El torrente televisivo tiene quien lo estudie

“Las ficciones dan cuenta de las identidades de los pueblos que las producen”, remarcó la investigadora. “Son un ámbito en el que se representan problemáticas sociales, modos de experimentar el mundo. Pueden servir, muchas veces, para colocar puntos de vista encarnados en un personaje y, de esa manera, comprender un tema que pueda ser complejo. Eso nos parece digno de ser estudiado”, agregó.

La oferta de ficción iberoamericana, en tanto, mantuvo una tendencia al descenso detectada por la red de investigación en los últimos años, tanto en cantidad de títulos como en volumen de horas de emisión. Mientras que en 2018 fueron 25 los estrenos en Uruguay (1.407 horas y 55 minutos), en 2019 se estrenaron 27 títulos que sumaron solo 968 horas y 46 minutos. De las ficciones estrenadas, hubo un aumento de títulos brasileños (11) y un menor número de ficciones argentinas (cuatro).

Sin embargo, y en concordancia con los capítulos del anuario redactados por el resto de los países de la red de Obitel, también se estableció que la producción y emisión de ficciones van en aumento dentro de las plataformas on demand, con una fuerte presencia de títulos iberoamericanos en Netflix, donde hoy pueden encontrarse series como Alta mar (España), Bolívar (Colombia) y Élite, entre otras. “Si uno observa la televisión comercial abierta de los últimos años, es claro que la decisión empresarial ha sido invertir en formatos de entretenimiento de tipo concurso y agrandar los noticieros”, señaló la académica.

Melodrama en clave carcelaria.

En 2020, año en el que se examinó la información de 2019, Obitel Uruguay también se acopló a la dinámica de investigación internacional de la red, que propone el abordaje de un tema en común entre todos los países miembros. En 2019, la temática fue “el melodrama en tiempos de streaming”. Sánchez y equipo definen al melodrama como un género que aloja el cambio sociocultural del mundo que lo produce. “El melodrama sigue teniendo mucha presencia, ya sea en la televisión abierta como en el video on demand”, señaló Sánchez Vilela. “Incluso en aquellas ficciones que se han consagrado como de calidad y que nadie le pondría la etiqueta de melodrama porque tuvo mala prensa como un género menor, del vulgo. Hay ficciones televisivas en las que uno puede reconocer la matriz melodramática y sin embargo la industria no las ofrece como tal. Si recorres la cartelera de Netflix o de Amazon Prime, vas a encontrarte con algún título en el que el melodrama está presente”.

Debido a la ausencia de ficciones televisivas producida en Uruguay en 2019, Obitel Uruguay estudió la serie argentina El marginal, producida por Underground, coescrita por el director uruguayo radicado en Argentina, Adrián Caetano, y emitida por la señal argentina Tevé Pública y disponible, posteriormente, en Netflix.

Con tres temporadas en 2016, 2018 y 2019, El marginal es enmarcado como un melodrama en clave “carcelaria”. La ficción se centró, inicialmente, en torno al personaje de Miguel Palacios (Juan Minujín), un policía encargado de encontrar a la hija de un juez corrupto secuestrada por los hermanos Borges, dos figuras de autoridad dentro del penal de San Onofre. Palacios se infiltra en la cárcel con una falsa identidad, Pastor, con el fin de hallar a la joven.

“El enfrentamiento del bien y el mal está presente, con fronteras reconocibles pero también diluidas, tanto en la configuración de los personajes como de las situaciones. Palacios no es un héroe plagado de virtudes”, expresa el análisis. “La ampliación del mundo narrativo en las temporadas dos y tres introduce inflexiones en la matriz melodramática, de manera que los límites entre el bien y el mal se hacen más complejos. En sus últimas dos temporadas, la serie planteó un nuevo marco temporal, arraigando su historia en el pasado en relación a la primera temporada y relatando los orígenes de los hermanos Borges, entre los que se encuentra el personaje Diosito, interpretado por el actor uruguayo Nicolás Furtado.

La investigación de Sánchez y equipo halló en esta estrategia un mecanismo narrativo capaz de cautivar a audiencias que se alimenta, de mejor manera, a través de una distribución en una plataforma como Netflix. “Este manejo arriesgado de la serialidad es favorecido por la lógica del streaming y el video on demand”, señala el trabajo. “El espectador puede ir para atrás para ordenar el relato porque tiene todos los capítulos disponibles. De alguna manera, se reedita la práctica de la lectura de la novela impresa: releer para detectar alguna pista que habíamos olvidado o a la que no habíamos prestado atención y que ahora necesitamos para seguir la historia”.

El capítulo uruguayo dentro del anuario completo del Observatorio Iberoamericano, donde también se amplía cómo la distribución de los productos de la industria a través de Internet está afectando las estrategias de las cadenas televisivas, puede descargarse de forma gratuita en línea en el sitio oficial de la red Obitelar.Wordpress.