Madre del indie, padre del under

escribe Javier Alfonso 
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Escuchar la voz de Michael Stipe en una nueva canción es de por sí una gran noticia. Luego de una suave melodía introductoria de clarinete aparece resplandeciente el exfrontman de R.E.M., que a sus 61 años canta: Sunday Morinig brings the dawn in / I’ve got a restless feeling by my side. Son los versos de Sunday Morning, la canción que abre The Velvet Underground & Nico, el disco que consagró al grupo liderado por Lou Reed y John Cale. Pero también es el nacimiento de un estilo austero y contenido de hacer música asociada con la cultura rock pero que trasciende ampliamente sus límites, vuela en alas de la canción e influye hasta nuestros días, en cada sonido que se precie de indie o under.

Stipe emociona en cada sílaba. Pocos interpretan así. No es casual que sea la punta de lanza del álbum. De paso, a modo de guiño, las líneas de bajo y guitarra remiten sutilmente a las de Walk on the Wild Side, también de Reed.

I’ll Be Your Mirror: A Tribute to The Velvet Underground & Nico, publicado por Verve Records, reconstruye tema por tema el disco editado por dicho sello en 1967, grabado por la seminal banda neoyorquina, junto con la cantautora, modelo y actriz alemana Christa Päffgen, conocida como Nico, e ilustrado con la banana más famosa de la historia, la de Andy Warhol.

El disco está buenísimo. Hay leyendas como Iggy Pop (vocifera y alardea como siempre en European Song) y consagrados como Thurston Moore y Bobby Gillespie, fundadores de bandas emblema de los 90 como Sonic Youth y Primal Scream, que hacen juntos una versión de Heroin más sosegada y apropiada para gente de su edad. Están otros nombres de auge más reciente como Matt Berninger (el formidable vozarrón de The National, en I’m Waiting For The Man) y St. Vincent, con una lectura retrofuturista de All Tomorrow’s Parties, base de piano y efectos vocales digitales. Y hay cartel para solistas en alza como Courtney Barnett (se apropia notablemente de I’ll Be Your Mirror), Kurt Vile (una aplanadora en Run run run) y Sharon Van Etten (gran versión estilizada de Femme Fatale).

Ah, y un señor cantante y violinista llamado Andrew Bird se roba el disco con la tremenda Venus In Furs, junto con el dúo Lucius, compuesto por las cantantes estadounidenses Jess Wolfe y Holly Laessig, a quienes disfrutamos tres años atrás en el Centenario, a cargo de los coros en el show de Roger Waters.

Vida Cultural
2021-10-13T22:04:00