Mientras la oferta de sol y playa se muestra —también en este Carnaval— como un destino “consolidado”, el Ministerio de Turismo (MT) planea fortalecer nuevas “rutas” de atractivo para los visitantes.
Mientras la oferta de sol y playa se muestra —también en este Carnaval— como un destino “consolidado”, el Ministerio de Turismo (MT) planea fortalecer nuevas “rutas” de atractivo para los visitantes.
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáUna de ellas podría unir el Geoparque Mundial de la Unesco de Flores con el Frigorífico Anglo en Fray Bentos y Colonia del Sacramento, dos puntos también declarados de interés histórico. Además, junto con el Ministerio de Ganadería y el Instituto Nacional de la Leche, se relevan establecimientos en Colonia, San José y Florida para crear una ruta de la leche que replique la experiencia que ya existe con el vino.
“Se trata de diversificar los destinos ya consolidados como Montevideo, Colonia o Punta del Este. Pero la apuesta también es hacia la territorialización: que todos los departamentos tengan un desarrollo turístico, e incluso en las localidades pequeñas dejar grupos de turismo con referentes”, dijo a Búsqueda el director nacional de Turismo, Carlos Fagetti.
A fines del año pasado varias Intendencias asistieron a la Feria Internacional de Turismo de Buenos Aires con una oferta regional, presentando el “corredor de los pájaros pintados”. Con esa apuesta los departamentos de Artigas, Paysandú, Salto, Río Negro y Soriano ofrecen turismo de pesca, náutica, termal y senderos en contacto con la naturaleza, algo que fue centro del stand de la cartera en la última Expo Prado. El MT pretende extender esa experiencia hacia la zona norte y centro del país.
“Se consolidó la región norte con Tacuarembó, Rivera y Artigas así como la centro-sur de Durazno, Flores, Florida y San José. Y estamos trabajando también el área metropolitana. Tenemos convenios firmados con las Intendencias para un trabajo de largo aliento para mejorar la oferta, capacitar recursos humanos y empezar a ir a las ferias como regiones. Eso ayuda a cohesionar territorios”, explicó el jerarca.
Los departamentos del este (Maldonado, Rocha, Cerro Largo y Treinta y Tres) ya comenzaron a asistir en conjunto a eventos promocionales en el sur de Brasil. Florida y Colonia participaron en la reciente Feria Internacional de Turismo de Madrid mostrando los enclaves de la ruta jesuita, una oferta más consolidada en la que el gobierno espera renovar la cartelería replicando la estética de Argentina, Brasil, Paraguay y Bolivia para lograr comercializar una “ruta multidestino”.
A la feria de Buenos Aires “ya empezaron a ir operadores que están en red con la región para comercializarla y vender una ruta jesuítica latinoamericana. Será (un gasto de) $ 100.000 por cada destino. Pero lo importante es rescatarlo y que la estética sea similar”, dijo Fagetti.
En la “ruta del vino” —integrada por bodegas y establecimientos privados de Canelones, Montevideo, Maldonado y Colonia— se trabaja junto con el Instituto Nacional del Vino (Inavi) para poner en funcionamiento un protocolo de empresas adheridas que incluya hoteles temáticos o restaurantes que hagan del vino nacional el centro de su propuesta. En el “corredor de los pájaros pintados” ya existe un mecanismo de adhesión con el que los operadores deben cumplir y que incluye talleres de capacitación para el personal. Con la incorporación de un técnico de turismo al Sistema Nacional de Áreas Protegidas, el MT espera desarrollar también rutas que incluyan los Esteros de Farrapos, el Valle del Lunarejo y la Laguna de Rocha.
“La madurez la va a ir dando el propio mercado. El rol del público es articular actores y equipar los sitios. Pero después tienen que venir los privados. Y, aunque hay un creciente número, falta que se incorporen más”, opinó Fagetti.
Para fines de este año el MT espera obtener los primeros datos de los observatorios que instalará para el “corredor de los pájaros pintados” (con el apoyo de la Universidad de la República y CAF-Banco de Desarrollo para América Latina) y la “ruta del vino” (en conjunto con el Inavi). “Necesitamos saber de dónde vienen (los turistas) y cuáles son sus hábitos de consumo para orientar las políticas. Hay que ir a la sintonía fina, porque las estadísticas del Ministerio son a nivel nacional pero hay que ver a dónde es que va el turista”, explicó.
Por otra parte, tras una experiencia piloto en Colonia, el MT planea este año hacer “más estable” la entrega de sellos que certifiquen buenas prácticas en materia de accesibilidad de los establecimientos turísticos del país. El relevamiento ya se incluye en los controles que los funcionarios de la cartera realizan sobre las empresas registradas.
“Cuando vemos una buena práctica se anota y la idea es que anualmente haya reconocimientos. Para que cuando se piense en una nueva carta, se piense que hay personas celíacas o diabéticos, por ejemplo. Lo mismo para las reformas. Eso después se puede georreferenciar creando un mapa de destinos y establecimientos que trabajan la accesibilidad”, dijo el director nacional de Turismo.
Las cadenas Sheraton y Radisson fueron premiadas el año pasado, al igual que los hoteles Real Colonia, Colonia West, Puerto Dijama y la posada Al Natural. Esos establecimientos tienen desde capacitación del personal a manuales de accesibilidad o áreas accesibles desde el parking hasta la habitación.
También se reconoció el trabajo de destinos como Piriápolis, Atlántida, los balnearios Cufré y Kiyú, así como reformas de acceso en las playas Bahía Grande de La Paloma y en Montevideo.
Además, en Chuy, Atlántida y Guichón el MT procurará centralizar políticas de manejo de aguas, eficiencia energética y “economía verde” para otorgar un sello de sustentabilidad. Basado en un modelo de Costa Rica, trabaja con las Intendencias, municipios y operadores privados en un protocolo que permita determinar qué prácticas serán certificadas.
“La idea es que vayan teniendo pétalos, por ejemplo en el manejo energético. Pero si el destino solo utiliza energía led o hace una recolección selectiva de los residuos, que también sea reconocible. Porque —dijo— hay un efecto ejemplo hacia otros destinos”. Son tres localidades donde ya ha habido mejoras: Atlántida en su accesibilidad a las playas, Guichón con un área protegida y Chuy obtuvo premios de calidad, informó.