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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEs preocupante la entrevista concedida por Álvaro Delgado, candidato a la presidencia del Partido Nacional (PN). Su uso excesivo de los pronombres “mi” y “yo” y la constante manifestación de personalismo revelan una alarmante falta de alineación con los principios democráticos que alguna vez definieron al PN.
La tradición del partido se ha sustentado en la idea de colectividad, en la concepción de “nuestra campaña”, “nuestras ideas” y “nuestras relaciones con los demás”. Esa sana actitud, que han tenido todos y cada uno de los candidatos del PN, en elecciones pasadas y que promovía la inclusión verdadera y la participación de cada ciudadano, parece haber quedado relegada a un segundo plano.
Con un enfoque tan centrado en el individualismo, no podemos evitar preguntarnos: ¿Qué octubre le espera al PN en este contexto? La falta de cohesión y el distanciamiento de la esencia colectiva darán, sin lugar a dudas, un resultado impactante y severo. El tiempo dirá si este cambio de paradigma en la visión democrática será un buen augurio o un oscuro presagio para el partido.
Leandro A. Olivera