Rally ‘round the flag
El publicista Esteban Valenti, hoy alejado del Frente Amplio, le pidió la semana pasada a la producción de En perspectiva que incluyera los resultados de la encuesta de Cifra en los temas a discutir en la tertulia política del jueves 7. La consultora informó el 4 de mayo en Telemundo que el 60% de la población aprueba la gestión del presidente Lacalle Pou, una caída de cuatro puntos en comparación con su encuesta de febrero, y 28% la desaprueba. En marzo del 2020, cuando asumió, el mandatario tenía también 60% de aprobación y 16% de desaprobación. Valenti lo calificaba como un fenómeno de “primera importancia” por sus implicancias políticas, dado que es inusual que un gobernante blanco tuviera entrado el segundo año de gestión ese respaldo.
Un día antes de la tertulia, Equipos Consultores publicó una encuesta con datos recabados en abril, hasta entonces el peor mes de la crisis en términos sanitarios, que ubican la aprobación presidencial en 59% y la desaprobación en 20%.
El último dato de Factum es de marzo: 54% de aprobación y 44% de desaprobación.
El primer razonamiento compartido por los especialistas en opinión pública es que, como se ha visto en otros países, la reacción de la ciudadanía en momentos de crisis provocadas por cuestiones externas, como puede ser una guerra o una pandemia, es apoyar a quienes gobiernan. El término en inglés para describirlo es rally ‘round the flag y uno de los episodios al que se recurre para ejemplificar el fenómeno es el aumento de la popularidad del presidente George W. Bush después de los atentados a las Torres Gemelas.
En el caso de la pandemia del coronavirus, además, se trata de una crisis con un impacto y extensión sobre la que no hay antecedentes recientes.
“La pandemia aparece como un factor clave para entender los procesos que se dan en la evaluación de los gobiernos, es un hecho que trasciende la realidad uruguaya, ya que es bastante extendido en el mundo occidental un aumento de la aprobación de los gobernantes en este contexto”, sostuvo Botinelli.
Sobre este punto, Aguirre dijo que es difícil poder definir si es alta o no la aprobación actual del mandatario, porque, dadas las circunstancias, es imposible compararla con la de sus antecesores. “No tenemos una evaluación ‘limpia’ de la evolución de aprobación de Lacalle Pou porque la pandemia empezó con el nuevo gobierno y el nuevo gobierno empezó con la pandemia”, dijo.
Foto: Javier Calvelo / adhocFOTOS
La comparación y las vacunas
Abril debía ser un mes clave para contener los contagios, argumentó en una entrevista con Telemundo el integrante del Grupo Asesor Científico Honorario Rafael Radi. Y el gobierno enseguida adoptó el eslogan de “blindar abril”, aunque los resultados fueron otros: hubo 1.571 muertos con Covid.
El aumento de los contagios y las denuncias de que los CTI estaban al límite de su capacidad dominaron la agenda informativa durante varios días y dieron munición a la oposición.
Sin embargo, en la opinión pública sigue habiendo una mayoría de personas que están conformes con el manejo gubernamental de la crisis. Una encuesta de Panorama indica que el 45% de las personas calificaba en abril “adecuadas” las medidas adoptadas como respuesta al Covid-19 y 39% las consideraba “inadecuadas”. El estudio también muestra que la población mantiene su confianza en los prestadores de salud.
“No soy quién para decir si en Uruguay hubo un buen manejo de la pandemia o si está colapsado, lo que sí veo es que en la opinión pública no hay una sensación de caos, como sí hay en otros países”, valoró Aguirre. La comparación con la región y más allá parece jugarle a favor al gobierno.
A partir de las encuestas de Equipos, Zuasnabar concluye que la mayoría de la población ve injusta la crítica al gobierno desde el punto de vista del control de la pandemia, tanto sanitario como económico. “Todavía no le está atribuyendo la responsabilidad al gobierno, la gente asume que lo está haciendo bastante bien”, dijo.
Y a eso se suma que la vacunación avanza a muy buen ritmo. De acuerdo con el director de Equipos, la evaluación del gobierno es mejor entre quienes recibieron sus dos dosis contra el Covid-19 en comparación con aquellos que recibieron una sola o ninguna. En ese rubro el gobierno tendría margen entonces para seguir generando simpatía en la población, ya que quedan cientos de miles por inmunizar.
La libertad.
En la tertulia, Valenti y Daniel Supervielle —exasesor de Lacalle Pou y columnista de El Observador— apuntaron que la mayoría de la población está de acuerdo con el gobierno en cuanto a mantener niveles de movilidad pese a los riesgos de contagios. Valenti destacó que el Lacalle Pou le había dado “contenido ideológico” a esa idea con la llamada “libertad responsable”.
La experiencia de los primeros meses de la crisis, según Pomiés, parece haber marcado a los uruguayos. Es difícil pensar que la población quiera repetir situaciones de encierro similares a las de abril y mayo del año pasado, añadió, porque muchos terminaron en seguro de paro y cayeron los ingresos de los hogares.
Zuasnabar concuerda en que la posición del gobierno sintoniza mejor con lo que piensa la mayoría de la población sobre ese tema. Incluso, el analista planteó la necesidad de poner el foco en el tema de la libertad.
“En todos lados está el concepto de libertad”, dijo. “El liberalismo, que parecía mala palabra” y un “concepto gastado para el discurso político”, hoy tiene más fuerza.
Para Zuasnabar, hay que tener presente a la hora del análisis el hecho de que la pandemia llegó justo con el cambio de signo político en Uruguay. Al respecto, se preguntó si el cambio de valores que se estaba procesando no explica también el fenómeno de popularidad actual del presidente.
Rambla y Jackson, un domingo durante la pandemia. Foto: Ricardo Antúnez / adhocFOTOS
La oposición
Los datos parecen malas noticias para el Frente Amplio, cuyo discurso dispara contra la gestión de la pandemia en todos los rubros.
De hecho, en la encuesta de Panorama el 34% desaprueba la gestión de la oposición en el marco de la pandemia, mientras que solo el 31% la aprueba.
El Frente Amplio está en una situación complicada, evalúa Pomiés. Buena parte de su electorado le reclama que se pare más firme y tiene que ejercer la oposición “en el momento en el que hablar mal del gobierno” puede parecer “antipatriota”. A eso se suma el hecho de que está inmerso en una renovación de liderazgos.
Zuasnabar entiende que lo mejor para el Frente Amplio sería revisar su estrategia. “Este proceso termina desgastando más a la oposición que al gobierno”, concluyó.
Y si esos elementos no fueran suficientes, los expertos consultados consideran que el gobierno ha tenido un muy buen manejo de la comunicación.
“Hay un tema de estrategia de comunicación que le está resultando muy efectiva, con una comunicación permanente y muy transparente respecto a lo que está pasando”, opinó Pomiés. La directora de Cifra aseguró que al gobierno le sirve que la pandemia sea el tema excluyente de la agenda y que, en ocasiones, lo usa para “desviar la atención”.
Tanto Pomiés como Aguirre recurrieron al mismo ejemplo para referirse a la estrategia comunicacional del gobierno. El 1º de mayo el presidente Lacalle Pou anunció la remoción del ministro de Desarrollo Social, Pablo Bartol, mediante un escueto tuit. Así, dirigió “la conversación para ese lado” y la desvió de los reclamos del Día de los Trabajadores, explicó Aguirre.
Acerca de la comunicación Zuasnabar añadió el liderazgo que está ejerciendo Lacalle Pou, quien “desde hace un año es el líder con mejor imagen del país, por lejos”.
Una interrogante y una advertencia
A medida que la vacunación avanza, la pospandemia parece un escenario cada vez más cercano. Y con ella la incertidumbre sobre la gestión del gobierno y su nivel de aprobación.
“La pandemia ha estado presente durante todo este tiempo, con mayor o menor intensidad, estando en el primer lugar de preocupación o en el tercero, pero presente”, dijo Botinelli. “También se aprecian algunos elementos vinculados a la seguridad pública y al empleo que muestran signos de mejora en la percepción de la opinión pública. Por otro lado, los elementos directamente vinculados a la situación económica y a la situación actual del empleo muestran signos claramente negativos. La gran duda que surge es, si luego de pasada la pandemia, estos indicadores logran una mejora o se transforman en un problema central en la población y se traslada la insatisfacción al gobierno”.
Pomiés cree que si bien la pandemia es la explicación principal detrás de la popularidad del gobierno, el final de la crisis sanitaria no necesariamente implicará que bajen los números, aunque el riesgo existe. Hay temas todavía “debajo de la mesa”, como los problemas económicos, añadió, que pueden quedar expuestos en la pospandemia.
Consultado por Búsqueda, el doctor en Historia Económica y socio del CPA Ferrere, Gabriel Oddone, sostuvo que “el gobierno puede todavía decir que las circunstancias económicas son fundamentalmente derivadas de factores que él no controla”. Es decir que “puede sostener el relato de que la pérdida de 60.000 puestos de trabajo el año pasado, la caída del 5,7 del PBI y caída del 4% del salario real están asociados a un evento que es un shock exógeno del que el gobierno se desayunó 13 días después de llegar”.
“En la crisis del 2002 en Uruguay, del 2001 en Argentina o de las subprime del 2008 en Estados Unidos, la evaluación que podía hacer la población era ante un evento específico, que tenía una explicación de naturaleza económica y que, además, estaba circunscripto a las economías que lo sufrían”, añadió. “Lo que hoy la población está recibiendo es que el planeta Tierra está en un problema. Entonces, la probabilidad de que una persona le pueda atribuir responsabilidad de los acontecimientos económicos al gobierno todavía es baja”.
Ese estado de situación, advirtió Oddone, no necesariamente continuará una vez que la vacunación mitigue el aspecto sanitario de la crisis. En su opinión, las medidas que ha adoptado el gobierno hasta ahora parecerían insuficientes para asegurar una recuperación económica más eficaz (ver recuadro).
Durante su intervención en la tertulia y tras elogiar en particular a los ministros Daniel Salinas (Salud) y Azucena Arbeleche (Economía), Supervielle hizo una sugerencia al Poder Ejecutivo. “Tener estos índices de aprobación pueden llevar a errores al gobierno; la soberbia es un mal error, como la indiferencia es terrible para los gobernantes”, dijo, y agregó: “Esos altos índices de aprobación tienen que extremar la capacidad de escuchar a la gente y no rodearse, por ahí, en círculos muy chicos donde solo haya aplausos”.
Información Nacional
2021-05-13T01:29:00
2021-05-13T01:29:00