Tribunal cuestionó un fallo judicial que no consideró la “voluntad y opinión” de un joven con autismo al negarle un permiso para viajar

REDACCIÓN  

Las personas con discapacidad pueden necesitar apoyo familiar, ayuda para tomar determinadas decisiones, para trasladarse o para resolver cuestiones cotidianas. Pero eso no significa que no tengan derecho a que su opinión sea escuchada, a decidir sobre sus vidas y planes futuros. La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, aprobada por Naciones Unidas y ratificada por Uruguay, consagra el derecho a la autonomía individual, a la independencia y a la no discriminación.

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