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El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEl murmullo de la muchedumbre en un andén ferroviario seguido de un coro de voces celestiales y una suave melodía al piano introducen I Don’t Know. Y nos damos cuenta de que aunque por lo general sus letras son optimistas y festivas, un tipo como Paul McCartney también puede sentirse vulnerable y percibir más cerca el fin del camino: ¿Qué me está pasando?/ ¿Estoy bien? ¿Estoy mal?/ No lo sé. Está claro que una letra no tiene por qué ser el testimonio cabal de su autor, que bien puede encarnar un personaje: Tengo cuervos en mi ventana, perros en mi puerta/ No creo poder aguantarlo más. Es un golpe emotivo con la suficiente potencia como para que Egypt Station (Capitol, 2018), su 32º álbum pos-Beatles, se ponga al oyente en el bolsillo desde el vamos. A los 76 años es lógico ver venir el otoño, ¿no? Y sí, la voz se empieza a cascotear. ¿Qué esperaban? Este año cumple ¡¡60 años de carrera!!
Como viene sucediendo casi invariablemente en el siglo XXI, Macca lo hizo de nuevo. Como en Chaos and Creation…, Memory Almost Full y New. Comienza Come On To Me y la escuchás con la vara alta de los grandes temas de Band On The Run, del sonido de Flaming Pie, del gancho pop de My Brave Face y This One, de la melancolía de Here Today. Termina y decís: me ganó otra vez.
Lo hizo de nuevo con esa balada hija de Blackbird, optimista y luminosa, llamada Happy With You. Con ese rocanrolazo para los haters (¿A quién le importa lo que dicen los idiotas?/ ¿A quién le importás vos?) Con ese inminente himno de estadios llamado Fuh You. Con la interpretación nostálgica, a guitarra folk y voz, de Confidante, el tema que más denota el paso del tiempo en esas cuerdas vocales que tan bien la han venido llevando. Con el mensaje universal y atemporal de People Want Peace. Con el sonido increíble, lleno de swing, de la batería de Abe Laboriel Jr. Con La ductilidad de esa banda virtuosa, no solo en lo instrumental sino como coristas en plan Queen. Y con Dominoes: óiganla y me cuentan.
Si hay una excepción en este nuevo derrame de talento, que demuestra que nadie es infalible, es la predecible y obvia en su descripción Back In Brazil, a medio camino entre el samba y el tecno-pop (no hay caso, esa alegría es solo brasileña). Pero en seguida ponen las cosas en orden la imponente Do It Now y la bestial suite Despite Repeated Warning, en plan fragmentado a la Band on the Run. Y si quedan dudas sobre que este es un discazo, está la tríada rock-pop-blues de Hunt You Down/Naked/C-Link, y traten de no terminar aplaudiendo de pie.
J.A.