“Es de noche en el casi invierno europeo. Son las 7:55 de la mañana en Madrid y un grupo de jóvenes pasa raudo entre las somnolientas escaleras del enorme predio de la Feria de Madrid, en donde se realiza la cumbre Conferencia de las Partes Número 25 sobre Cambio Climático. Son los jóvenes activistas climáticos que van por su primera reunión el día. Es la segunda semana de las dos de negociaciones entre países para bajar las emisiones contaminantes de la atmósfera. Desde la irrupción de Greta Thunberg, hace exactamente un año en la COP24 de Katowice (Polonia), el movimiento juvenil se ha tornado mundial e inyecta vitalidad a un proceso que por momentos parece avanzar como el cangrejo. La llegada a Madrid de Greta –el hecho de que se pueda prescindir del apellido ya habla de su universalidad– fue caótica: su figura desbordó las previsiones y las avalanchas de periodistas se suceden cada vez que aparece o se anuncia su presencia. Y tuvo que ser retirada por razones de seguridad de la marcha del viernes pasado, en la que hubo un número de personas a determinar entre las 15.000 que calculó la policía y las 500.000 de la organización. En bambalinas, es el show de la selfie”, contó desde Madrid el periodista Martín de Ambrosio, integrante del Programa Latinoamericano de Cobertura Periodística COP25, una inciativa de LatinClima, Periodistas por el Planeta, The Stanley Center for Peace and Security y la Red Regional de Cambio Climático y Toma de Decisiones de Unesco.
Por esos pasillos, encima de varios estrados y delante de unos cuantos micrófonos transita Gonzalo Muñoz. El chileno es fundador de la empresa Tricilos, una compañía de reciclaje que ya cruzó la cordillera de los Andes y que también se convirtió en la primera Empresa B de América Latina (que toma en cuenta aspectos medioambientales como un eje clave en su trabajo). Ahora Muñoz tiene un cargo de Naciones Unidas, y está metido de lleno en la COP25, como “high level champion”.
El cargo se creó con el objetivo de apoyar en la gestión de la principal plataforma que reúne a actores no estatales en el mundo en temas de cambio climático, llamada Marrakech Partnership. Esta plataforma tiene nueve áreas temáticas y hay un ámbito de apoyo a la gestión del trabajo que hacen en ellas. Otra tarea es asesorar a la presidencia de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC), este año presidido por la ministra de Medio Ambiente de Chile, Carolina Schmidt.
El objetivo de esta presidencia de la COP es incrementar “la ambición climática en todo el mundo”, comentó a Búsqueda Muñoz. Este camino tiene un mojón importante en setiembre de 2019, cuando se selló la Alianza de Ambición Climáticay para Muñoz ha sido un hito. “Logramos que tanto naciones como ciudades y regiones dentro de algunos países, empresas e inversionistas, que todos ellos se comprometieran a la carbononeutralidad al 2050. Esta lista, que llamamos Alianza de Ambición Climática, es uno de los grandes ámbitos de gestión” en el mandato del High Level Champion, explicó Muñoz. Además, la alianza es solo el comienzo, porque ahora Muñoz trabaja para sumar nuevos integrantes a la llamada “ambición climática” a través de “compromisos concretos con la carbononeutralidad al 2050”, y con la meta de no superar los 1,5 grados de aumento de temperatura pautado en el Acuerdo de París sobre cambio climático de 2015.
Es que otra parte del trabajo de Muñoz es lograr “movilizar acción climática” entre actores no estatales, explicó. Su rol es “ayudar a impulsar la acción climática en todas las empresas en el mundo, en todos los municipios y a través de ONG. Esto es bastante inabarcable, uno tiene que ir conectando en dónde están aquellas instancias que pueden provocar algún tipo de compromiso y acción de alto nivel en casa momento”, contó Muñoz tras su paso por Montevideo. El chileno estuvo en Uruguay días previos al comienzo de la COP (que empezó el 2 de diciembre y finalizará este viernes 13) invitado por Sistema B Uruguay, instancia en la que disertó sobre la importancia de contar con un compromiso de todos los sectores de la sociedad en temas ambientales y climáticos.
Acción climática
En 2014 la Plataforma de Nazca fue uno de los primeros pasos para integrar a la sociedad toda en los compromisos climáticos. Hay 22.000 acciones que se describen en esta plataforma en 2019 y hubo con aumento de la participación de los países en desarrollo, informó Muñoz este miércoles 11 en Madrid durante su disertación en la COP25. Además, casi 10.000 ciudades se han involucrado y en la acción climática se han sumado más de 6.000 empresas que representan al PBI de Estados Unidos y China combinados.
Este interés de la CMNUCC por incluir dentro de su trabajo a las empresas, gobiernos locales y a la sociedad civil es relativamente reciente, ya que hasta principios de siglo la participación de ellos había quedado relegada sobre todo a eventos y acciones paralelas a las de las COP.
El mandato del high level champion comienza con el Acuerdo de París en 2015. De hecho, el acuerdo en uno de sus artículos propone la creación de una agenda global de acción climática. Es el inicio de Alianza Global por la Acción Climática (más conocida en inglés como Global Climate Action).
En setiembre de 2019, en Nueva York, en una reunión convocada por Naciones Unidas, hubo 66 países, 102 ciudades, 93 empresas con un valor de mercado de billones e inversores que se sumaron a la Alianza de Acción Climática y solo en tres meses aumentó la participación. Por ejemplo, ya hay 73 países, 298 ciudades y 786 empresas. Equivale a las emisiones globales de Francia, informó Muñoz en la COP25.
Este miércoles, en Madrid, la Alianza de Acción Climática lanzó su mensaje en la COP25, un momento esperado por muchos. Schmidt presentó la renovada alianza de países y actores no estatales sobre cambio climático que contiene la intención de empujar la acción para lograr la carbononeutralidad en las emisiones para 2050.
“Esto demuestra claramente que ambos actores estatales y no estatales reconocen la urgente necesidad de tomar una acción climática ambiciosa para atender la emergencia del cambio climático”, dijo Schmidt.
“Sectores enteros están demostrando que pueden comprometerse con este objetivo”, destacó Muñoz ayer miércoles en Madrid. Además, el compromiso de carbononeutralidad comenzó siendo de una treintena de Empresas B y ahora ya son más de 500, incluidas algunas en Uruguay.
“Cuando me nombraron me propuse ayudar a bajar esta temática que normalmente se ha entendido como una temática que se discute a 30.000 pies de altura entre los grandes líderes del mundo, entre las grandes potencias, y aterrizando al ciudadano, a la pyme y a los territorios más aislados. Esperamos en la COP25 romper esa barrera de exclusión y mostrar que no hay excusa para nadie en prestarse a una agenda tan urgente”, destacó Muñoz.
“Es efectivamente una agenda muy reciente. Solo ha habido en la historia cinco high level champions, es el quinto año este, y es justamente ahora que se pasa a revisar el mandato, el aprendizaje y lo que se obtuvo hasta 2020” y además llegó el momento de “permitir la construcción de una nueva agenda de acción climática perfeccionada y potenciada”, destacó Muñoz a Búsqueda. Es precisamente esta agenda “potenciada” por la que está abogando Muñoz estos días en la COP25 en Madrid. La idea ahora es fortalecer lo que ha dado resultado.
Mayor compromiso
A fines de noviembre, a pocos días al comienzo de la COP, el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) lanzó el reporte sobre Brecha de Emisiones, en el que advierte que los países deben quintuplicar sus esfuerzos para reducir las emisiones y poder y alcanzar el objetivo de 1,5 ºC, tal como se lo propone el Acuerdo de París.
Inger Andersen, directora ejecutiva del Pnuma, señaló que “los países simplemente no pueden esperar hasta finales de 2020, cuando se cumplan los nuevos compromisos climáticos, para intensificar la acción. Ellos, y cada ciudad, región, negocio e individuo, necesitan actuar ahora”.
Este es el gran momento del año para hacer estos reclamos, en medio de una COP en la que aún se juega el partido (que termina este viernes 13). Por eso entre los representantes de Naciones Unidas prima el mensaje de urgencia. De la COP25, Muñoz espera “que quede cada vez más claro que ya no tenemos tiempo para seguir discutiendo, seguir negociando, seguir evaluando. Hoy es tiempo de acción inmediata urgente” que se justifica por las “distintas señales desde el comportamiento del clima hasta los ecosistemas”.
Es el momento de que los países actualicen sus compromisos (sus Contribuciones Nacionalmente Determinadas, NDC) y “toca que cada una de las regiones y ciudades de cada país avance en forma acelerada hacia las acciones climáticas”, dijo Muñoz. Esto también implica que los mercados se comporten de tal manera que “faciliten la acción climática”. En el caso de Uruguay, pertenece al grupo de países que ya han actualizado sus NDC con respecto a la versión original y esperan que los países que aún no lo han hecho aporten nuevas metas. “Creo que estamos llegando a ese punto en que todos los ingredientes muestran que es momento de actuar y espero que entre la COP25 y la COP26 se produzcan los cambios que estamos necesitando de manera urgente”, agregó Muñoz. Chile mantendrá la presidencia durante todo el próximo año hasta el siguiente encuentro en 2020 en la COP26, que se hará en Glasgow, Irlanda.
“Nuestro compromiso es mantener este relato y esta tensión de forma permanente para que el año 2020 sea efectivamente el año en donde se generen los grandes cambios”, consideró Muñoz.
En este próximo año uno de los principales contribuyentes de Gases de Efecto Invernadero (Estados Unidos) será foco de atención a la espera de resultados electorales. Es que el presidente Donald Trump anunció que inició el proceso para salir del Acuerdo de París, algo que podría hacerse efectivo si él o su partido (Republicano) se mantienen en el poder el próximo 5 de noviembre, fecha en que se haría efectiva la carta de Estados Unidos para salir del acuerdo. Si en las elecciones en 2020 sale triunfante el Partido Demócrata, se espera que Estados Unidos se mantenga en el Acuerdo de París.
“Independientemente de eso, lo interesante es ver cómo los actores no estatales en Estados Unidos han tomado un rol protagónico y han logrado posicionarse en materia de acción climática. Tenemos una cantidad importante de municipios, ciudades y empresas, es muy valioso”, destacó Muñoz.
Edición 2050
2019-12-12T00:00:00
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