Los triunfos de la sub-20 predominan en el fútbol uruguayo y no definen la carrera de sus protagonistas en la selección mayor

Esa presunción, sin embargo, no está respaldada por los datos: a lo largo de la historia las divisiones juveniles uruguayas han alimentado regularmente a la selección principal, pero ese pasaje se produce de manera constante independientemente de los buenos o malos resultados deportivos que consigan los equipos juveniles.

Dos años después de Malasia, Uruguay terminó cuarto en el Mundial sub-20 de Nigeria 1999. En esa selección compuesta por 18 futbolistas también estuvo Carini y descolló en los años siguientes Diego Forlán, que en la mayor jugó 112 partidos y anotó 36 goles. Otro valor de la selección mayor fue Diego Pérez, que registró 89 partidos en su carrera con Uruguay. Quienes completaron una actuación regular en la selección fueron Gonzalo Sorondo y Javier Chevantón, con 27 y 22 partidos respectivamente.

La generación sub-20 que fue segunda en el Mundial de Turquía 2013 aportó a la mayor a José María Giménez, quien tiene 28 años y ya lleva 81 partidos oficiales. El otro destacado de ese grupo es Giorgian De Arrascaeta, que suma 42 partidos. Diego Rolán (25 juegos), Diego Laxalt (24), Gastón Silva (19) y Guillermo Varela (12) también han defendido a Uruguay, aunque generalmente como suplentes.

La categoría juvenil más reciente que se puede evaluar es la que finalizó cuarta en el Mundial de Corea del Sur 2017. De ese equipo hay dos piezas claves en la selección actual: Rodrigo Bentancur y Federico Valverde, en camino a superar los 100 encuentros. Queda por ver el recorrido de los que han jugado menos y no son titulares como Matías Viña (29 partidos) y Nicolás De la Cruz (19). Mathías Olivera recién fue convocado por primera vez el año pasado y tiene 12 partidos.

Esta dinámica, donde los resultados exitosos de equipos juveniles no se trasladan en muchas figuras para el futuro, se repite en otros países. La sub-20 de Francia, que en el Mundial 2013 derrotó a Uruguay en la final, aportó cuatro jugadores al plantel campeón del mundo en Rusia 2018. Solo Samuel Umtiti y Paul Pogba fueron titulares. Al plantel francés finalista en Catar 2022 únicamente lo integró de aquella generación Alphonse Areola. De los jugadores sub-20 de Inglaterra que ganaron el Mundial 2017, ninguno participó de los mundiales de mayores en Rusia 2018 y Catar 2022. Dean Henderson y Dominic Calvert-Lewin sí formaron parte de la selección inglesa vicecampeona en la Eurocopa 2020. En mayo, el diario británico The Sun repasó el destino de los 21 campeones de 2017: “Se convirtieron en el primer equipo de fútbol de Inglaterra en ganar una Copa del Mundo desde que Bobby Moore levantó el trofeo en 1966. Esos jóvenes de Inglaterra hicieron historia hace casi seis años, pero después de ganar el Mundial sub-20 a muchos les resultó difícil ingresar al escenario internacional”, dice el artículo.

La situación puede ejemplificarse de manera contraria. La selección de Argentina ganadora en Catar 2022 estuvo compuesta por Juan Foyth, Gonzalo Montiel, Ezequiel Palacios, Lautaro Martínez y Lisandro Martínez, cinco futbolistas que habían sido eliminados con la selección sub-20 en la primera ronda del Mundial 2017. Así describía una crónica de Infobae la eliminación de Argentina en aquel 2017: “El combinado nacional regresará mucho antes de lo previsto aunque el escenario será el mismo que el de hace una década, tiempo en el que solo se han acumulado frustraciones innegables. Habrá que hacer una autocrítica tan profunda que mucho tendrá que cambiar en la formación de juveniles del país”.

Mientras las divisiones juveniles de Argentina atraviesan actualmente uno de los peores momentos de su historia en cuanto a resultados, en 2021 la selección mayor volvió a ser campeón de América después de veinte años y en 2022, del mundo, después de casi cuarenta. Esta supuesta incoherencia fue explicada por José Pekerman, quien dirigió a la selección argentina sub-20 a tres campeonatos mundiales en 1995, 1997 y 2001. “La visión en esas categorías es que hay que formar jugadores, más allá de los resultados”, dijo en diciembre entrevistado por ESPN.

Tras la consagración del domingo 11 ante Italia, los 21 futbolistas uruguayos inician ahora un nuevo recorrido con el objetivo de consolidarse en la selección mayor. Randall Rodríguez, Sebastián Boselli, Facundo González, Mateo Ponte, Fabricio Díaz, Luciano Rodríguez y Anderson Duarte son los siete que ya tendrán la oportunidad de mostrarse ante Bielsa. Su llamado va en línea con lo que planteó el director técnico en la conferencia de prensa de presentación, donde explicó que para sus dos primeros amistosos pensaba armar un grupo con futbolistas menos renombrados. “Hay jugadores que aunque uno no los haya dirigido se disimula porque son tantas y tan frecuentes las veces en que esos jugadores se exponen, en que se los puede ver jugar, que la profundización del análisis es natural”, dijo. “Hay otros que son menos visibles y seguramente será eso lo que más me determine la construcción de la convocatoria. En esta primera experiencia elegiré a aquellos jugadores que menos conozca, porque para terminar de conocer a un jugador es necesario la cercanía de un entrenamiento, de un ciclo de entrenamientos. Utilizaré estos días de junio para familiarizarme con los que menos conozco, menos he visto”, agregó.