Con las PPP se paga “cuatro veces más” que con las obras tradicionales, dice asesor del MTOP

REDACCIÓN  

A mediados del siglo XX, los gobiernos apelaban a los vecinos para financiar las obras de carreteras. Para construir la Ruta 40, se emitió un bono que fue comprado por la gente. Para hacer la Ruta 59, el Ministerio de Obras Públicas acordó entregar una motoniveladora si los pobladores de su entorno se encargaban de los costos operativos. De forma más reciente, comenzó a otorgar concesiones y aparecieron los peajes como forma de financiamiento, hasta llegar al modelo de participación público-privada (PPP), aplicado por el Frente Amplio, y a los Contratos de Diseño, Construcción, Rehabilitación, Mantenimiento y Financiamiento (Cremaf) de la infraestructura vial, en la actual administración de la coalición multicolor.

Esta nota es exclusiva para suscriptores de BÚSQUEDA y GALERÍA
Elegí tu plan y suscribite

Suscribite

¿Ya sos suscriptor? Iniciá sesión

Probá nuestro servicio, registrate y accedé a una nota gratuita por semana.