“Tenemos un elefante blanco en el medio de la sala y miramos para el costado”, dijo el diputado colorado Felipe Schipani. La frase rompió el clima formal y previsible en que transcurría la sesión del lunes 17 en la comisión parlamentaria, donde una delegación de autoridades universitarias justificaba su pedido de recursos incrementales en el marco de la Rendición de Cuentas. El legislador aludió de esa manera a la “muy baja” cantidad de egresados y al elevado porcentaje de abandono que registra la Universidad de la República (Udelar).
Luego de tres horas de presentaciones e intercambios, el rector de la Udelar, Rodrigo Arim, y Schipani iniciaron una discusión sobre este “drama nacional” del que, según el legislador, “no se habla”: el desbalance entre ingresos y egresos de estudiantes en el nivel terciario y el desafío de retenerlos.
Schipani —también integrante del Comité Ejecutivo Nacional colorado y de la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara Baja— destacó “el fenomenal aumento” de la matrícula universitaria y la mejora de la oferta educativa. “Nada tiene que ver esta Universidad de la República con la que conocimos hace más de 20 años como estudiantes”, contó el legislador.
No obstante, señaló que la presentación eludió referirse al “otro extremo, el egreso, y eligió centrar el debate en este punto.
En los últimos 10 años la matrícula de la Udelar creció alrededor de un 30%: pasó de 110.000 alumnos en 2012 a 156.000 en 2022. Pero esto tiene “un correlato que no es proporcional con el egreso”, apuntó Schipani. De 6.441 egresados en 2012, la universidad pasó a tener 6.965 en 2021; en la actualidad ronda los 6.900. “Quiere decir que mientras la matrícula creció un 30% el egreso creció un 7%” y se mantuvo en cifras similares en los últimos años.
Según el diputado oficialista, Uruguay es uno de los países con menos egresados en educación superior de América Latina. “Solo le gana a Honduras” en toda la región, afirmó, y provocó la reacción del rector y de parte de la bancada frenteamplista, que incluyó una “interrupción” del diputado Sebastián Valdomir (MPP).
“Hay diputados que se sienten agraviados. ¡Es surrealista!”, comentó Schipani, entre provocaciones cruzadas, y aportó más datos: Uruguay tiene 34,7 egresados cada 10.000 habitantes, y Honduras, 25, mientras que el promedio en Latinoamérica es de 58.
A continuación vinculó los bajos niveles de egreso universitario al abandono. El 8% de la población mayor de 25 años declara no haber culminado la educación superior o terciaria, según la última Encuesta Continua de Hogares del Instituto Nacional de Estadística (INE, 2022).
Las tasas de abandono en la Udelar se ubican “en torno al 70%”, indicó Schipani, con base en información extraoficial. Según datos de la Udelar, en el primer año de carrera abandona el 27% de los universitarios. No hay datos precisos de este indicador en los siguientes niveles.
Un informe de la Facultad de Ciencias Sociales, citado por Schipani, señala que la principal causa del abandono es “la vinculación al mundo del trabajo”.
“No hay magia”
El rector universitario aseguró que el problema es “mucho más complejo” de lo que planteó el diputado colorado. “No hay realismos mágicos en esto”, dijo e invitó a discutir “sólidamente”.
Arim asumió que el presupuesto de la Udelar “es grande”. Empero, puntualizó que equivale a “la mitad que el de cualquier otra universidad pública de la región, atendiendo la misma cantidad de estudiantes”.
“¿Qué universidad en América Latina tiene un nivel de egreso como tiene la Universidad de la República con su presupuesto?”, planteó ante los parlamentarios, y respondió: “Ninguna”. Puso como ejemplo la Universidad de Chile, que “tiene el doble del presupuesto que la Udelar y la misma cantidad de egresos de grado”, y el de las universidades brasileñas federales, que en algunos casos tienen el triple de recursos y “un poquito menos” de egresos.
El jerarca reconoció que el abandono es “un problema muy importante” para Uruguay. “No me voy a escudar en algo que es real”, dijo, y también global, añadió. En Estados Unidos un 60% termina la formación de grado y “hay un 40% que queda por el camino”. También dijo que afecta tanto a las universidades públicas como a las privadas y que “hay que ser cuidadoso” en las comparaciones entre países, porque hay estructuras demográficas como la uruguaya, muy envejecida, en la que las generaciones más altas tienden a tener menor nivel educativo que las más jóvenes.
A su entender, lo que se debería comparar no es la cantidad de estudiantes, sino la generación de ingreso. “No importa si tengo 160.000 estudiantes si ingresaron todos en los últimos tres años, sino que lo que tengo que comparar es la generación de ingreso de hace seis o siete años atrás con la de ingreso de hoy”, señaló. Y añadió: “¿Saben qué es lo que le falta a Uruguay? Un órgano —que perfectamente podría estar en el Ministerio de Educación y Cultura— que tome los microdatos de todos los universitarios, siga las trayectorias y evalúe a todos en pie de igualdad”.
El rector comentó que hay muchos universitarios part time. Un quinto de los estudiantes que comienza la vida universitaria “está trabajando”, eso, en parte, explica que demoren en terminar sus carreras.
Resaltó: “Efectivamente no vamos a mejorar en el grado de retención invirtiendo la misma cantidad de horas por docente que estamos invirtiendo hoy. Vamos a tener más dificultades, porque los estudiantes vienen con mayores dificultades. Los queremos dentro de la Universidad de la República más diversos, más heterogéneos y queremos hacernos responsables de esa realidad, pero vuelvo a decir que en esto en el mundo no hay magia”.
Schipani no quedó satisfecho con las explicaciones de Arim. “Este es un drama nacional que se soslaya permanentemente y un tema para problematizar. No es solo una cuestión económica, como dijo el rector”, comentó el diputado a Búsqueda. Añadió que “la calidad académica de la educación superior del país es otro elefante blanco que anda por ahí” y planteó fomentar la virtualidad para que los universitarios no abandonen sus carreras.
El Partido Colorado, a impulso de Schipani, planteó este año la creación de una universidad virtual pública. “Quizás, si ampliamos la oferta de la virtualidad, muchos de esos estudiantes, que tienen dificultades por tener que incursionar en el mundo del trabajo, podrían continuar sus estudios”, insistió el diputado.
Al respecto, Arim adujo restricciones presupuestales como impedimento para extender las modalidades de enseñanza a distancia en la universidad y, otra vez, pidió ser “cuidadosos”, porque “los estudiantes más frágiles necesitan mayor acompañamiento” y no solo virtual. “Las plataformas digitales pueden ser un excelente motor para quienes ya tienen la autonomía suficiente para poder aprender. Sin embargo, es problemático para estudiantes que vienen con dificultades”, dijo.
Y concluyó: “¿Queremos retener a los más vulnerables? No hay en el mundo otra solución que invertir en más docentes capaces de acompañar (…). ¿Queremos maximizar el ingreso? Por supuesto que la diversificación de plataformas institucionales, entre ellas la enseñanza virtual, importa, pero no es el antídoto para la retención”.
Información Nacional
2023-07-26T19:20:00
2023-07-26T19:20:00