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El oficialismo teme perder la mayoría en el Tribunal de Cuentas y dilata designación del presidente
El tema está en un limbo: el primer suplente, perteneciente al Partido Nacional, dijo que no sabe si asumirá el cargo por motivos de salud, pero tampoco informó que lo rechazará
Es necesaria una mayoría especial para cambiar la integración del tribunal. Foto: Javier Calvelo, adhocFOTOS
La integración del Tribunal de Cuentas ha sido un tema complejo en este período de gobierno. En los más de tres años de Legislatura, el Parlamento no ha podido acordar su renovación, para lo que requiere mayorías especiales. Para complicar más el panorama, quien ejercía su presidencia, Susana Díaz, perdió el respaldo del Frente Amplio el año pasado, luego de que se negara a observar la extensión del contrato de la terminal de contenedores a Terminal Cuenca del Plata en una polémica sesión. La situación en el órgano de contralor del gasto público terminó de agravarse el 5 de julio, cuando la jerarca comentó en la sesión de ministros que había renunciado a su cargo. Desde entonces el puesto está vacante.
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Díaz había asumido en 2017 en sustitución del abogado Siegbert Rippe, quien renunció al cargo y falleció un año después. El jurista había sido nombrado como neutral en el organismo en 2010, en un impulso de la administración del entonces presidente José Mujica por encontrar una fórmula para los organismos de contralor que permitiera destrabar las negociaciones y renovar su integración, algo que no había podido lograr su antecesor Tabaré Vázquez.
Cuando Díaz tomó el cargo en 2017 lo hizo como neutral; se trataba de una funcionaria de carrera del Ministerio de Economía y Finanzas, que había sido ascendida a directora general por el entonces ministro Danilo Astori en 2015, pero era conocida en todo el sistema político por su trabajo en leyes presupuestales, recogió un artículo de El Observador de marzo de este año. Esa nota también informaba que su labor no solo se había ganado el rechazo de la oposición, sino también críticas del Partido Nacional, luego de que la jerarca votara, junto con los ministros del Frente Amplio, observar la compra de tres escáneres para la Dirección Nacional de Aduanas.
La sustitución de Díaz trae consigo un problema no menor para el sistema político: sus suplentes no son neutrales y quien asuma el organismo le dará la mayoría a uno u otro bloque. El primer suplente de Díaz, el contador Línder Reyes, es exfuncionario de la Intendencia de San José y de confianza del Partido Nacional, mientras que quien le sigue en la lista de prelación es Mariana Gulla, abogada de la Universidad de la República y puesta en la nómina de suplentes a pedido del Frente Amplio.
Si bien la notificación a Reyes para que asumiera en el cargo se dio pocos días después de la renuncia de Díaz, el exfuncionario municipal recién el martes 1° de agosto en la noche acusó recibo de la citación para presidir el Tribunal de Cuentas. La ausencia de respuesta había motivado que el 20 de julio se le enviara una resolución del organismo convocándolo a asumir la presidencia. La indefinición en la suplencia de la presidencia ha causado sorpresa en los ministros designados por el Frente Amplio, que entienden que ya ha pasado una considerable cantidad de días sin respuesta, según las fuentes de Búsqueda.
Gulla fue contactada una sola vez, a comienzos de julio y solo para comunicarle la renuncia de Díaz y la decisión de convocar a Reyes, el primer suplente, dijeron informantes del Tribunal de Cuentas.
En el oficialismo consideran que es una situación delicada. Reyes tiene 77 años y padece algunos problemas de salud. Al ser consultado por Búsqueda, dijo que todavía no tiene decidido ni ha comunicado si aceptará o no el nuevo cargo, dado que no le sería fácil ejercerlo.
En la bancada nacionalista del Senado dan por hecho que el contador no está en condiciones de asumir, por lo que asumen que la mayoría del tribunal quedará en manos del Frente Amplio. “Ahora que el Frente Amplio va a tener mayorías, menos interés van a tener en renovar la integración del organismo”, dijo un senador nacionalista a Búsqueda. En la bancada frenteamplista aseguran que no han recibido últimamente ninguna solicitud de negociar la integración del organismo. “El diálogo está totalmente cortado”, describió una fuente.
Hasta ahora, quien ha venido ejerciendo la presidencia interina del organismo es el exsenador nacionalista y actual ministro del Tribunal Francisco Gallinal, que encabezará hoy la delegación que comparecerá ante la Comisión de Presupuestos integrada con Hacienda de la Cámara de Representantes, para hablar del proyecto de Rendición de Cuentas.
En la interna del Frente Amplio hay inquietud acerca de cuánto tiempo podría demorar la respuesta de Reyes, cuya negativa implicaría la consulta a Gulla para la toma de posesión del cargo. Incluso, en la oposición se habla de un posible vacío legal porque no existe un plazo estipulado para esperar por una respuesta de un suplente.
Gallinal reconoció a Búsqueda que el tema “no está reglamentado” y, en el hipotético caso de que no exista una respuesta, anunció que propondrá que se curse una solicitud a la Comisión de Constitución y Legislación del Senado para que dirima la situación. “El único camino es ese. Se aceptan otras opiniones pero no las he escuchado”, añadió.
Al renunciar Díaz, Gallinal había reclamado en declaraciones a El País que la Asamblea General tomara “cartas en el asunto” y retomara la negociación de la renovación del Tribunal, tras “producirse un desequilibrio de esta naturaleza”.
El acuerdo interpartidario por la renovación del Tribunal de Cuentas que había sido pactado entre oficialismo y oposición en 2020 solo incluía un cambio de nombres en el ministro designado por el Partido Colorado: el ministro colorado, Álvaro Ezcurra, iba a ser sustituido por el sanguinettista Gustavo Osta. Pero la modificación no prosperó porque estaba atada a la negociación de otro órgano de contralor, la Corte Electoral, donde hubo dificultades primero para definir la presidencia, y luego para acordar la suplencia de su titular, el neutral José Arocena.
