“No están iluminando las estrellas del campo”, resumió un empresario del interior del país para ilustrar cómo está impactando en el comercio y los servicios de algunos departamentos el menor empuje de la producción agropecuaria.
“No están iluminando las estrellas del campo”, resumió un empresario del interior del país para ilustrar cómo está impactando en el comercio y los servicios de algunos departamentos el menor empuje de la producción agropecuaria.
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáProblemas climáticos, la desvalorización de los commodities y la menor colocación de alimentos en el exterior están complicando a varios rubros agroindustriales, lo que contrasta con el fuerte dinamismo que mostró ese sector hasta hace un tiempo. Eso lo empiezan a sentir otros sectores de actividad, dijeron a Búsqueda los presidentes de los centros comerciales e industriales de San José, Florida, Colonia, Durazno, Treinta y Tres y Salto.
En varios de estos departamentos el agro es el motor de la economía: cuando acelera también lo hacen otros rubros, por la vía de mayores compras de insumos o por más salarios pagados al trabajador rural. Según un estudio del Departamento de Economía de la estatal Facultad de Ciencias Sociales, cada dólar extra de demanda que recibe exógenamente el agro provoca un aumento de 6,2 dólares adicionales en la economía (ver Búsqueda Nº 1.595). La producción de aves y huevos, de hortalizas, legumbres y la lechería son las que tienen mayor derrame.
La desaceleración del agro “se empezó a notar”, dijo Alejandro Perrachón, de la gremial coloniense. En su empresa —del rubro informático— las ventas bajaron 20% en lo que va del año, frente a 2014.
Colonia es un departamento con una economía diversificada. En la zona rural cuenta con cultivos cerealeros, ganadería bovina, de aves y lechería, entre los principales rubros, de acuerdo al último censo agropecuario.
El rubro lechero es uno de los más complicados. Ecolat, una industria de Colonia Suiza, cerró a comienzos de este año por la baja rentabilidad del negocio, alegaron sus dueños.
Ana Hunter, del centro comercial de Durazno, señaló que en los últimos años el agro “transformó y benefició” al departamento porque la gente vinculada al rubro gasta y forma buena parte de la “cadena del dinero” circulando. Pero ahora “hay una retracción del consumo, hay menos dinero en la calle”, afirmó. Como ejemplo de ese “parate”, contó que tardó tres meses en vender su automóvil usado; “eso el año pasado no sucedía”.
En Durazno las explotaciones de vacunos y ovinos son lo que predomina.
“La sensación es que se viene un tiempo más complicado. El comercio de ciudad lo está manifestando, pero es desapareja la situación”, dijo Fernando Echedo, de San José. Zapatería y tiendas de ropa vienen con malas ventas.
Explicó que en el departamento, que es una importante cuenca lechera, la actividad está resentida por la crisis que vive ese rubro y ello afecta el bolsillo del productor. Agregó que la seca “condicionó un montón” a la gente del campo y la “asustó”. Los maragatos también tienen explotaciones ganaderas para producción de carne.
“Todo el comercio está resentido”, señaló Betina Basso, de Florida. Explicó que hay “preocupación” por la crisis de la lechería puesto que el departamento no tiene otro rubro que pueda compensar esa actividad. Agregó que en la última asamblea los tamberos describieron la situación como “extremadamente límite, con costos exorbitados, clima agresivo y mercados desplomados”. La representante empresarial informó que productores de leche dimensionan las pérdidas en U$S 3,5 millones. “Nos pega en la ciudad, es una cadena, se ha notado una baja (de actividad) y estamos expectantes”, comentó.
Florida es, junto con San José y Colonia, uno de los departamentos con mayor producción de leche.
A la economía de Treinta y Tres la mueven la ganadería y el arroz, principalmente. El departamento vive un momento “bastante complicado”, dijo Ricardo Gutiérrez. “Esperamos que no dure demasiado”, añadió. Agregó que la zona arrocera fue afectada por el clima, pero también por los bajos precios, lo que provocó envíos al “seguro de paro” en algunos molinos. “La baja de ingreso de la gente afecta todo”, remarcó.
Un consignatario de ganado del departamento aseguró que hay “pocos” negocios y que los vacunos se desvalorizaron. A la falta de compradores se suma la escasez del forraje y el mayor gasto en ración para intentar que los animales no pierdan mucho peso corporal, explicó acerca de la complicada ecuación de los criadores. “Estamos pasando un mal momento. Obligado uno vende, más vale animal mal vendido que cuero bien sacado”, comentó. Para adelante, se mostró ansioso por la llegada de la primavera y de la lluvia, porque “llueve agua pero no pasto”, resumió.
Miguel Feris, de la gremial salteña, señaló que las localidades del interior son “muy sensibles” a las fluctuaciones en el desempeño del agro, y como ejemplo indicó que unas 14 firmas del rubro no pudieron pagar el cuatrimestre de aportes al Banco de Previsión Social. Dijo que esa lista se viene engrosando y es un indicador de que la actividad “se está frenando”.
Agregó que en Salto la actividad comercial se mantiene dinámica en general, aunque en algunos giros las ventas están “muy tranquilas”.
La economía salteña es relativamente diversificada. En lo rural se destaca por la citricultura, si bien la ganadería vacuna y de ovinos también tiene peso.
Feris preside además, la Confederación Empresarial del Uruguay, que nuclea a más de una veintena de centros comerciales y asociaciones del interior del país. Apuntó que es necesario que el gobierno defina políticas para el desarrollo del interior así como medidas “de frontera” que protejan al comercio uruguayo, que ve caer sus ventas debido a la desviación del consumo hacia el lado brasilero por la devaluación del real. “El interior está desvalido”, resumió.
La agroindustria fue uno de los rubros más dinámicos de la economía local en la última década. Atrajo inversiones en un contexto de altos precios de los granos, la carne y otras materias primas que recientemente mostró un giro.
El Instituto Uruguay XXI estima que en el mediano plazo los precios del sector agrícola bajarán levemente o se mantendrán. En un análisis de perspectivas fechado en junio, ese organismo gubernamental agrega que la expectativa es de caída de las exportaciones uruguayas de soja por la baja de su cotización internacional y menores volúmenes.
Para el trigo indica que se espera en el corto plazo una disminución de 36% en la superficie sembrada, por la baja en los precios del grano durante la zafra 2014/2015. Ello, sumado a los problemas climáticos, arrojará una menor cosecha y de inferior calidad.
En tanto, la cebada cervecera tendría a nivel nacional un aumento de 11% del área sembrada. Sin embargo, estima que por la seca bajaría la producción.
Para el arroz, Uruguay XXI dice que es posible un aumento del precio y del volumen exportado. Pero “la falta de mayores tierras aptas para el cultivo probablemente limite el aumento de la superficie plantada en Uruguay y por ende un aumento de la producción por razones ajenas al mejor rendimiento de la superficie ya utilizada”.
Respecto a la pecuaria, el instituto indica que en el mercado de los bovinos se espera mayor nivel de faena o exportación de ganado, dado el alto nivel de stock alcanzado en 2014.
En los lácteos afirma que la “incertidumbre” sobre el mercado internacional y respecto a la economía de Venezuela —principal destino de las exportaciones de lácteos del país— “no permite dar señales claras de cómo evolucionarían los precios de exportación en el futuro cercano”.
Del lado de la oferta, señala que “se espera que la producción mejore en 2015, especialmente en el caso de menguar el fenómeno climático de “El Niño”, que afectó los rendimientos durante la mayor parte de 2014 y principios de este año.