Las finanzas públicas volvieron a deteriorarse en agosto, arrastrando las consecuencias del peor momento de la emergencia sanitaria.
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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEl déficit fiscal anual se ubicó en US$ 3.016 millones, lo que, según informó ayer miércoles el Ministerio de Economía, equivale a 6,1% del Producto Bruto Interno (PBI). En los 12 meses a julio el desequilibrio en las cuentas públicas era de 5,9% del PBI. La desmejora a agosto se produjo —entre otras razones— por una baja en la recaudación tributaria.
Esos resultados son sin considerar los ingresos extraordinarios —de 0,9% del Producto— por los “cincuentones” que dejaron las AFAP y volvieron a aportar exclusivamente al Banco de Previsión Social.
Si se excluye el resultado del Banco Central, el déficit anual del sector público —no monetario— se ubicó en 5,9% del PBI; era 5,4% a julio.
El equipo económico de gobierno proyectó para este año que los ingresos superarán los gastos en el equivalente a 5,6% del Producto; el resultado iría mejorando gradualemente a lo largo del quinquenio, a partir de ahorros y de un repunte de la recaudación, a medida que se reactive la economía. En 2024 el déficit sería 2,5% del PBI, según las estimaciones que basaron la propuesta de ley de Presupuesto a estudio del Paralmento.
Más endeudamiento. El deterioro fiscal de los últimos meses refleja la crisis por el Covid-19 y su impacto tanto en los ingresos —por la menor actividad económica— como en los gastos extra en que incurrió el sector público para paliar sus consecuencias. Por la misma razón, la deuda pública aumentó en el segundo trimestre del año. Creció en US$ 2.108 millones respecto a marzo y se ubicó en US$ 38.047 millones, informó ayer miércoles el Banco Central (BCU). En términos del PBI, ese monto equivale a 73,7%; era de 65,8% tres meses antes.
Si se descuentan los activos de reserva (US$ 19.527 millones), la deuda —neta— se ubicó en US$ 18.520 millones en el segundo trimestre, un incremento de US$ 1.826 millones. Como porcentaje del PBI, la suba fue de 30,6% en marzo a 35,9% ahora.
Balanza. El BCU difundió también ayer los números preliminares a junio de la balanza de pagos, que registra las transacciones del país con el mundo.
El saldo de la cuenta corriente y de capital en los 12 meses cerrados en junio resultó deficitaria en US$ 152 millones, lo que significa un 0,3% del PBI. En el año móvil cerrado en junio de 2019 había registrado un superávit de US$ 256 millones (0,4% del Producto).