La administración de Carolina Cosse en la Intendencia de Montevideo (IM) envió en mayo de 2023 un proyecto a la Junta Departamental para remodelar y revitalizar la manzana del antiguo Club Neptuno, cerrado desde 2019. La propuesta, que incluía enajenar una parte del predio municipal para hacer un espacio público y dar otra parte a privados, fue criticada por distintas agrupaciones de vecinos y finalmente quedó frenada. Más de dos años después, el emblemático edificio permanece abandonado e incluso ocupado por personas en situación de calle.
Las perspectivas de que la comuna impulse un nuevo proyecto para recuperar el inmueble parecen lejanas. Así lo reflejaron autoridades del Departamento de Planificación de la IM, al comparecer el pasado 1 de diciembre ante la Comisión de Planeamiento Urbano, Vivienda, Obras y Servicios de la Junta Departamental.
Según consta en la versión taquigráfica del encuentro solicitado por el edil colorado Federico Paganini, el equipo encabezado por la directora de Planificación, María José Iglesias, se presentó para aportar información sobre dos temas: el estado de situación de lo que fuera el Club Neptuno y las iniciativas previstas de cara al proyecto Lasplaces, ubicado en el predio de la antigua Facultad de Veterinaria.
Paganini se refirió al proyecto anunciado por la anterior administración para el Club Neptuno, el cual proponía demoler el 80% del club y refaccionar el 20% restante, para pasarlo a manos del Instituto Superior de Educación Física de la Universidad de la República (Udelar). “Se necesitaría la anuencia de la Junta en el caso de aprobarse este proyecto”, porque incluía “una torre de 45 pisos”, señaló el curul. Recordó que tiempo atrás se conformó una mesa de diálogo entre colectivos, autoridades y ediles del Frente Amplio, que “dejó afuera a la oposición”.
El edil nacionalista Nicolás Hernández solicitó en la sesión conocer si existe hoy alguna iniciativa privada respecto al otrora Club Neptuno y cuál es la situación actual respecto a la explotación del predio, si se prevé hacer un llamado a ideas internacionales o locales, o impulsar una licitación de uso.
Iglesias recordó que el proyecto remitido a la Junta Departamental durante la administración pasada para revitalización integral de la manzana del antiguo Club Neptuno se enmarcaba en un proyecto urbano denominado Atarazana, Puerto y Escollera. La idea, comentó, era solicitar a la Junta la aprobación del fraccionamiento del predio en cuatro lotes a enajenar y sustituir el edificio por instalaciones más compactas, una propuesta que incluso fue presentada públicamente por el Municipio B.
Así, entre junio de 2023 y junio de 2024 comenzaron a funcionar mesas de diálogo con diferentes organizaciones, que fueron remitidas en un expediente enviado por la Junta a la IM para su estudio. Sin embargo, la directora reconoció que “actualmente no hay ningún proyecto presentado ni hay ninguna iniciativa” en marcha, y que “no ha habido actuaciones recientes al respecto”.
“Estuvimos aquí hace un mes contándoles las ideas que tenía Planificación para este quinquenio. Entre ellas, estaba la de retomar la revisión del Plan de Ciudad Vieja. Nos encontramos iniciando ese proceso, que va a generar una serie de instancias de estudio técnico y de participación ciudadana”, señaló. Y agregó: “Entendemos que de este proceso podrían surgir propuestas o algún lineamiento para el área del ex Club Neptuno (...). Por tanto, será uno de los insumos que deberemos tener en cuenta a la hora de avanzar con la revisión del Plan Especial de Ciudad Vieja”.
Respecto a por qué la administración decidió desestimar el avance del proyecto manejado en la anterior gestión, Iglesias dijo que la IM “está retomando el estudio de la Ciudad Vieja en su integralidad” y que el predio se ubica en un sector interesantísimo desde el punto de vista urbanístico, que va a ser parte de esa revisión.
Proyecto a ver “en un contexto mayor”
La gerenta de Planificación Territorial de la IM, Natalia Brener, aseguró que “no hay desestimación” del proyecto presentado durante la administración pasada. Explicó que el Plan Especial de Ciudad Vieja en el que trabajan tiene una serie de lineamientos y proyectos estratégicos en los que “el Neptuno va a estar incluido”.
“Este proceso va a tener luego distintas etapas previstas en la Ley de Ordenamiento Territorial. Y sobre el primer semestre del 2026 vamos a trabajar fuertemente en instancias de participación, a las que ustedes van a estar invitados y en las que participarán vecinos e inversores”, comentó.
Por último, Marcelo Bednarik, a cargo de la Unidad de Proyectos Urbanos Territoriales de la IM, afirmó que Neptuno está fuertemente vinculado con el anterior hotel Nacional y los predios libres del puerto. En ese sentido, dijo que parte de la propuesta que había sido enviada destinaba un sector del predio a solucionar el tema de estacionamientos del antiguo hotel, por lo que cualquier intervención que se le haga “funciona y es viable” si puede resolver ese problema.
“Al proyecto Neptuno hay que verlo en su globalidad (...) porque puede dar solución a varios aspectos: cuestiones vinculadas con la comunidad que vive ahí, con el área social y el deporte. A su vez, puede ser una buena área de reserva, tanto para espacio público como para solucionar los problemas de estacionamiento que puede generar la recuperación de edificios históricos”, señaló Bednari. Eso, a entender del arquitecto, refuerza la idea de que el proyecto “no se ha desestimado, sino que son piezas urbanas que hay que verlas en un contexto mayor”.
A fines de noviembre, representantes de la lista 22 del Partido Nacional enviaron una carta al intendente de Montevideo, Mario Bergara, con el objetivo de definir y reactivar el futuro del Club Neptuno y del antiguo parador Kibón, al argumentar que “se está desaprovechando” el potencial de ambos lugares.
En relación con Neptuno, señalaron que el club permanece sin obras de envergadura y con instalaciones en un estado de deterioro considerable, como “vidrios rotos, grietas, instalaciones obsoletas y daños estructurales”, y que a pesar de haber existido anuncios y presentaciones preliminares para su recuperación, el lugar continúa sin una definición concreta.
En ese sentido, opinaron que la intendencia debería promover un llamado “competitivo, transparente y de alcance nacional e internacional”, con el objetivo de desarrollar el mayor caudal posible de ideas y alternativas para su recuperación.
Lasplaces
Iglesias se refirió también al proyecto Lasplaces, que fue desestimado por la administración de Bergara y referentes de la Udelar en octubre. La propuesta implicaba la construcción de 1.400 viviendas, 900 metros cuadrados de área comercial, equipamiento educativo y un nuevo parque público, con la preservación de los edificios patrimoniales del antiguo campus de lo que fuera el centro de estudio.
Al respecto, señaló que tras remitir el proyecto a la Junta Departamental en julio de 2024 y luego de que la Comisión de Planeamiento Urbano enviara las actuaciones a la IM, autoridades de la comuna se reunieron el pasado agosto con el rector de la Udelar, Héctor Cancela, quien planteó que el proyecto “quedaba detenido y que no había interés en continuar”.
“Nos planteó que la institución quiere dar una discusión profunda sobre el destino del sitio y que, por tanto, no está en condiciones de dar respuesta a las observaciones, ni tiene la intención de seguir adelante con el proyecto. Ahí entendemos que se detiene la solicitud y se archiva el expediente”, describió la directora.
“Hoy no tenemos ningún proyecto en vista, no hay en este momento un proyecto en el que se esté avanzando”, cerró Iglesias.