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Las 44.000 toneladas de leche en polvo que le fueron asignadas a Conaprole para venderle a Venezuela dentro del acuerdo firmado entre los gobierno de Uruguay y ese país, ya estaban negociadas antes, con contratos firmados a U$S 3.900 por tonelada, precio que no se va a sostener en esta nueva operación.
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Así lo confirmaron a Campo fuentes de la cooperativa, quienes no pudieron precisar el valor que surgirá de las negociaciones que se están llevando adelante para definir el nuevo precio del producto.
Aseguraron que no se va a respetar el importe por tonelada acordado con anterioridad a la parálisis de las ventas, ni se va a negociar dentro de los niveles actuales del mercado internacional, que se ubica en un entorno de U$S 2.000 por tonelada.
Dijeron que “probablemente” el valor que finalmente surja se ubicará en un punto medio entre ese piso y el techo de U$S 3.900.
Las ventas a Venezuela se interrumpieron cuando el gobierno de Nicolás Maduro dejó de cumplir con los pagos por exportaciones realizadas y que generaron deudas por U$S 27 millones a Conaprole, U$S 9 millones a la empresa Tres Arroyos por la exportación de pollos y U$S 15 millones más a otras empresas de fuera del rubro alimenticio. Pero también cayeron los contratos que hasta ese momento tenía vigentes y firmados, como las 44.000 toneladas de leche en polvo de Conaprole. “Maduro se quedó sin plata, nos pasó a deber 27 millones y no le embarcamos más, pero eso ya estaba atado en otros precios, en U$S 3.900 por tonelada exactamente y ahora no va a salir a esa plata, va a salir a menos”, dijeron a Campo.
Explicaron que ese es el motivo por el cual lo pactado entre los gobiernos es de 44.000 toneladas y no cualquier otra cifra, y por qué el 100 % de esa cuota se asignó a Conaprole. “Ya eran de la cooperativa”, apuntaron.
A un mes y medio de que el presidente Tabaré Vázquez hiciera público el acuerdo el pasado 6 de julio, hasta el momento todavía no está operativa la posibilidad de concretar embarques, hecho que tiene “muy nerviosos” a los operadores, tanto de leche en polvo como de quesos, pollos, arroz y soja, que son los productos que integran el convenio. Se trata de 44.000 toneladas de leche en polvo, 12.000 toneladas de queso, 9.000 toneladas de pollo, 80.000 toneladas de soja y 120.000 toneladas de arroz (50 % sin procesar y 50 % blanco con hasta un 5 % de quebrado).
En oportunidad del anuncio oficial a principios de julio, Vázquez afirmó que “es oxígeno puro para el país” y que si bien el acuerdo sería refrendado el día 17 de ese mes en Brasilia, cosa que sucedió, el mismo quedaba operativo desde ese mismo momento.
El día martes 18 de agosto, un mes después, el Senado de la República votó la autorización para que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) transfiera a Ancap U$S 262 millones para que el ente cancele anticipadamente una deuda de U$S 400 millones con Pdvsa, la empresa petrolera estatal venezolana. Ese es el dinero que el país caribeño va a utilizar para comprar 265.000 toneladas de productos uruguayos.
Una vez que el MEF traspase ese monto, el mismo será depositado en el banco venezolano con sede en Uruguay, Bandes, en un fideicomiso administrado por la Corporación Venezolana de Comercio Exterior SA (Corpovex), organismo estatal, creado en 2013, adscrito al Centro Nacional de Comercio Exterior, y que tiene como su principal función “organizar y garantizar las importaciones para cubrir las necesidades del país, procurar y garantizar las mejores condiciones en cuanto a calidad y precios de productos y bienes para el país, simplificar y lograr la máxima eficiencia en los procesos de importación y exportación, y centralizar y facilitar las exportaciones no petroleras”.
Corpovex será el fideicomisario en esta operación, y sus funcionarios son quienes están negociando las condiciones de las compras comprometidas en el acuerdo. A partir de que el dinero quede finalmente depositado en el banco Bandes, ese organismo estará en condiciones de comenzar a liberar las cartas de crédito correspondientes.
Se espera, además, que una vez que eso suceda, también se cancelarán las deudas que el gobierno venezolano mantiene con las empresas uruguayas por más de U$S 50 millones.
Las fuentes consultadas por Campo expresaron que no estaba siendo una negociación fácil, y que habrá nuevas instancias de conversación planteadas por Venezuela.
“Nosotros hoy no podemos embarcar, estamos desesperados”, dijeron. Conaprole está produciendo leche en polvo “para ese negocio y para cualquier otro, porque es el ritmo de producción normal”. La cooperativa está actualmente generando entre 10.000 a 12.000 toneladas de leche en polvo por mes, y según se deprende del texto del contrato suscrito con los productores ex remitentes a la compañía Schreiber Foods, posee un stock de más de 50.000 toneladas de leche en polvo y manteca, justo previo a la zafra de primavera cuando ingresarán 90.000 toneladas adicionales “sin avizorarse mercados de colocación de la producción acumulada”. En ese mismo documento se hace referencia, además, a la deuda financiera neta de la cooperativa, que alcanza a los U$S 140 millones, triplicando la existente en agosto 2014. Conaprole advirtió en ese documento que “la lechería se encuentra en una emergencia nacional sin precedentes que condiciona su sustentabilidad”.