Cabildantes condicionan reforma previsional a que se vote prisión domiciliaria para mayores de 65

En las últimas semanas, las negociaciones sobre la reforma jubilatoria trascendieron el ámbito del Palacio Legislativo e involucraron a varios ministros y al propio presidente. Para Lacalle Pou, es prioritaria su aprobación, aunque aceptó que la comisión de Diputados que trata el proyecto tome más tiempo, dijo una de las fuentes. Eso marca un cambio respecto a la actitud que habían tomado el miércoles 29 los legisladores blancos de esa comisión, que quedaron en minoría —ante los cabildantes, el Frente Amplio y César Vega, del PERI— cuando se votó extender el trabajo del grupo legislativo hasta fin de abril. El plazo vencía el viernes 31. De todos modos, las negociaciones seguirán esta semana buscando llegar a un acuerdo sin necesidad de dilatar el trámite en ese ámbito.

“Estamos en las últimas horas para dilucidar finalmente qué es lo que se va a terminar votando o no votando”, reflexionó ayer en Radio Oriental el líder cabildante, el senador Guido Manini Ríos. Cuestionó la “cierta intransigencia de quienes han propuesto el proyecto” para atender el reclamo de su partido de quitar el artículo que permite a las AFAP invertir parte de los ahorros jubilatorios en acciones de empresas en el exterior.

“¿Cuál es la urgencia de aprobarlo ahora, antes del viernes, y no de repente en un mes más, o dentro de seis meses o en el año 2025 después de que pase el proceso electoral?”, preguntó Manini Ríos. Afirmó que, aunque no lo dicen, “muchísimos referentes y legisladores de partidos de la coalición están deseando” que CA no vote la reforma porque le daría al Frente Amplio una “bandera redituable electoralmente”.