Fenotipo y datos objetivos de EPD para seleccionar animales que “produzcan bien en el campo”

La cabaña inició criando la raza Hereford, en su variedad astado, y con ovinos Corriedale, y en 1978 incorporó el Polled Hereford (mocho). En el establecimiento también se hacía agricultura y manejo comercial del rodeo, hasta que en el año 1997 ese campo se vendió y la empresa trasladó sus planteles al establecimiento donde se encuentra actualmente, en la zona de Carpintería, en el departamento de Durazno.

La cabaña produce cerca de 110 toros de ambas razas cada año y los ofrece en su tradicional remate anual. También participa en las principales exposiciones ganaderas del país, concurriendo a la Expo Rural del Prado desde 1952, de forma ininterrumpida.

“Tenemos estas dos razas que son las principales para criar en Uruguay, adecuadas a las condiciones del país. Nuestra forma de seleccionar consiste en buscar el tipo de animal que sea funcional y apto para estar en pasturas todo el año”, comentó Lucía Zerbino.

Lucía Zerbino.jpg

Lucía Zerbino, integrante de la cabaña San José del Yaguarí

Describió que a los planteles de cría “los mantenemos en base a campo natural, las vacas están preñadas y crían su ternero hasta los seis meses, y después se vuelven a preñar en el mismo sistema”. Agregó que “la recría tiene una mejora después del destete, y los terneros van a una dieta que permite el correcto desarrollo durante el primer invierno. Luego se van del corral a campos mejorados para terminar su recría”.

La criadora analizó que al tratarse de dos razas que “son la base de la producción de carne del país, buscamos una selección por características que hacen al producto final, por el que Uruguay es famoso a nivel mundial”. Al tener animales de pedigrí “tenemos datos de EPD (diferencia esperada en la progenie, por sus siglas en inglés), una herramienta importante a la hora de seleccionar, para poder estimar cómo va a producir ese animal”; es algo que “te da certeza en la selección”, valoró.

San José del Yaguarí busca producir animales que tengan buenos aplomos y buena conformación, porque “tienen que estar en el campo y caminar para buscar su alimentación”, comentó la veterinaria. Y a la vez enfatizó la importancia de la herramienta de los datos objetivos de EPD, que “te da una idea de lo que va a producir ese animal, con características de importancia, como el tamaño adulto, crecimiento, área de ojo de bife, producción de grasa subcutánea”. Señaló que este último indicador “da un indicio de la facilidad de engorde de ese animal, algo que se busca mucho en Uruguay, que con poca alimentación se mantengan, sin tanto requerimiento”.

Explicó que el destete se realiza a los seis meses, porque “da valores más reales, entonces más certero será el dato de EPD; porque si sacamos la cría antes, el dato de la habilidad lechera no sería tan real”. Aseguró que “no suplementamos nada, y el peso al destete es lo que generó el ternero por su propio medio, en base a la alimentación que le dio la madre”.

Ingreso a la cabaña. A los tres meses son seleccionados los animales que van para la cabaña, donde tienen un manejo especial, se tatúa el RP y ahí se decide su futuro. “Es muy sutil la selección, se ve su sangre, de quién es hijo, pero la base es el fenotipo, porque es lo que se jura al final en las pistas”, sostuvo Zerbino.

Esos animales tienen un seguimiento especial a diario, “te tienen que llenar el ojo, deben ser buenos estructuralmente como punto principal”.

En cada primavera nacen alrededor de 300 terneros en el plantel de San José del Yaguarí. De allí se hace una preselección de 18 o 20 terneros, que se empiezan a racionar, para luego amansarlos y prepararlos para las exposiciones.

Las hembras siguen el mismo tratamiento, y se terminan de recriar en campos mejorados. Generalmente se inseminan a los 18 meses.

En la próxima edición de la Expo Rural del Prado la cabaña presentará 18 animales, serán seis Hereford y 12 Angus, algunos propios y otros en sociedad. En esta instancia la familia Zerbino espera conseguir su lauro número 19, ya que han obtenido 18 grandes campeones entre las dos razas en la principal pista del país, el primero en 1959.

“Lo mejor es el careta”. Zerbino destacó que las razas Angus y Hereford “son ideales para las condiciones de Uruguay, muy maternales, y los animales definidos se pagan más”. Pero opinó que los productores que realizan ciclo completo “tiene que aprovechar la cruza”, porque “se potencia lo bueno de las dos razas”. Enfatizó que “tenemos el resultado del choque entre las sangres, que es 10% mejor en crecimiento, habilidad materna, reproducción y todo eso es gratis, solo cruzando las razas. Es algo que está totalmente demostrado, lo mejor es el careta”.

La criadora concluyó que “vivimos en un país muy de Hereford y se empezó a incorporar el Angus. A mucha gente le gusta una raza o la otra, a mí me gustan las dos, porque son las razas para criar en Uruguay”.