Desde mediados de 2024 funciona en Punta del EsteBe True, una taberna en la que se pueden probar sabores japoneses en un menú que plasma la pasión y creatividad del chef Danny Sadi, considerado como uno de los mejores sushiman del Uruguay.
El nuevo restaurante de Danny Sadi en Punta del Este explora sabores auténticos de la cocina nipona, en ese limbo entre el desayuno y el almuerzo
Desde mediados de 2024 funciona en Punta del EsteBe True, una taberna en la que se pueden probar sabores japoneses en un menú que plasma la pasión y creatividad del chef Danny Sadi, considerado como uno de los mejores sushiman del Uruguay.
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El venció tu suscripción de Búsqueda y Galería. Para poder continuar accediendo a los beneficios de tu plan es necesario que realices el pago de tu suscripción.
En caso de que tengas dudas o consultas podés escribir a [email protected] contactarte por WhatsApp acáHa sido docente de sushi en el Instituto Gato Dumas, Ithu, y este año en Crandon Gastronómico; y sushiman en La Huella, Club de Golf, Cru Cocina, La Susana, Vik y The Grand Hotel.
En este nuevo proyecto, que se suma al restaurante Sushi True, que lidera hace más de una década en Montevideo, el foco no está puesto en el sushi de autor como sí lo está en el restaurante capitalino. Aquí las estrellas son otros platillos japoneses que ha logrado perfeccionar a lo largo de los años, luego de introducirse de lleno en esa cautivante gastronomía por intermedio del sushi.
Si bien la carta es diferente, el propósito del chef es el mismo: apuntar a la calidad del producto y a la búsqueda de aportar valor para crear experiencias gastronómicas únicas y auténticas. “No me interesa ofrecer platillos masivos y convencionales. Prefiero utilizar ingredientes locales y mantener una propuesta tradicional japonesa con un toque personal. Mi objetivo es sorprender a los clientes con sabores diferentes y una experiencia que va más allá de lo que suelen encontrar en otros lugares”, explica.
Con este enfoque sabe que se dirige a un nicho específico y que los comensales que visitan sus restaurantes no buscan simplemente comer, sino vivir un momento especial, que les permite valorar el producto fresco, local y la dedicación que se refleja en cada plato.
Ubicado en la esquina de la avenida Pedragosa Sierra, denominada Boulevard Gourmet por su concentración de locales gastronómicos, y la avenida Laureano Alonso Pérez, Be True es un restaurante con una clara especialidad: el brunch japonés, una versión novedosa del popular fenómeno culinario que implica una combinación de la comida que típicamente se sirve en el desayuno con otra, más contundente, que podría perfectamente formar parte del almuerzo. El brunch, palabra que proviene de la fusión entre los términos en inglés breakfast (desayuno) y lunch (almuerzo), ha capturado corazones y paladares en todo el mundo y se ha convertido en una tradición que trasciende fronteras, por lo que combinarla con la gastronomía japonesa, que se encuentra en auge a escala mundial, parece ser una idea sin margen de error.
La propuesta del chef busca que el comensal pruebe un poco de cada cosa para que abra su paladar, conozca nuevos sabores y descubra qué le gusta más del viaje a Japón que se le presenta a través de los sentidos. El servicio, que se sirve para dos personas y está disponible de 12 a 15:30 h, ofrece una experiencia variada para quien está ingresando en el universo de sabores nipones, y un recorrido muy completo para los conocedores.
Empieza con una reconfortante sopa de miso, un caldo sabroso elaborado a partir de pescado y pasta de miso, perfecto para abrir el apetito. Luego llegan las gyozas: dumplings delicadamente rellenos, con opciones de salmón, cerdo, cerdo con camarón o cangrejo sirí.
Otro plato es el takoyaki, un buñuelo relleno de pulpo, coronado con láminas de bonito ahumadas y deshidratadas que, al entrar en contacto con el calor, parecen “bailar” sobre el plato, creando un efecto visual fascinante. El menú también incluye katsu sando, un sándwich de milanesa de cerdo cuya carne ha sido marinada en salsa de soja durante 48 horas y luego apanada en panko, lo que le da un toque crujiente a un mordisco muy tierno y jugoso.
El ramen, uno de los platos japoneses más populares a nivel internacional, no podía faltar. Este caldo untuoso incluye cerdo, fideos y un huevo cocido a baja temperatura, que aporta una cremosidad irresistible.
Para finalizar, el toque dulce lo pone un suspiro limeño, preparado con leche condensada y evaporada, y rematado con un delicado merengue. Si bien no es un postre japonés sino peruano, fue elegido por ser el dulce insignia y uno de los más pedidos en Sushi True, el restaurante de Sadi en Montevideo.
Para quienes prefieren elegir sus platos, estos también se ofrecen de forma individual en la breve pero cuidadosamente diseñada carta, que, como no podía ser de otra manera, tiene una sección dedicada al sushi, la especialidad por la que es reconocido este cocinero, que es sin duda lo más popular a nivel internacional dentro de la gastronomía nipona. Al sushi se suma una selección de entrantes o tapas y otra de platos japoneses y bebidas.
Entre las entradas, destacan las gyozas veggie, unos dumplings rellenos de vegetales salteados como berenjena, hongo shiitake y zanahoria y las korokke, que son croquetas rellenas de cangrejo sirí o salmón. Además, están los clásicos arrolladitos primavera y el okonomiyaki, una tortilla japonesa con repollo, zanahoria y panceta. Para quienes prefieren algo más simple, el edamame, hecho a partir de vainas de soja hervidas y salteadas en aceite de sésamo, es una elección ideal.
Además de los incluidos en el brunch, se ofrece como principales katsu rice bowl y sirí rice bowl, que, por ejemplo, reúne un bol de arroz con una croqueta de cangrejo y un huevo. Para los vegetarianos o aquellos que quieran una opción más liviana pero igualmente sabrosa, el curry veggie es una excelente elección, con tempeh (un producto procedente de la fermentación natural controlada de la soja) y porotos.
Para la parte dulce, la propuesta incluye el ya mencionado suspiro limeño y el tradicional taiyaki, “pez dorado de la suerte”, un pastelito japonés con relleno dulce. En este caso el relleno es de dulce de membrillo o dulce de leche.
La carta de bebidas no incluye refresco, sino agua, jugo de naranja, jarra de limonada o hibisco, cerveza, vino y algunos tragos, como negroni, aperol y gin tonic.
En esta nueva etapa, Sadi logra fusionar lo mejor de la cocina japonesa tradicional con un toque moderno y personal. Actualmente, el equipo está desarrollando nuevos platos para incluir en la carta, así como explorando la incorporación de postres japoneses. Este último desafío resulta especialmente interesante, ya que estos platos suelen ser menos dulces que los que prefieren los paladares uruguayos, lo cual implica un esfuerzo creativo para adaptarlos sin perder su esencia original.
El local está abierto de jueves a domingo de 8 a 16 horas, y sirve desayuno, con una propuesta internacional de bollería y cafetería, brunch y almuerzo. A partir de diciembre ofrecerá cena viernes y sábado, y después del viernes 20 de diciembre abrirá sus puertas todos los días, de la mañana a la noche. Además, trabaja con servicio de take away y el equipo realiza eventos a domicilio, llevando la cocina japonesa directamente al hogar de los clientes.
fotos: mauricio rodríguez