del país o del mundo y hasta sus gustos. “Eso les va a competir deslealmente a los medios generales o más conocidos, más viejos”, agregó.
“Yo no conozco a nadie que mire tele. Nadie de mi entorno mira tele. Ni mis hijos, ni mi familia, ni mis amigos”, dijo Pereyra. “Yo no conozco a nadie que mire tele. Nadie de mi entorno mira tele. Ni mis hijos, ni mi familia, ni mis amigos”, dijo Pereyra.
“Yo no conozco a nadie que mire tele. Nadie de mi entorno mira tele. Ni mis hijos, ni mi familia, ni mis amigos”, dijo Pereyra. Para él, entonces, la verdadera competencia está dentro de YouTube. Remarcó que muchas veces no importa tanto la cantidad de visualizaciones sino el tiempo. “Si vos tenés 10.000 clics y yo tengo 1.000, pero a vos te vieron 20 segundos y a mí me vieron 5 minutos. ¿Qué te sirve más? Eso lo tiene que entender el empresariado si quiere poner un aviso”, sentenció.