Reportes por acoso sexual en el espacio público aumentaron 50% en 2023 tras puesta en marcha de sistema único de denuncia web

En ese marco, la IM decidió implementar en noviembre de 2022 un sistema único de denuncia web, a través del cual es posible reportar las diferentes situaciones de acoso sexual experimentadas por las mujeres en la calle, las plazas, los mercados y el transporte público, entre otros espacios.

“La forma en la que circulamos por la ciudad es diferente entre hombres y mujeres; es un condicionamiento que nos limita el acceso a otros derechos y que está claramente naturalizado”, mencionó.

Según un diagnóstico sobre violencia hacia las mujeres en el espacio público llevado adelante en 2019 por la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República en conjunto con la comuna, el 86% de las mujeres vivió alguna vez en su vida una situación de acoso sexual. “Y cuanto más joven, más prevalencia tiene este tipo de violencia”, ya que las primeras experiencias comienzan cerca de los 12 años, dijo Quesada en referencia al estudio, enmarcado en el programa Ciudades Seguras para Mujeres y Niñas de ONU Mujeres.

Justamente, los casos que más se reportan en la IM son aquellas situaciones que afectan a niñas de muy temprana edad en la vía pública. O también las que causan “mucho miedo e intimidación al estar vinculadas directamente con el cuerpo”, como cuando se produce un tocamiento o rozamiento, una exhibición o una masturbación en público, informó Quesada. También se han reportado desde gestos y frases obscenas hasta filmaciones sin consentimiento.

Consultada, la jerarca dijo que la mayor cantidad de denuncias por acoso sexual en el espacio público se dan sobre todo en el transporte colectivo, pero no necesariamente porque sea el lugar donde ocurren más. Lo que pasa, indicó, es que recientemente la intendencia comenzó una nueva campaña de comunicación contra el acoso sexual dentro de las unidades de transporte, lo que aumentó en gran medida las denuncias.

En paralelo, la comuna prevé ampliar el trabajo contra las situaciones de violencia de género en nuevos ámbitos. En la actualidad los boliches uruguayos no están obligados a contar con ningún protocolo de actuación ante casos de acoso o abuso sexual, por lo que su implementación depende de cada local.

Es por eso que la IM prepara una nueva línea de trabajo vinculada a los espacios de recreación. Se trata de una estrategia “incipiente”, según Quesada, que se vio demorada por la pandemia del Covid-19 pero que se pretende reforzar con acciones concretas a lo largo de 2023.

Vía única

En la IM prefieren referirse a las situaciones de acoso sexual que se registran como “reportes” en lugar de “denuncias”. Esto se debe a que no todos los casos llegan a judicializarse porque no todas las conductas constituyen necesariamente un delito.

Con el objetivo de facilitar el acceso a ayuda profesional ante este tipo de situaciones, la comuna elaboró un formulario web que unifica todas las vías de denuncia. Así, cuando una persona ingresa un reporte puede acceder a atención especializada por parte de un equipo integrado por psicólogos, asistentes sociales y abogados, con el fin de contenerla y brindarle información adecuada si así lo desea.

En caso de que el acoso sexual haya sido perpetrado por una persona vinculada al gobierno departamental, al ser funcionario o trabajar para una empresa contratada (por ejemplo, una compañía de transporte, obras de construcción o servicios de barrido), la IM puede sancionar o intimar a las empresas a culminar los contratos de trabajo si su plantilla de trabajadores continúa con ese tipo de conductas.

Pero en caso de que quien acosa sexualmente en la vía pública sea una persona sin un vínculo municipal el margen de acción es más limitado, explicó Quesada. Se hace muy difícil determinar la identidad del agresor, por lo que el accionar principal de la IM consiste en “acompañar y contener” a la persona que denuncia.

“Trabajamos desde una perspectiva de la prevención y de colocar el tema arriba de la mesa, no desde una mirada punitivista”, dijo la directora de Género.

Por otro lado, la IM cuenta desde fines de 2020 con los “puntos violetas”; se trata de una iniciativa surgida a partir de la creación de la cuenta de Instagram Varones en el Carnaval, a través de la que se denunciaron cientos de situaciones de abuso y acoso por parte de integrantes de diferentes conjuntos.

Si bien la eficacia de estos puntos ubicados en escenarios populares ha sido cuestionada por los usuarios, Quesada aseguró que desde la IM han tenido “muy buenas devoluciones”. Y es que, además de ser lugares donde se pueden plantear situaciones concretas de violencia de género en un espacio “íntimo y profesional”, estos “puntos violetas” han servido más que nada para difundir información sobre los servicios de atención disponibles, indicó.

En la interna

En 2017 la IM registró más de 15 casos de acoso sexual dentro de sus ámbitos de trabajo; los departamentos más denunciados fueron Limpieza y Cultura.

Y si bien las autoridades reconocieron no contar con las cifras actualizadas al día de hoy, aseguraron que “la recepción de las denuncias y las situaciones en la interna son mayores”, dijo Quesada.

Sin embargo, la directora explicó que no es que en la actualidad haya más casos, sino que el trabajo “se ha profundizado” y se trabaja con todas las áreas de manera permanente. Incluso, se creó una Unidad de Género dentro del Departamento de Gestión Humana para atender este tipo de situaciones.

“Se han registrado más porque colocamos el tema en agenda; no es que haya más casos, sino que ahora hay un espacio adecuado para escuchar y actuar en consecuencia”, señaló Quesada.