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    Un encuentro frustrado en París

    La situación económica de la empresa agropecuaria uruguaya Union Agriculture Group Corp. (UAG Corp.) era complicada en 2018. Uno de sus accionistas, el multimillonario Hervé Vinciguerra, pensaba en cómo dejar la compañía. Intentó negociar un cambio de sus acciones por tierras, pero no se lo aceptaron.

    El ingeniero francés buscó entonces un camino alternativo: coordinar una reunión en París con Juan Sartori, fundador y accionista mayoritario de UAG Corp. (que ahora se llama Agriculture Investment Group Corp., AIG Corp.), para conversar sobre el negocio. El actual senador uruguayo no aceptó la oferta.

    Sartori le envió un correo electrónico a Vinciguerra en el que le dijo que “compartía sus preocupaciones acerca de la calidad de la gestión y que no tenía poder para actuar, ya que no estaba más en el directorio, pese a reconocer que seguía siendo el principal accionista. Esta sugerencia de que no tenía poder para actuar era obviamente completamente falsa, dado su posición dominante en AIG como accionista”, según un documento presentado ante la Justicia de Islas Vírgenes Británicas (BVI) por el director de AIG Corp., Jerome Ferrucci.

    La declaración jurada de Ferrucci fue presentada en junio como respaldo del reclamo que Alix AM, a quien representa en el directorio de la agropecuaria, inició meses antes en BVI.

    Multimillonario

    Vinciguerra, cuya fortuna está valuada en 600 millones de euros por la revista francesa Challenges, no es el único empresario de primera línea y accionista de UAG Corp. crítico con la gestión que desarrolló Sartori.