• Cotizaciones
    martes 03 de septiembre de 2024

    ¡Hola !

    En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, tu plan tendrá un precio promocional:
    $ Al año*
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá
    * Podés cancelar el plan en el momento que lo desees

    ¡Hola !

    En Búsqueda y Galería nos estamos renovando. Para mejorar tu experiencia te pedimos que actualices tus datos. Una vez que completes los datos, por los próximos tres meses tu plan tendrá un precio promocional:
    $ por 3 meses*
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá
    * A partir del cuarto mes por al mes. Podés cancelar el plan en el momento que lo desees
    stopper description + stopper description

    Tu aporte contribuye a la Búsqueda de la verdad

    Suscribite ahora y obtené acceso ilimitado a los contenidos de Búsqueda y Galería.

    Suscribite a Búsqueda
    DESDE

    UYU

    299

    /mes*

    * Podés cancelar el plan en el momento que lo desees

    ¡Hola !

    El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
    En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] o contactarte por WhatsApp acá

    Ley de campo natural: no todo lo que brilla es oro

    El campo natural es uno de los mayores tesoros que tenemos en el Uruguay, debemos potenciar y fortalecer la producción que se da sobre este recurso. La conservación del campo natural se debe dar por conveniencia y no por una obligación legal.

    El proyecto de ley de conservación y preservación del campo natural, que actualmente se encuentra a estudio del Parlamento, no debe ser aprobado. Sería un error utilizar esa herramienta legal para intentar conseguir como fin la conservación y preservación del campo natural en el Uruguay.

    El campo natural ocupa aproximadamente un 55% de la superficie del territorio nacional, es claro que en los últimos 30 años ha disminuido el área, pasando parte a forestación y parte a rotaciones agrícola-ganaderas, básicamente.

    También es notorio que se ha frenado la disminución del área de campo natural en los últimos 10 años, encontrándonos actualmente en un equilibrio de uso del suelo. Se debe recordar que, de los 10 millones de hectáreas que hay de campo natural, una proporción importante siempre seguirá siendo campo natural, ya que en el basalto, sierras, zonas bajas y suelos superficiales no es posible la modificación a otro uso.

    Primeramente se puede argumentar que la declaración de interés general en el artículo 1 del proyecto de ley no parece adecuada, ya que implicaría un atropello al derecho a la propiedad privada de ser aprobada la ley. La declaración de interés general es errónea desde que hay colectivos importantes que tienen visiones contrarias a este concepto. El interés general habilitaría al Estado a actuar por encima del derecho a la propiedad privada.

    Por otra parte, al analizar la definición de campo natural que expresa el proyecto de ley se observa que es bastante abierta y poco específica. Esto desencadena que será un funcionario de turno quien dirima qué es un campo natural y qué no. Esto es bastante peligroso, porque puede llevar a discrecionalidad del Estado­, con todos los riesgos que esto conlleva.

    A su vez, el proyecto de ley prioriza la acción de la misma sobre la producción familiar. Si nos basamos en la definición de productor familiar que utiliza el Estado, vemos que es bastante cuestionable, y que ya ha generado inconvenientes e injusticias a la hora de generar políticas activas para esta categoría de productores.

    Se le encomienda al Estado, mediante el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y el Ministerio de Ambiente (MA) una cantidad importante de cometidos, incluyendo la creación de un Observatorio de Campo Natural. Por un lado, en esta materia ya existe la Mesa­ de Ganadería sobre Campo Natural (MGCN), que cumple muchas de las funciones delegadas a los ministerios. Por lo tanto, estaríamos ante una duplicación innecesaria y costosa. La MGCN ha funcionado muy bien hasta el presente, y esta ley la estaría relegando.

    Otra observación tiene que ver con la clasificación propuesta en tres categorías de campo natural: protectores, productores y generales, en función de la prioridad de conservación. En esta parte se vuelve a caer en el riesgo de la arbitrariedad del funcionario de turno. No queda definido cuáles son los criterios para determinar si un área se encuentra dentro de determinada categoría. Los funcionarios encargados de esta categorización pueden cometer errores, que conducirán a injusticias.

    La creación del Fondo del pastizal es otro punto débil. Uruguay es un país con déficit fiscal alto y estructural, con necesidades urgentes en la población, por lo que parece inadecuado destinar recursos para el cumplimiento de esta ley. Especialmente, destinar fondos a los productores que conserven el campo­ natural es una visión europea de conservación. No es la fórmula correcta de lograr una conservación sustentable. Finalmente, es un mecanismo que tiende a mantener producciones de baja rentabilidad y termina favoreciendo la concentración de la tierra.

    Para terminar, agrego que es muy importante promover y fortalecer la producción a campo natural. Es un recurso que nos distingue en el mundo y ofrece servicios ecosistémicos muy importantes, como el control de la erosión, el mantenimiento de biodiversidad, la captura y reserva de carbono, la calidad del agua, la preservación de ecosistemas que se integran en estos paisajes, entre otros.

    Pero para lograr estos cometidos el manejo debe cumplir con ciertas reglas para evitar la degradación del recurso. El mero hecho de tener un campo natural no significa que entregue beneficios al ambiente. Los campos naturales mal manejados son muy perjudiciales para el ambiente.

    Los caminos a recorrer para lograr una conservación y potenciación del campo natural son muy variados, pero pasan por la valorización de las cadenas de producción que implican su uso.

    Las certificaciones tienen un rol fundamental en este sentido, junto con la estrategia comercial que debe tener el país de forma proactiva y agresiva para lograr diferenciales en los mercados más exigentes. Se debe potenciar la investigación y extensión para lograr paquetes tecnológicos competitivos en el campo natural.

    Otro camino a seguir pasa por lo impositivo, la carga de impuestos sobre la tierra es relativamente más pesada sobre los sistemas de producción más extensivos.

    Está claro que para llevar adelante estas acciones no es necesario una ley, que implica regulaciones, burocracia y arbitrariedades.

    * El autor es productor agropecuario y asesor, ingeniero agrónomo (MAA), director de INIA y vicepresidente de la Federación Rural.