En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
Convencido de que “en algunos reducidos ámbitos frenteamplistas, gente sin votos —y muchos sin cargos— dan manija” diciendo que los dirigentes de gobierno del Movimiento de Participación Popular (MPP) son un “desastre en la gestión”, el diputado de ese sector Aníbal Pereyra advirtió sobre la existencia de esa situación en el oficialismo, que considera que está motivada por “mala fe” y por una disputa por “espacios internos”.
¡Registrate gratis o inicia sesión!
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
Pereyra, un integrante de la Dirección Nacional y del Secretariado Ejecutivo del MPP, del cual es uno de sus principales operadores políticos, señaló que la cantidad de jerarcas de gobierno integrantes del sector que fueron relevados de sus cargos por el presidente José Mujica no evidencian “un problema político”. Lo que sigue es parte de una entrevista que mantuvo con Búsqueda en su despacho del Palacio Legislativo.
—El presidente de la República relevó de sus cargos a jerarcas de la Salud, de Secundaria, de OSE, a la ministra de Vivienda, todos ellos pertenecientes al MPP y quedó claro que fue por asuntos de gestión. ¿Considera que el MPP tiene problemas para gestionar la administración pública?
—Previo al triunfo de Tabaré Vázquez en el 2004 y en su primer semestre de gobierno, la derecha dijo que la gestión de la izquierda sería un desastre, que se fugarían los capitales, que se dispararía la inflación, que los inversores se irían, que aumentaría la desocupación y que el caos dominaría la vida nacional. Segunda cosa, la derecha quiere instalar la idea de que dentro del gobierno hay un sector más serio que otro en el manejo de la economía. Y en el fondo no entienden que cada jugador atiende su casillero pero todos pertenecen a un gobierno que ha sabido manejarse con seriedad en el marco de una crisis mundial que data del 2008. Cuando usted me pregunta de gestión en definitiva está hablando de eficacia y de eficiencia. Y me viene a la memoria la reforma impositiva, que se aplica con singular eficacia. Me acuerdo que hubo gente que llegó a decir que con esa ley caerían las ventas, cerrarían los bares y las parrilladas y que poco más que los cines y teatros cerrarían sus puertas. Pasó todo lo contrario. Y la verdad que espero una autocrítica de los que permanentemente nos señalan con el dedo diciendo que somos un desastre gestionando. De estas cosas nos olvidamos. Y no le cobramos a la derecha lo que tiene que pagar ante la opinión pública.
—¿A quién se refiere concretamente?
—A más de un tipo de peso en la opinión pública que con nuestro gobierno le va muy bien, pero que parece hoy tener memoria frágil o amnesia militante. Pero déjela por ahí.
—¿El MPP debe hacer autocrítica por el hecho de que varios de sus integrantes no tuvieron una actuación satisfactoria en su gestión y fueron relevados por el presidente?
—No, no. Ese análisis es equivocado. Eso es pensar con la lógica de hegemonías que dominó mucho tiempo en el Frente Amplio, es equivocado. Esa lógica no corresponde. En toda la izquierda hay gente que aporta. Y nadie puede decir, ningún sector, “yo tengo el capital de contar con los mejores técnicos y los cuadros más capaces”. Autorreferenciarse como parte de un sector en el que son todos unos fenómenos en la gestión y tratar a todos los demás de burros es un agravio, es mentira y denota una suficiencia impropia del pensamiento de izquierda.
—¿A quién identifica con este pensamiento?
—Esto es muy chico, pero en algunos reducidos ámbitos frenteamplistas, gente sin votos y muchos sin cargos, dan manija con eso. Son pocos, muy pocos. Pero hacen daño y alguno tiene columnas en radio y en Internet... y repiten en asados, en reuniones pequeñas que “los tupas son un desastre gestionando”.
—¿Podría ser más explícito en su comentario?
—Usted tiene derecho a preguntar lo que quiera, me parece bien, acepte que yo vaya en mis respuestas hasta donde quiera... Además, y completo mi pensamiento, Mujica no ha medido ni mirado sector para relevar a los compañeros que entendió no estaban cumpliendo a cabalidad con lo que él consideraba adecuado. No es un drama ni el fin del mundo. Hay recambio. Si uno mira porcentualmente capaz que en una de esas sí: los más relevados fueron del MPP, pero seguramente porque porcentualmente son más.
—¿No es entonces un problema político?
—No. Es parte de la realidad que tenemos. Hay gente que tiene gran capacidad técnica pero adolece o adoleció de problemas de corte político para desempeñar a plenitud su responsabilidad. Capacidad técnica y oficio político son en teoría los componentes básicos que debe portar un cuadro de gobierno para, en el plano ideal, no fallar. E incluso teniendo esos dos componentes, algunos compañeros también debieron ser relevados. Estoy convencido de que hay que desterrar esta lógica que nos endilga a nosotros, MPP, una suerte de monopolio del mal administrador y gestor. Yo me pregunto, ¿alguien se acuerda de qué color partidario fueron las intendencias que perdió el Frente Amplio?
—Dos socialistas (Paysandú y Treinta y Tres), una del Partido Demócrata Cristiano (Salto) y una independiente (Florida).
—Exacto. Seguramente no habrá escuchado a nadie del MPP cuestionar la capacidad de gestión de estos compañeros atribuyéndoles responsabilidad por una supuesta mala gestión que nos llevó a derrotas. Las cosas son bastantes más complejas y todos, el Frente Amplio en su conjunto, fuimos responsables.
—¿Entonces el MPP no tiene por qué preguntarse si sus dirigentes en el gobierno fueron o son los más aptos, y es absolutamente normal que Mujica releve de su cargo a mucha gente del sector?
—Mire, la verdad es que me molestan las generalizaciones. Atribuir supuestas debilidades del gobierno a presuntas incapacidades de gestión del MPP parte de un análisis que combina por lo menos mala fe e ignorancia. Necesitamos una transfusión de grandeza política y amplitud. Y debemos barrer toda la mezquindad que tenemos. Nosotros nos hacemos responsables, no rehuimos, pero simplificar es no entender de política. Hoy en Secundaria, por ejemplo, no hay nadie del MPP y las críticas son tan o más intensas y sostenidas que cuando había compañeros nuestros. Insisto: asociarnos al desastre en la gestión es una mentira, un error y entraña intencionalidad política de quien quiere ganar espacios internos. Y hay gente que quiere ganar y ser fuerza mayoritaria denostando a otros compañeros. Acá ningún sector es responsable de todo lo malo y de todo lo bueno. El secreto es saber construir equipos de gobierno, y a Mujica se le podrá cuestionar mucha cosa pero nadie puede cuestionar su amplitud, su respeto, y su tolerancia hacia los compañeros de todos los sectores y hacia el conjunto de la sociedad. Jamás flechó la cancha en favor del MPP. Es más: hay sectores con poco peso electoral en la interna pero con mucha gente en cargos de gobierno. Eso demuestra amplitud y generosidad.