En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
* Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
¡Hola !
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
Sí, da un poco de náuseas leer esta novela. La historia es así: en un mundo futuro, o no tanto, los animales están contaminados con un virus, una especie de “vaca loca” que se transmite a los humanos y los mata. Por lo tanto, los gobiernos decidieron aniquilar a los animales. A todos. Hay que imaginarse un mundo sin mascotas ni ganado ni bichos salvajes. Pero la humanidad sigue siendo carnívora, por lo menos un porcentaje importante de la población. Y a falta de animales, hay humanos que se dividen en dos categorías: los que comen carne y los que son alimento.
¡Registrate gratis o inicia sesión!
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
La escritora argentina Agustina Bazterrica no se anduvo con vueltas y le puso a su novela Cadáver exquisito (Premio Clarín 2017), un título muchas veces utilizado desde que los surrealistas así llamaron a uno de sus métodos de escritura fragmentaria y colectiva. Pero en esta historia el título es literal. El canibalismo se legalizó y hay frigoríficos y criaderos que siguen un estricto procedimiento para que la carne llegue a los hogares. Los más pudientes comen carne de primera, otros se arreglan con lo que pueden pagar.
La novela sigue los pasos de Marcos Tejo, encargado del frigorífico Krieg y mano derecha de su dueño, un ser despreciable. Si bien Marcos ha naturalizado el canibalismo, tiene sus dudas con respecto a sus causas y cree que es “una puesta en escena” de los poderosos para reducir la población. Marcos es un ser solitario que ha tenido una tragedia en su vida y aún recuerda los años en los que todo era diferente. Por eso no le gusta “faenar humanos”, que en eso consiste su trabajo, ni llamar “por ningún nombre” a quienes caen en el frigorífico
Los conflictos interiores de Marcos aumentan cuando llega a sus manos un “ejemplar femenino” de cría. Las reglas están muy claras: en los hogares se pueden criar humanos, pero no tener ningún tipo de relacionamiento, ni afectivo ni sexual. Quien transgrede esta ley, marcha al matadero.
El protagonista es un personaje sólido que crece en la novela sin convertirse en héroe ni en rebelde, algo muy bien logrado por Bazterrica, igual que su final impredecible. Otro punto fuerte es la creación de un ambiente fuera del tiempo, pero con situaciones reconocibles, lo que hace que la irrealidad sea aterradoramente real.
En esta historia se siente el miedo de la “res” en el momento antes de que la golpee el marrón. Y se huele la sangre del frigorífico. Quienes estén contra el maltrato animal la van a adorar, y quienes gustan de las parrilladas también. Porque antes que nada es una novela, y de las buenas.