El gobierno sigue confiado en la reactivación pese al déficit hídrico y más casos de Covid

REDACCIÓN  
5 minutos Comentar

Pese a un panorama sanitario más complejo —con una “segunda ola” de contagios de Covid-19 en varios países y el aumento de los casos en Uruguay—, además de un déficit hídrico que afecta al campo, las autoridades de gobierno mantienen su confianza en la reactivación de la economía.

El monitoreo es continuo, tanto de la situación externa como de la interna, en torno al coronavirus y su impacto económico. Pero, con alta incertidumbre sobre la evolución de estos fenómenos, el equipo encabezado por la ministra Azucena Arbeleche tiene decidido no difundir ajustes en sus proyecciones hasta febrero.

“Tenemos en el mundo una segunda ola de pandemia y tenemos más casos en Uruguay recientemente. Ahora, desde el punto de vista de los indicadores y del seguimiento que hacemos, hasta la fecha no hay un deterioro (…). Por el contrario”, dijo el miércoles 18 la ministra de Economía al participar en un foro sobre inversiones europeas organizado por la Cámara de Comercio y Servicios del Uruguay, la Eurocámara y la Delegación de la Unión Europea en Montevideo. Como otras veces, aludió a la evolución de la recaudación de impuestos, a la venta de combustibles y al consumo de energía, así como a una “leve mejora” del mercado laboral en setiembre. “Todo nos muestra que hay una recuperación, leve pero sigue”, subrayó. “Hasta el momento los indicadores son alentadores y no observamos un deterioro”, insistió.

Según el recuento de avisos donde piden personal, hecho por la consultora Advice, publicado el miércoles 18, en octubre la demanda repuntó 10% frente al mes previo, aunque se ubicó 20% por debajo del nivel de un año atrás.

Arbeleche ratificó la previsión de una caída de 3,5% del Producto Bruto Interno (PBI) para este año, que según ella “está en línea” con lo que estiman los analistas.

Sin embargo, la expectativa de los bancos, AFAP, consultores e institutos de investigación que encuesta el Banco Central —informada el miércoles 18— es de una contracción de 4,28% en 2020; el mes anterior la mediana de las respuestas indicaba una proyección ligeramente mejor (–4,20%).

“Marcha atrás”.

Aunque en los últimos días creció el número de casos nuevos, el porcentaje estuvo por debajo de 2%, lo que las autoridades sanitarias interpretan como un dato positivo. Está previsto que la cantidad de test se vaya incrementando en procura de intensificar la detección de contagios.

Arbeleche señaló que el aumento del número de casos no deja “lugar a la complacencia” en las medidas de prevención. “Si no, vamos a ir marcha atrás en la situación sanitaria, pero también en lo económico” y en particular en el empleo, advirtió.

En cuanto a la situación sanitaria, “ya no es aquella situación de confort” que hubo antes, reconoció Isaac Alfie, director de la Oficina de Planeamiento y coordinador del grupo científico asesor del gobierno, al intervenir, el jueves 12, en un foro regional.

Ante el incremento de los casos de Covid-19 “por ahora no se han tomado medidas —diría— para atrás, pero es una posibilidad, como está sucediendo en otros países, y eso, por supuesto, puede tener un impacto negativo en la economía”, advirtió el martes 17 Gabriela Mordecki, del Instituto de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, convocada a instancias del Frente Amplio a la comisión del Senado que tiene en estudio el proyecto de Presupuesto. Su pronóstico es que “a mediados del año que viene la economía va a empezar a funcionar normalmente”, pero después de una caída del PBI de 4,7% en 2020.

Seca.

Otro foco de preocupación para el gobierno es el déficit hídrico y su creciente impacto en la producción agropecuaria. La escasez de precipitaciones se está haciendo notoria en algunas zonas, justo en la fase de siembra de los cultivos de verano.

Aunque el precio de algunos granos en los mercados internacionales —en particular de la soja— alcanzó niveles atractivos, el problema climático opera como un desestímulo para los agricultores al momento de tomar la decisión de cuánto plantar. De hecho, en varias zonas del litoral norte los agricultores decidieron interrumpir la siembra. Empresarios consultados por Búsqueda dijeron que el déficit hídrico se manifiesta también en otras regiones, aunque allí se pudo continuar plantando.

La falta de agua también está afectando a la ganadería, aunque de manera disímil por regiones.

Hablando en el mismo foro que Arbeleche, el ministro de Ambiente, Daniel Peña, vislumbró un escenario “seguramente de sequía”.

En este contexto, “es muy probable que la semana próxima el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) convoque al comité de emergencia” para evaluar la situación de déficit hídrico, informó a Búsqueda el titular de dicha secretaría de Estado, Carlos María Uriarte. Y agregó que, por el momento, el MGAP “sigue monitoreando” el estado de las zonas productivas más afectadas por la falta de lluvias en los meses recientes.

Portada
2020-11-19T00:58:00