Uruguay es un país con “consenso social” y no está “políticamente dividido” como otros de la región, dijo en abril a Búsqueda el analista de la agencia Standard & Poor’s Joydeep Mukherji (ver Nº 1.760). “Obviamente es importante quién gana y las políticas del próximo gobierno. Pero muchas de las políticas del gobierno actual tienen el apoyo explícito o implícito de la oposición. Nadie está contra Montes del Plata, nadie quiere bloquear la expansión de las zonas francas, nadie está contra la diversificación de la economía. Pienso que las políticas básicas no van a cambiar”, opinó.
Las propuestas
Vázquez, el precandidato que lidera la intención de voto dentro del Frente Amplio, ha hablado poco de economía en los actos de campaña. Sí confirmó en una entrevista televisiva que quisiera que Danilo Astori fuera otra vez su ministro del área si vuelve al poder en 2015 y el actual vicepresidente se expresó dispuesto a ello.
La semana pasada Astori acusó a la oposición de no exponer propuestas en materia económica ni de mostrar los equipos para el área en caso de ganar la elección. “Se está viendo claramente en esta campaña, en esta campaña no se habla de economía, no hay análisis económico. Porque decir ‘voy a quitar el impuesto a la renta personal’ no es hablar de economía, es una afirmación completamente irresponsable de quien la hace. Decir que se va a prestar atención a los problemas inflacionarios del país no es hablar de economía. Yo no he escuchado una sola explicación acerca de por qué el país tiene presiones inflacionarias. No he escuchado hablar de política monetaria, no he escuchado hablar de la situación financiera de Uruguay”, dijo el vicepresidente en radio El Espectador el martes 13. Una semana después, el martes 20 en un evento político en el teatro El Galpón, reiteró las críticas.
Como en varios actos en esta campaña, Vázquez reafirmó su intención de darle continuidad a la política económica el 23 de abril en el programa “Código país” de canal 12 si vuelve a la Presidencia. “Yo no veo la posibilidad de dar un giro a la izquierda. Veo la posibilidad de ir avanzando en algunos temas, que hay que hacerlo de manera gradual, seria y responsable, muy responsablemente para no afectar equilibrios importantes como es el equilibrio de la economía, el equilibrio social, la estabilidad que tiene el país con sus vaivenes como cualquier ciclo biológico”, expresó.
El plan de gobierno para 2015–2020 del Frente Amplio establece que la “política macroeconómica deberá garantizar condiciones de estabilidad adecuadas a los objetivos de crecimiento, la creación de empleo y la distribución del ingreso”.
La política fiscal “procurará alcanzar el equilibrio estructural en las cuentas públicas (...) y la tributaria debe “profundizar la promoción de una mayor equidad en la estructura impositiva” bajo la premisa de que “contribuya más quien tenga más”, se señala en ese documento programático. En esa línea, Vázquez dijo en actos de campaña que los “estancieros” deberán pagar el Impuesto de Primaria si él es mandatario desde marzo de 2015. También manifestó como un “compromiso” que el IRPF sobre el aguinaldo se pague en cuotas y no sumado al salario del mes en que se cobra, como ahora.
El programa del oficialismo alude a la necesidad de ir “avanzando en el nuevo sistema tributario alternando selectivamente la presión tributaria sin afectar la competitividad sectorial”, por ejemplo “a la población de alto ingreso, a los sectores con ganancias extraordinarias o poderosos patrimonios, al consumo importado de bienes suntuarios o competitivos de la producción nacional con una muy baja calidad”. También propone un “uso más selectivo” de los regímenes de estímulo fiscal a las inversiones.
En cuanto al gasto público, el Frente Amplio pretende que el presupuesto para la educación tienda hacia un monto equivalente a 6% del Producto Bruto Interno.
El servicio de la deuda “deberá seguir siendo administrado con los mismos criterios (que) en este período de gobierno”, se afirma en el documento programático.
Sobre la política cambiaria y monetaria Vázquez no plantea introducir cambios.
Al igual que su rival, la senadora Constanza Moreira —la otra precandidata por la coalición de izquierdas— tampoco ha puesto mayor énfasis en las cuestiones económicas en la campaña.
Su programa propone instalar una “Comisión para el Desarrollo” de alto nivel que planifique el país para los próximos 20 años, y plantea limitar los incentivos de la ley de promoción de inversiones y de zonas francas. Acerca del sistema impositivo, la precandidata dijo en la edición de “Crónicas” del viernes 16 que “sin duda” podría elevarse la carga sobre las ganancias empresariales y en las rentas de las personas asociadas al capital, así como subir el mínimo no imponible del IRPF.
Entre otras ideas, Moreira también ofrece establecer mecanismos de “regulación de precios” de la canasta básica familiar.
La oposición.
Desde el Partido Nacional, la plataforma económica del precandidato Jorge Larrañaga pone énfasis en la necesidad de aplicar con “coherencia” entre sí las políticas fiscal, monetaria y cambiaria, algo que según sus asesores no está ocurriendo hoy y está en la raíz de la inflación alta. También propone que el gasto público aumente de modo “compatible con la tasa de crecimiento de la economía” y establecer una regla fiscal que obligue a generar ahorros, dijo el coordinador del equipo económico del líder de Alianza Nacional, Hernán Bonilla (ver Nº 1.764).
Larrañaga plantea además reducir el Impuesto al Valor Agregado (IVA) priorizando los artículos de primera necesidad, eliminar el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS) e incorporar nuevas deducciones al IRPF.
“Adherimos al sistema de tipo de cambio libre y fijado por el mercado, más allá de que no se descartan intervenciones” como hace el sector público en la actualidad, señaló Bonilla.
Ese economista, la diputada Ana Lía Piñeyrúa y el actual director del Banco Central Washington Ribeiro, forman parte del equipo de Larrañaga en el área económica, junto a otros técnicos. Ribeiro, por su cargo, no ha tenido exposición pública en la campaña.
La propuesta del diputado Lacalle Pou tampoco supone cambios dramáticos en la política económica. “No esperen grandes anuncios; aquí lo que se necesita es una sintonía fina entre las políticas macro”, tranquilizó Ramón Pampín, asesor del precandidato (Nº 1.763).
Si es electo presidente, Lacalle Pou mantendrá el régimen de flotación cambiaria y la política monetaria con metas de inflación. “Pero las metas hay que cumplirlas y deben ser creíbles (...)”, comentó Pampín.
Propone algunos cambios tributarios, como la derogación del IASS, incorporar más deducciones al IRPF (a los alquileres, a cuidados de niños, a la educación, los servicios de salud y actividades deportivas), aumentar su mínimo no imponible y bajar la tasa de la primera franja de 10% a 5%, afirmó el precandidato blanco.
Entre los colorados, quien está a la cabeza en las intenciones de voto que surgen de las encuestas propone “mejorar la calidad del gasto público”, establecer una “regla fiscal estructural”, restringir el ingreso de nuevos funcionarios públicos, eliminar el 50% de los cargos de confianza, e introducir un sistema de gestión por resultados en el Presupuesto quinquenal. El precandidato Pedro Bordaberry también plantea cambios graduales en el IRPF, entre ellos una modificación de los tramos y deducciones, y su exoneración para los menores de 23 años y para las horas extra trabajadas. Ese tributo se derogaría para las rentas inmobiliarias si el líder de Vamos Uruguay es presidente.
Luego del desafío que lanzó Astori la semana pasada, Bordaberry informó que para abordar los temas económicos se apoya en los ex ministros de Economía Ricardo Zerbino, Luis Mosca e Isaac Alfie, y en los ex subsecretarios Álvaro Rosa y Max Sapolinsky. También mencionó como parte de su equipo al ex presidente del Banco Central Humberto Capote y al ex representante financiero del gobierno en Washington, Carlos Sténeri, además del consultor privado Horacio Bafico. Son “gente profesionalmente seria, buena y solvente, y que tienen una virtud: humildad y además escuchan mucho, cosa que no tiene Astori”.
El diputado José Amorín Batlle, quien sigue en la intención de voto en la interna colorada, ha hecho de la propuesta de derogar el IRPF y el IASS uno de sus caballitos de batalla en esta campaña. El ex director de Planeamiento y Presupuesto Ariel Davrieux y el ex presidente del Banco Central Julio de Brun son algunos de los expertos que asesoran a este precandidato.
El Partido Independiente, que tiene como candidato a Pablo Mieres, señala en su programa de gobierno para 2015–2020 que la actual “política macroeconómica ha tenido aciertos”. De todos modos, plantea que es “imperativo recuperar la credibilidad de la política monetaria” y contener la inflación. También propone “mejorar la eficiencia” del gasto público, instalar un consejo asesor de expertos fiscales autónomo para evaluar el desempeño de las cuentas públicas e ir a una estructura tributaria con menos impuestos, entre otras medidas.
Economía
2014-05-22T00:00:00
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