El posicionamiento de Uruguay como hub logístico depende de la facilitación de actividades de soporte, como los servicios de tránsito y distribución de bienes con origen y destino en el exterior del país.
“Mejorar la articulación” entre las empresas e incrementar la “inteligencia comercial” de la cadena logística que utilizan los países vecinos son algunas líneas de acción planteadas por el organismo
El posicionamiento de Uruguay como hub logístico depende de la facilitación de actividades de soporte, como los servicios de tránsito y distribución de bienes con origen y destino en el exterior del país.
Accedé a una selección de artículos gratuitos, alertas de noticias y boletines exclusivos de Búsqueda y Galería.
El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáEntre 2020 y 2023 el país logró aumentar significativamente la carga captada desde el mundo con destino al Mercosur, que en el sentido contrario: los tránsitos provenientes de la extra-región (que circularon por territorio aduanero uruguayo) hacia el bloque fueron 10 veces más que los originados en Argentina, Brasil o Paraguay. En valores, los primeros totalizaron casi US$ 10.000 millones en el período analizado y crecieron 81% entre esos años. En tanto, los tránsitos desde el Mercosur hacia el exterior fueron por poco más de US$ 1.000 millones y aumentaron prácticamente en la misma proporción (86%).
Esas cifras surgen de un estudio reciente realizado por el Instituto Nacional de Logística (Inalog), que no considera los trasbordos y reembarcos de mercaderías en los puertos y aeropuertos, sino los denominados “tránsitos CDR” (por Centro de Distribución Regional) que generan un Documento Único Aduanero de Tránsito (DUA-T) para los bienes que atraviesan el territorio provenientes del mundo hacia la región y viceversa.
Para disminuir ese “desbalance” e incrementar el flujo de bienes en tránsito de los países vecinos hacia el mundo resulta “clave” aplicar “mayor inteligencia comercial” de la cadena logística de los mercados aledaños, dijo a Búsqueda el presidente del Inalog, Álvaro Olazábal.
Además, consideró relevante que el sector logístico uruguayo se posicione en los mercados siguiendo una estrategia de clúster. En ese sentido, “todavía hay un camino a recorrer para entender los beneficios de presentarse en los mercados con objetivos comunes, sin dejar de competir” entre sí, alegó el jerarca. “A veces no es tan fácil amalgamar a todos los asociados” por parte de las gremiales del sector, apuntó. Agregó: “Es preciso mejorar la articulación y, como instituto, hay que plantearlo; no pierdo la esperanza” de que ello suceda.
Explicó que esas líneas de acción surgen a partir de las respuestas que el instituto obtuvo frente a consultas al sector privado, que es el que hace los negocios. Olazábal agregó que, del diálogo con el empresariado, surgieron algunos factores locales que pueden estar incidiendo y explicando el desequilibrio de los tránsitos desde y hacia el Mercosur.
Olazábal reconoció que, si bien se han llevado a cabo acciones para promocionar la logística a través de visitas oficiales y eventos, como seminarios y webinars con la participación de autoridades y actores privados de los países vecinos y de Uruguay, se necesita incrementar la “sinergia” entre las empresas del rubro.
Desbalance
Para Olazábal, a pesar del desbalance que exponen las cifras en el período analizado, el tránsito de bienes externos “es una de las actividades logísticas relevantes del país que lo caracterizan como centro de distribución regional”.
Consideró “clave” para atraer carga de los mercados más próximos, como el argentino, pero sobre todo de Rio Grande do Sul, analizar más el esquema comercial y la logística que utiliza la exportación e importación de las empresas en ese estado brasileño. Para eso, es preciso mayor estudio de “inteligencia comercial logística”, apuntó.
Aunque dijo que el factor de “costos” y competitividad también puede estar incidiendo, no lo consideró “determinante” porque si el “costo Uruguay sirve para entrar a la región, por qué no serviría para salir de Uruguay al mundo”. Olazábal afirmó que el país es muy utilizado como plaza logística por sus fortalezas relacionadas a la “seguridad, previsibilidad, trazabilidad, regímenes promocionales”, entre otras, y apuntó que algunos exportadores de la región prefieren que las tareas logísticas de almacenaje, fragmentación y embalaje se realicen más cerca de los destinos de consumo. Ello, argumentó, puede ser una explicación de atraer menos mercadería de los países vecinos.
El análisis del Inalog consideró los principales ocho países de origen de los tránsitos de bienes externos hacia el Mercosur para 2020-2023: China, Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia, España y Suiza. En conjunto, representaron US$ 7.152 millones de mercadería (US$ 1.788 millones al año, en promedio) y su mayor destino fue Paraguay, seguido por Argentina y Brasil.
Los principales tres productos en tránsito fueron —en valores— los medicamentos, aparatos eléctricos de telefonía (celulares) y los sueros, vacunas y sangre humana. Si se consideran las toneladas brutas, el mix de bienes cambia y los tres rubros con mayor tránsito fueron chapas y tiras de aluminio, abonos minerales o químicos (fertilizantes) y juguetes.
Pero también circulan en tránsito perfumes y aguas de tocador, productos de informática, partes y accesorios para vehículos, televisores, bombas para líquidos, motocicletas, etcétera.
La plataforma más utilizada para los tránsitos en el período analizado fueron los pasos de frontera. Más de siete de cada 10 tránsitos que terminaron egresando por tierra provinieron del puerto, casi dos de cada 10 de zonas francas y el resto de depósitos aduaneros y aeropuerto.
En tanto, en el sentido opuesto, con origen Mercosur y destino exterior, las mercaderías en tránsito por territorio nacional fueron por US$ 1.032 millones, y en el 87% provinieron desde Argentina, 8% de Paraguay y 5% de Brasil.
En este caso, también los medicamentos fueron los bienes que, en mayor medida —considerando el valor—, transitaron el territorio aduanero nacional y, en términos de toneladas brutas, los polímeros de propileno (plásticos) prevalecieron.
Además de esas mercaderías también pasaron en tránsito productos como papel y cartón, hilos, cables y conductores, bebidas alcohólicas, accesorios de tocador, arroz, carne bovina fresca o refrigerada y aceite de jojoba.