En distintos procesos industriales, con tecnología de punta y estándares internacionales, en la planta de concentrados de bebidas de Pepsi Cola Manufacturing Company (PepsiCo) en Colonia se manejan más de 500 materias primas.
, regenerado3Los productos manufacturados en la planta instalada en zona franca encierran el secreto industrial de la multinacional que abastece a 23 mercados latinoamericanos
En distintos procesos industriales, con tecnología de punta y estándares internacionales, en la planta de concentrados de bebidas de Pepsi Cola Manufacturing Company (PepsiCo) en Colonia se manejan más de 500 materias primas.
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEn distintas presentaciones, allí se elaboran alrededor de 300 fórmulas o productos para 37 marcas, entre las que se destacan Pepsi, Seven Up, Mirinda y Gatorade, por ejemplo.
Aunque la operación industrial de la multinacional cumplió tres décadas en la zona franca coloniense, es una actividad poco conocida en términos de cifras y en especial en su proceso productivo y agregado de valor, que está restringido a un pequeño grupo de ejecutivos por su carácter confidencial.
El jueves 23, dos periodistas de Búsqueda fueron recibidos por el director de la planta, Martín Chacin, para conocer parte de las instalaciones cercanas a los vestigios de la ex-Sudamtex y con el Río de la Plata de fondo. Tras la entrevista inicial, Chacin decidió hacer una recorrida para mostrar lo “más lindo y novedoso”, en referencia a las inversiones en equipamiento e infraestructura que forman parte del plan de inversión que la compañía viene llevando a cabo por US$ 64 millones.
Luego de vestir los implementos de seguridad e higiene, el ingreso a uno de los búnkeres industriales se realiza con tarjeta magnética y molinillo mediante. Hay ruido de equipos encendidos y olor a bebida cola en el ambiente, aunque el producto no se ve ni al inicio ni al final de la visita.
El volumen de producción de concentrados (líquidos y en polvo) en Colonia equivale a 10 billones de litros de bebida. Un litro del producto contiene la fórmula que rinde para terminar embotellando unos 30.000 litros de refresco. Esa actividad, en el caso del mercado uruguayo, se realiza en la planta de embotellado que PepsiCo tiene junto con FNC en Montevideo. En su centro de distribución en Montevideo, PepsiCo también empaca y distribuye algunos alimentos (snacks) que produce la multinacional.
Desde Colonia la compañía exporta concentrados por más de US$ 700 millones al año, lo que equivale a 5,3% de las colocaciones de mercaderías de Uruguay al mundo y es el quinto rubro de exportación tras la carne, la celulosa y la soja.
Abastece a 23 países de Latinoamérica. Los principales destinos son México (las ventas de concentrado de bebidas son el 44% de las colocaciones de Uruguay a ese país), Brasil y Argentina. Le siguen Guatemala y Colombia.
Actualmente, la industria emplea en forma directa a unos 260 trabajadores que desempeñan sus tareas en dos turnos, de lunes a viernes. En forma indirecta, para otros servicios de apoyo genera trabajo para unas 200 personas.
A menos de un año de que termine de materializarse el 100% del plan de inversión comprometido por la firma para el tercer trimestre del 2024, la planta está en producción y ampliación en paralelo. Se ve actividad de contratistas que realizan tareas en andamios en los pasillos, pero las salas de producción están inmaculadas.
La elaboración es prácticamente automática y seguida a distancia desde la sala de control a través de monitores.
En donde se produce el concentrado líquido de Pepsicola una sola persona se encarga de conectar una manguera para alimentar al equipo con uno de los insumos (el “cola oil”) que procesa y mezcla.
Se habla de la materia prima, etiquetada en tanques de 200 litros, como un líquido opaco, viscoso y de color oscuro, pero no se puede ver.
El componente pasa por un laberinto de tubos, torres y tanques metálicos que se elevan varios metros sobre el piso de la sala blanca.
Chacin resalta que el estándar de producción es equivalente al de la planta de Irlanda, una de las principales de la compañía. Explica que los insumos están codificados y que nadie conoce todos los que lleva la fórmula por el secreto industrial que encierra un riguroso y restringido protocolo de producción.
El agua de OSE que se utiliza en el proceso industrial es tratada en una moderna planta para llevarla al estándar de PepsiCo internacional. Allí se mantiene en circulación en equipos que utilizan filtro UV. La inversión en esta área incorporó un nuevo sistema de ósmosis inversa de última tecnología que permite una ultrafiltración potente, explica Chacin. Resalta a su vez que la nueva planta recicla el 99% de los residuos y lo que el sistema descarta es reutilizado para el tratamiento de los efluentes y en las instalaciones sanitarias.
Otra área de inversión que está prácticamente pronta para poner en funcionamiento es una nueva “central de lavado”. Allí se almacena agua fresca, agua caliente y otros insumos que se utilizan para lavar el equipamiento de las distintas líneas y áreas de producción de la planta. Como el proceso productivo se realiza de a lotes, cuando se va a pasar a elaborar otro tipo de concentrado, todo el equipamiento es lavado para remover residuos, colores y olores. El proceso de lavado de cañerías y equipos es totalmente automático, se ordena por un sistema computarizado que agenda la tarea y la realiza en el momento y el intervalo indicados. El nuevo sistema que tiene mayor capacidad (permite limpiar hasta cinco destinos a la vez en lugar del actual, que lo hace de a uno), permite ahorrar agua y disminuir la temperatura de trabajo, con la eficiencia que ello implica.
Próximo al área de lavado se encuentran las líneas automáticas de llenado del concentrado líquido. En el momento de la recorrida no están en funcionamiento, pero Chacin explica que se modernizó y amplió la capacidad de llenado. Cuenta con una línea para llenado de tambores de 1.000 litros de concentrado y otras cuatro para envases de menor dimensión que terminan en empaques que gestionan y encajonan dos robots marca Kuka.
La ampliación de la capacidad de producción en 60% también produjo necesidades de ganar eficiencia y centralizar el acopio de materias primas y producto terminado que hasta ahora está distribuido en varios galpones de la zona franca.
Solo en la expansión del almacén PepsiCo está invirtiendo US$ 18 millones. Ya se puede ver una gran caja metálica en forma de L que cubre un área mayor a 7.500 metros cuadrados. La estructura gigante todavía está en construcción.
También desde el exterior se accede a la nueva planta de efluentes que amplió la capacidad para recibir fluidos y tratarlos aeróbica y biológicamente en varias piletas de hormigón de 500 metros cúbicos de capacidad. En este caso la inversión rondó los US$ 6 millones.