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La AUF prepara la venta de derechos con informes que avalan otras alternativas a Tenfield
Jugadores de Nacional y de Peñarol durante el clásico del Torneo Apertura 2023. Foto: Dante Fernández, AFP
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De setiembre a octubre el fútbol uruguayo estuvo parado durante un mes. En los papeles, la razón eran reclamos laborales planteados por la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales. Las discusiones de fondo, sin embargo, giraron en torno a diferencias entre los clubes respecto al formato de la liga de Primera División, la distribución de ingresos, el poder de voto de estos clubes dentro de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y especialmente quién será en el futuro el propietario de los derechos de televisación.
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En la actualidad Tenfield es el titular de los derechos audiovisuales de las competiciones nacionales organizadas por la AUF hasta el 31 de diciembre de 2025. Cuenta además con una cláusula de preferencia para adquirir los derechos al vencimiento de ese plazo. El último contrato firmado por Tenfield y la AUF fue en 2015 y estableció el cese de los derechos por alrededor de US$ 17 millones al año, si se suman ajustes económicos. Fue el sexto acuerdo rubricado entre la empresa y la AUF desde 1998, cuando Tenfield obtuvo por primera vez la televisación del fútbol local.
Aunque ha dejado la puerta abierta para una eventual renovación con Tenfield, la directiva de la AUF está en un proceso que pretende gestionar directamente sus recursos audiovisuales. Esa ha sido la opinión del presidente Ignacio Alonso cuando asumió en 2019 y volvió a repetirla al ser reelecto para el período 2023-2027: su intención es evitar que un intermediario tercerice los derechos y llegar directo al consumidor a través de distintos sistemas de distribución. Idealmente, tener un modelo con un canal propio de la AUF en sociedad con una productora tal como sucede con los partidos de la selección.
La AUF quiere convencer de ese camino a los clubes, sobre todo a los que entienden que Tenfield es la mejor opción por el conocimiento que tiene del fútbol uruguayo, por su expertise en la producción de transmisiones y porque, al momento de presentar ofertas, es la única empresa dispuesta a pagar acorde al valor de las competiciones locales. Para eso, la AUF encargó consultorías a empresas locales y extranjeras y también elaboró estudios propios. “Hemos tenido acceso a informes en los últimos años que marcan el real valor de nuestro producto, que muestran el real significado de una demanda creciente del público uruguayo”, afirmó Alonso en julio durante la conferencia de prensa en la que fue presentado el nuevo comité ejecutivo que encabeza.
En promedio, esos informes sostienen que la facturación de quien comercializa los derechos de televisación es entre US$ 40 y US$ 50 millones al año. Alonso y otros directivos de la AUF comunicaron a los clubes que la negociación por los derechos debe partir entonces de un piso de US$ 30 millones al año para la AUF.
“Buscando la maximización de los ingresos, tenemos que encontrarle la vuelta, desde el fútbol profesional, a cambiar por los modelos con los que hemos comercializado. No tenemos que apurarnos en vender. La AUF ha trabajado para poner arriba de la mesa mecanismos que financien y generen expectativas reales al piso del valor televisivo del fútbol uruguayo en línea con las tendencias globales, en las cuales Uruguay está en línea e inserto”, dijo Alonso en julio.
Más allá de tomar como modelos de gestión de los derechos a España e Italia, la referencia más vigente es Paraguay, un mercado similar al de Uruguay. El mes pasado la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) cerró un contrato récord con Tigo Sports de US$ 97.680.000 por cuatro años de los derechos de televisación.
Mejorar los ingresos totales
La primera de las auditorías a las que apela la AUF fue solicitada en 2018 al grupo español Mediapro, especializado en gestión de derechos deportivos, que realizó su estudio a partir de la información directa del mercado de abonados al cable en el país. Allí concluyó que el alcance de los derechos cedidos a favor de Tenfield es “muy amplio” y que la AUF tiene dos alternativas para recuperarlos: una regulación legal que establezca cuál debe ser el modelo de comercialización de los derechos audiovisuales de las competiciones y que habilite a la AUF a vender directamente cada uno de los derechos contemplados en los contratos; o la renegociación del contrato actual con Tenfield, con el mismo objetivo de recuperar los derechos.
“En cualquiera de los casos la venta de los derechos por parte de la AUF a cada operador debería mejorar los ingresos totales, que en la actualidad son sensiblemente inferiores a lo que le correspondería a este tipo de competiciones, y además debería permitir reducir el desequilibrio de los ingresos que reciben los clubes”, indicó Mediapro, que fijó la entrada anual por los derechos de televisación del fútbol uruguayo en US$ 50.964.374.
La AUF realizó un promedio del ingreso de TV a partir del estudio de Mediapro, uno propio que alcanzó US$ 54.299.824 y uno calculado con cinco estados contables de Tenfield adquiridos a la Auditoría Interna de la Nación que arrojó US$ 48.380.272. Se espera ahora una asesoría de EY, la filial uruguaya de la consultora multinacional con sede en Londres.
El último estudio, al que accedió Búsqueda, fue llevado a cabo el año pasado por Mercoplus, una consultora uruguaya que investiga mercados de uso y consumo en diversas áreas. Según Mercoplus, la facturación al año por ostentar los derechos audiovisuales de torneos locales es de US$ 47.000.000. Esta investigación analizó las fuentes de ingreso del fútbol uruguayo y concluyó que el 65% proviene de las suscripciones a partidos televisados —US$ 42.500.000— y otros US$ 4.500.000 corresponden a la publicidad que se comercializa en la televisión durante las transmisiones.
Mercoplus estimó proyecciones en función de la cantidad de consumidores, al precio óptimo que están dispuestos a pagar por el fútbol uruguayo y los entornos macroeconómicos del país; planteó que para 2031 habrá 721.386 suscriptores al fútbol uruguayo que generarán una facturación anual de US$ 88.950.518.
La investigación calculó la tasa tendencial de crecimiento de la economía uruguaya en el orden del 2,5% anual, un incremento moderado de la cantidad de ocupados en el mediano plazo (aproximado al 0,4% anual), el aumento del salario real en torno a 2% anual y la reducción de la inflación hacia niveles de 5% anual. En el plano cambiario, a partir de las proyecciones de inflación para Uruguay y Estados Unidos y del tipo de cambio real bilateral, Mercoplus arribó a una tendencia alcista para el tipo de cambio nominal.
En cuanto al nivel de interés e intención de compra de los consumidores por productos del fútbol uruguayo, el informe concluyó que el cable sigue siendo la plataforma “más preferida y valorada” y que los mayores ingresos se proyectan a través de cable con disposición del usuario a pagar por un pack completo que incluya la Primera División, la Segunda División y la Primera División Femenina. “Este pack despierta el interés de casi la mitad de los responsables de la compra en el hogar”, afirma Mercoplus, que añade que el “streaming aún no logra una alta valoración como para sustituir medios más tradicionales”.