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En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáLeyendo la carta de Alicia me vinieron muchas reflexiones: 1) ¿por qué se reconoce a las personas cuando no están?; 2) ¿por qué el 74% dice que no le importa la política cuando le afecta en todas sus decisiones diarias?; 3) ¿por qué las encuestadoras no toman en su análisis las internas, donde la coalición superó al Frente Amplio (FA), y siguen insistiendo con el relato?
Los grandes presidentes se ven cuando les toca gobernar en reales dificultades. Batlle: aftosa, corrida bancaria derivada de Argentina. Lacalle Pou: Covid, alta inflación y endeudamiento, baja del desempleo y baja en el crecimiento.
Soluciones: Batlle honró la deuda, bajó el gasto y dejó un país en crecimiento y con financiamiento, un país confiable (la oposición de aquel momento reclamaba el default, con la irresponsabilidad de ir a Washington, al FMI, que también le reclamaba a Uruguay el default; llegaron a sacarse una foto en las rejas de la Casa Blanca porque Bush no los recibió); Lacalle Pou, libertad responsable, urgentemente compró material médico para afrontar la pandemia porque lo muy poco que había se lo regalaron a China, “al Uruguay no llega”, rearmó CTI porque en 15 años no hicieron ninguno (resumiendo, no encerró a la población y mantuvo la economía en ralentí sin parar la máquina; la oposición reclamaba cacerolada mediante el encierro compulsivo y las vacunas rusas). Es muy resumido lo ocurrido.
El ser humano es el único animal que puede tropezar dos veces con la misma piedra. Por todo esto y mucho más es posible que el FA pueda ganar las próximas elecciones, más cuando este gobierno no hizo como el FA al entrar, que sacó a todos aquellos que podían hacer daño en los cargos públicos y con la pauta compró voluntades de opinión. Se instaló el relato que ser de izquierda es estar del lado de los pobres, de los trabajadores, ser solidario con la ajena y, la más indignante, “ser progresistas“.
Como dice el refrán: dime de lo que alardeas y mostrarás de lo que careces.
Ser de derecha es ser conservador, oligarca, si sos empresario, lo sos, los productores rurales son latifundistas oligarcas. Digo, cuando no tenés argumentos, es más fácil encasillar a las personas. Ya ocurrió en los años 60.
La historia demuestra que no importan la derecha o la izquierda. Los países y la vida misma se maneja bien o mal.
Eso sí, en general la izquierda demostró en el mundo y en nuestro país que gobiernan mal. Por esto y mucho más sé a quién no debo votar en las próximas elecciones.
Jorge Noya