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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEl papel que desempeñó el empresario dedicado al rubro apuestas online Elbio Rodríguez en el Ministerio de Turismo durante la gestión de Germán Cardoso es objeto de interés por parte de la Fiscalía especializada en Delitos Económicos y Complejos, que investiga presuntas irregularidades en la secretaría de Estado. Mientras que el propio Rodríguez buscó minimizar su rol en el ministerio, diversos testigos lo describieron como una persona de confianza de Cardoso, lo que le permitía acceder a información reservada y hasta presentar propuestas de publicidad en nombre de la cartera.
El director de la agencia de publicidad Young & Rubicam, Álvaro Moré, declaró como testigo en la Fiscalía el 15 de julio. Durante más de una hora debió responder preguntas sobre su trabajo para el ministerio y compras directas que son parte de la investigación penal surgida a partir de una denuncia presentada por legisladores del Frente Amplio. Uno de los negocios que provocó más polémicas fue el intento de contratación de la empresa de Estonia Kirma Services para proveer servicios de publicidad digital por US$ 280.000 (Búsqueda Nº 2.135 y Nº 2.136).
Moré dijo que era habitual en el régimen de trabajo que el ministerio le ordenara a la agencia incluir a algunos medios en los planes de compra de publicidad. Y añadió que ese fue el caso de Kirma Services. Daniel Reta, adscripto a Cardoso, y Rodríguez le mandaron via WhatsApp, por separado, la propuesta de servicios de Kirma Services a Moré y al gerente de Wavemaker, Gonzalo Praderio. El comentario fue: “Nosotros vamos a incluir esta propuesta”, declaró el testigo.
“¿Quiénes son nosotros?”, se preguntó Moré ante el fiscal. Y respondió: “Para mí ellos son el ministerio”.
La fiscal adjunta Gabriela Gómez aprovechó que era la primera vez que Moré mencionaba a Elbio Rodríguez para preguntarle quién era ese empresario.
“Elbio Rodríguez a mí me lo presenta el ministro Cardoso en su despacho. Me dice que es un amigo de él, que lo va a ayudar. No me lo presenta como un asesor, sino como un colaborador que lo iba a ayudar en temas varios, que si algún día no lo encontraba a él, podía hablar con Elbio, que era una persona de su confianza”, respondió Moré.
El titular de Young & Rubicam insistió en que Rodríguez y Reta, que además de estar en contacto en el ministerio estaban juntos en al menos un negocio privado, no enviaron la propuesta de Kirma Services para su análisis, sino para su inclusión entre la lista de empresas a contratar. “No me estaban pidiendo una opinión” sobre la pertinencia de comprar sus servicios, aclaró.
Moré no fue el único testigo que en ámbitos de la Fiscalía o de la comisión investigadora parlamentaria que analizó la gestión del Ministerio de Turismo dio a Rodríguez un papel, aunque sin cargo formal, en la toma de decisiones vinculada a la publicidad oficial.
Elbio Rodríguez compareció como testigo el 2 de agosto y planteó un panorama un poco distinto al descrito por Moré.
El empresario del juego, oriundo de Maldonado igual que Cardoso, dijo que el exministro no lo presentó a nadie como su asesor. “Lo mío fue una gestión de amigo, en un aspecto totalmente honorario”, sin personas a cargo ni viáticos, dijo Rodríguez. Nada podía “dar lugar a confusión”, aseguró.
De acuerdo con su versión, el empresario dejó de colaborar informalmente con el ministerio en julio del 2020, meses antes de presentar la oferta de Kirma Services.
Acerca de la empresa de Estonia, Rodríguez afirmó que sus comunicaciones con Moré fueron “a título personal”. Añadió que el publicista fue quien le pidió que le diera la presentación a Reta para que la incorporara el ministerio.
Rodríguez dijo que Cardoso no estaba al tanto de que había presentado la oferta de la empresa de Estonia y que no le avisó para no “comprometerlo”.
Consultado acerca de cómo llegó a Kirma Services, respondió que conoció a su director Georgios Shipillis durante una feria de juego online en Londres.
El fiscal Gilberto Rodríguez le preguntó si tenía encuentros, fotos, correos electrónicos o algo que tenga “guardado o registrado” y que permita probar el vínculo. El testigo respondió: “En el mundo en que yo me manejo no existen ni los contratos, ni hay demasiada formalidad”. Añadió que quizás tendría algún “resumen” de las campañas digitales de Kirma Services, pero que no estaba seguro.
La fiscal adjunta le preguntó cómo le llegó el PDF con la propuesta de Kirma Services, escrita en español.
—Lo que yo recibo en su momento son los lineamientos de lo que iban a ser los valores…, digamos, ahí lo que importaba eran los lineamientos de lo que se ofrecía y los valores —respondió Rodríguez.
—¿Esto lo armó usted, entonces? —repreguntó la fiscal.
—Eso estaba en inglés y yo lo traduje.
—¿Estaba en inglés con ese formato o usted armó el formato e incluyó el contenido, tradujo del inglés al español?
—Estaban las dos cosas. En su momento lo que hice fue traducir, básicamente, no otra cosa más.
Rodríguez declaró que tradujo solo el PDF, pero el resto del diseño fue de Kirma Services.
El empresario, según sus propias declaraciones, fue el nexo con la compañía estonia cuando el ministerio necesitó los datos para inscribirla en el Registro Único de Proveedores, cuando no se proveyó el servicio y cuando se complicó el pago. En esos pasos dijo haber hablado con sus representantes y a pedido de la Fiscalía prometió facilitar contactos.
En otra parte del interrogatorio, el empresario del juego negó haber tenido acceso a información reservada del Ministerio de Turismo, pese a lo que dice un informe oficial de la secretaría de Estado.
Rodríguez tenía acceso a una carpeta en Google Drive creada a pedido del entonces director de Turismo, Martín Pérez Banchero, en la que había documentos internos vinculados a los gastos de publicidad.
En su declaración, Rodríguez dijo que en ese Drive solo había una planilla con los mismos datos que contenía el documento que elaboró la última administración del Frente Amplio para la transición.
Sin embargo, en una respuesta a un pedido de informes el año pasado, el Ministerio de Turismo detalló que en esa carpeta a la que tenía acceso Rodríguez había, entre otras cosas, contratos, borradores de pliegos, informes de desempeño de agencias y presupuestos de investigaciones de mercado.