“No basta con ser sostenible, hay que demostrarlo con hechos concretos y reportes transparentes”, afirmó la gerente senior de Sostenibilidad y Comunicaciones de Montes del Plata, Carolina Moreira, subrayando el compromiso de esa industria forestal con la mejora continua y el desarrollo sustentable del sector agropecuario en Uruguay.
Allí destacó que la sostenibilidad organizacional es un modelo de negocio que crea valor a largo plazo, a partir de la gestión de riesgos y oportunidades, tomando en cuenta los impactos económicos, sociales y ambientales.
“Cualquiera sea la empresa o la actividad humana, siempre hay impactos. Lo clave es identificarlos y abordarlos con planes concretos: potenciar los positivos y mitigar los negativos. Para quienes se preguntan por dónde empezar a construir una estrategia de sostenibilidad, la respuesta es clara: arranquen por la materialidad, identifiquen sus impactos y definan qué aspectos son claves para su empresa y su sector”, explicó.
Desde 2010 Montes del Plata cuenta con un área de sostenibilidad, que reportaba directamente al gerente general, lo que evidencia la relevancia que los accionistas dieron al tema en un momento en que no era tan conocido. La clave para estructurar una estrategia sostenible radicó en la identificación de los impactos de la organización en su entorno ambiental y social.
Moreira subrayó que es fundamental reconocer estos impactos y priorizarlos según su magnitud y duración. Para lograrlo, Montes del Plata se apoyó en un préstamo ESG del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que impuso una serie de requisitos ambientales, de seguridad y salud ocupacional, y de vinculación con las comunidades. Esto permitió realizar un análisis exhaustivo de línea de base ambiental y social para prever y mitigar impactos negativos, potenciar los positivos y mantener un diálogo constante con los grupos de interés.
A partir de la identificación de impactos, la empresa comenzó a reportar, según metodologías reconocidas internacionalmente, como Global Reporting Initiative (GRI) y Sustainability Accounting Standards Board (SASB). Estas herramientas permiten una comparabilidad estandarizada entre empresas, facilitando la medición del desempeño y la fijación de metas de mejora continua. Además, Montes del Plata ha obtenido certificaciones como FSC y PEF, así como la implementación de estándares ISO.
La gerente destacó que la empresa puso mucho foco, en un comienzo, en la seguridad, pasando a ser un pilar estratégico. “Es un aspecto que ayuda a generar cultura de trabajo”, dijo. Y agregó que se observaba que la gente tenía la sensación de “un desplazamiento productivo”. Sin embargo, teniendo en cuenta la sinergia de la ganadería con la forestación, se avanzó mucho en este sentido, así como en otros rubros como la apicultura.
“No nos detengamos a pensar en el origen de todo esto, y si estamos pagando justos por pecadores, porque al planeta eso no le importa” “No nos detengamos a pensar en el origen de todo esto, y si estamos pagando justos por pecadores, porque al planeta eso no le importa”
Por otro lado, frente al impacto de cualquier actividad agrícola, mantener áreas de conservación es una buena práctica y las certificaciones exigían esto, por lo cual la empresa también comenzó a trabajar en este aspecto.
Moreira sostuvo que en todo este proceso “es clave escuchar a los stakeholders, entender sus expectativas y preocupaciones, y trabajar en conjunto para generar soluciones”.
Los stakeholders “son personas o grupos que pueden ser afectados en forma directa o indirecta por las actividades de la empresa, como también todos aquellos que podrían tener intereses en la empresa o bien la capacidad de influir en su resultado y/o éxito”, explicó.
Comentó que en Montes del Plata “hemos implementado herramientas de diálogo con comunidades, productores y otros actores, lo que nos ha permitido construir relaciones de confianza”.
La ejecutiva agregó que “no solo son los accionistas, son los vecinos, los competidores, las instituciones financieras, los medios de prensa, la academia y hasta las generaciones futuras”. Por lo tanto, sostuvo que es importante escucharlos.
A su vez, Moreira sostuvo que una herramienta que se les pide a las empresas que están en el camino de la sostenibilidad es un registro de las comunicaciones relevantes.
Destacó que Montes del Plata ya lleva cinco reportes de sostenibilidad, hechos no solo para comunicar sino para tomar acción sobre algunos temas que, al ponerlos sobre la mesa se establecen como metas para las cuales también se les hace un seguimiento.
La importancia de la Agenda 2030. La gerente senior de Sostenibilidad y Comunicaciones de Montes del Plata enfatizó la relevancia de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU como una guía global para la sostenibilidad. Destacó que, a pesar de los retrocesos en ciertos discursos, esta agenda sigue siendo una herramienta clave para alinear las acciones de empresas, gobiernos e individuos hacia un futuro sostenible.
“Me parece emocionante que el planeta entero, la humanidad entera, haya sido capaz de hacer un documento único, poniéndose de acuerdo en cuáles son las prioridades para tener un planeta viable para el futuro, para nuestros hijos y nuestros nietos”, expresó.
En ese sentido, destacó que allí básicamente se plantea trabajar en 17 objetivos, pero en 169 metas, que abarcan diferentes temas ambientales, sociales, de gobernanza, entre otros.
“Tener una mirada más amplia es lo que nos debería motivar en esa búsqueda de mejorar la sostenibilidad de cada empresa” “Tener una mirada más amplia es lo que nos debería motivar en esa búsqueda de mejorar la sostenibilidad de cada empresa”
Moreira aseguró que todo lo que se haga desde una empresa tiene un impacto en el desarrollo sostenible. “Estos Objetivos de Desarrollo Sostenible buscan tener un planeta viable. No nos detengamos a pensar del origen de todo esto, y si estamos pagando justos por pecadores, porque al planeta eso no le importa”, dijo.
A su entender, “tener una mirada más amplia es lo que nos debería motivar en esa búsqueda de mejorar la sostenibilidad de cada empresa”. Consideró que “tener una gestión sostenible se trata de tener una gestión participativa y permeable. Se habla mucho de las organizaciones porosas, que el entorno, que estos stakeholders, que estas demandas del contexto no me sean indiferentes. Tomo esta comunicación, transformo lo que hago y doy respuesta a este entorno. Entonces, esta armonía que tiene que existir entre el ser, los principios y valores de una organización, con el hacer, el diseñar programas, hacer a los grupos de interés partícipes y el ser proactivos en comunicarlo”.