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La notable baja de los precios de los lácteos en la segunda licitación de julio de Global Dairy Trade (GDT) “sorprendió mucho, porque pensamos que ya habíamos llegado al piso y lo perforó con creces; lo grave es que a futuro GDT y NZX están en valores bajísimos”, afirmó el director ejecutivo del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina, Jorge Giraudo.
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Analizó que esto “es producto de una oferta que se incrementó a nivel mundial, y una demanda que se retrajo en general y particularmente en China, que es el gran comprador. Más de un cuarto de las compras mundiales las hace China y justamente las hace a Nueva Zelanda, y eso repercute en los precios internacionales de casi todas las commodities”.
Sobre las posibilidades de una reactivación de la demanda china, el directivo sostuvo que “la caída fue muy fuerte desde el año 2022”, a la que se suma esta última baja. Recordó que en junio subieron 12% las importaciones de China, pero eso no alcanzó.
“Lo que pasa es que China está incrementando fuerte su producción local y tiene problemas de demanda. El efecto de la recesión económica mundial también afecta a China, y eso también repercutió en su compra. Todos veíamos informes de fuentes confiables sobre que podía haber una reactivación en el segundo semestre, pero todavía no se ve con fuerza esa reactivación”, dijo.
Producción china
Con relación a la hipótesis de que, a pesar de ese incremento interno, China no podrá autoabastecerse, Giraudo dijo que “seguro que no va alcanzar, pero tenemos que pensar que estamos hablando ya de unos 50.000 millones de litros de leche, que es una cifra importante a pesar que China es muy grande”.
Señaló que ese crecimiento de la producción reduce las importaciones. “Lo que pasa es que el mercado internacional es chico. Son 80.000, 90.000 millones de litros de leche de los cuales China compra 25.000 millones. El hecho que China haya crecido 4% ya te achica mucho esa demanda. Son números muy finos los del mercado internacional, a pesar de que la lechería a nivel mundial es muy grande. Lo que se vende fuera de los consumos internos es muy chico”, enfatizó.
Analizó que los precios internacionales y la menor venta de Nueva Zelanda en China hizo que las empresas lácteas neozelandesas salgan a ofrecer sus productos en los mercados donde estaban Argentina y Uruguay, como Argelia.
“Nosotros hemos salido totalmente se ese mercado, porque entre el precio bajo y el tipo de cambio retrasado es imposible estar allí. Hoy el único mercado importante para Argentina y creo que también para Uruguay es Brasil, que venía con una gran caída de producción y se empieza a recuperar”señaló.
Agregó que la recesión interna hace caer el consumo, y sobre todo la baja de precios al productor, lleva a que se decida importar.
Posibles medidas de Brasil
Las entidades de la producción primaria de Brasil, como siempre ha ocurrido cuando hay importaciones muy altas y caída de precios domésticos, presionan al gobierno para que tome algún tipo de medida. “Recordemos los antidumping, las cuotas que se nos fijaron tanto a Argentina como a Uruguay. Existe la probabilidad de que se pueda poner algo de eso”, advirtió.
Sobre qué otros mercados tienen la posibilidad de crecer en la compra de lácteos, indicó que “Argentina le vende a 90 países diferentes”, pero “todas son compras muy marginales, muy chicas, como un contenedor de queso o un contenedor de dulce de leche”.
Pero para este negocio se requiere volumen de compras, como los de Rusia, Brasil, China y Argelia, indicó.
Acuerdo Mercosur-UE
Con relación al impacto que puede tener en lecherías como la de Uruguay, Argentina y Brasil la concreción del acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea (UE), Giraudo dijo que “si mirás la lechería europea viene cayendo la producción, la cantidad de unidades productivas y vacas en los países del este y en el resto va a caer mucho también, por las regulaciones ambientales, bienestar animal y por los recursos.
Señaló que 1 hectárea de tierra en Europa vale 10 veces más de lo que vale acá, porque compite con el uso urbano. “Los costos de producción han subido, con lo cual las posibilidades de que las producciones de leche caigan en Europa y tengan que ser abastecidas con países como Argentina y Uruguay son muy probables”, consideró.
“Yo lo veo con buenos ojos, siempre y cuando se hagan acuerdos donde no existan diferenciales competitivos no previstos en la propia competencia, que no haya artificialidades. Al no haber artificialidades se puede competir perfectamente”, afirmó el director ejecutivo del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina.
Lechería argentina
Giraudo dijo que Argentina está con una producción casi igual a la del año pasado, con caídas fuertes de exportación, que se vuelca al mercado interno. “Pierde la industria, porque no baja el precio al consumidor pero sí el de salida de fábrica. Eso hace que el precio que venía acompañando en cierta medida una inflación creciente, hoy se empiece a desacelerar y empiecen los riesgos. Que los costos de producción perforen el precio y el negocio deje de ser rentable o viable para el sector primario, y se generen resultados negativos para el sector industrial”, analizó.
Consultado sobre cómo impactó en el sector el dólar maíz, Giraudo respondió que “muy fuerte”, porque “generó una suba de 27% en el precio del maíz, y ese es el principal insumo no concentrado, que hace subir 5% o 6% los costos de producción”. Agregó que esos costos “ya estaban altos por el efecto de la seca, que hizo que muchos productores tuvieran que comprar reserva forrajera para sostener la producción”.
