Compras públicas: crisis del agua, gripe aviar y puesta a punto de la refinería adicionaron gasto

Hay más de una docena de procedimientos de adquisiciones públicas, pero casi ocho de cada diez adjudicaciones del 2023 fueron “compras directas”; llevaron, en promedio, ocho días. Otro 11% correspondió a “compras por excepción”, que se procesaron en poco más de una semana. Las licitaciones —una de las modalidades menos usadas—, insumieron de un mes y medio a casi dos, también en promedio.

El Poder Ejecutivo (38%), los servicios descentralizados (31%), los gobiernos departamentales (17%) y los entes autónomos (13%) fueron los que más adjudicaciones concretaron, aunque por montos se destacaron los entes (87%).

Para la limpieza integral del complejo Torre de las Telecomunicaciones y su anexo, Antel contrató a la empresa Perfil S.A., con un costo total de $ 114.224.940.

Ancap enfrentó gastos especiales —algunos realizados por el procedimiento de “compras por excepción”—, relacionados con el mantenimiento de la planta de La Teja, iniciado en agosto. Entre otras cosas, adquirió “termocuplas y sensores de termocuplas skin” para dos hornos (US$ 107.320), caños, servicios de construcción y el arrendamiento de andamios tubulares ($ 43.920.000). Por otro lado, con la planta parada debió importar combustibles refinados, lo que pegó en su balance en el final del año.

Con la sequía como un problema serio, OSE debió incurrir en mayores gastos durante el año pasado. A pedido de la Gerencia de la Región Litoral Sur, que advertía el riesgo de no poder “garantizar el normal suministro de agua potable a la población por más de 20 días” ante el déficit hídrico que afectaba a la ciudad de Nueva Helvecia, el organismo hizo una contratación directa por excepción a la firma Eurobrisa S.A. para adquirir 12.000 metros de caños para agua de PVC. Esa compra, por US$ 563.640, era “de extrema urgencia (…), mientras se aguarda la mejoría climática que mejore los caudales de las fuentes de agua bruta”, consta en una resolución.

Por el mismo mecanismo, OSE contrató un servicio de excavación y construcción de un nuevo canal de toma e instalación de bomba electromecánica en el lecho del río Santa Lucía, aguas debajo de la Presa de la Usina de Aguas Corrientes, que padecía “una notoria falta de disponibilidad” del recurso. Esa adjudicación fue por $ 16.011.917 más US$ 309.515, IVA incluido.

Entre otros muchos gastos relacionados con la sequía, también contrató a la empresa Agua Subterránea S.R.L. —con un costo de $ 766.920— para que hiciera una perforación en Montevideo.

Por la escasez hídrica y en el marco de una emergencia agropecuaria, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca dio apoyos al sector productivo y, por ejemplo, compró alfalfa para suplementación animal.

Otro problema que debió encarar esa cartera fue la gripe aviar. Por $ 166.209, la Dirección General de Servicios Ganaderos adquirió solventes, reactivos, un freezer vertical —con un costo de US$ 2.670— y tres sistemas de espuma multipropósito portátiles para sacrificio sanitario de aves.

Hay compras que son habituales y acordes con el corazón de la actividad de las reparticiones. La Dirección General Impositiva —una dependencia del Ministerio de Economía— adquirió 400 sellos con un costo total, sumando el IVA, de casi $ 160.000. El Banco República compró 29 máquinas contadoras de billetes a un precio unitario sin impuestos de $ 8.400.

Con un costo de $ 1.164.610, el Banco Central contrató dos investigaciones para “identificar los factores que determinan diferencias significativas entre precios claves de bienes y servicios y su valoración para la economía uruguaya”. También compró vacunas antigripales y el servicio de vacunación por $ 350.000.

El Banco de Seguros del Estado, que tiene una importante cartera de clientes en el agro, destinó US$ 2.000 a su participación en el lanzamiento de la cosecha de arroz, un evento organizado por la asociación de cultivadores.

Salud y policía

Muchas compras por excepción fueron de medicamentos costosos realizadas por el Ministerio de Salud Pública, ante fallos adversos de la Justicia.

La Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) adjudicó, entre muchos otros rubros, la compra de alimentos y material para sus hospitales. También el arreglo de móviles: el Hospital de Rocha le contrató al taller Magalhaes el arreglo de una ambulancia con un costo de $ 277.950 pese a que “el contador delegado del Tribunal de Cuentas de la República observará el gasto por no haber dado cumplimiento” de la obligación de hacerlo por mecanismos competitivos de compra. Para la Red de Atención Primaria de Rivera, ASSE pagó $ 7.900 por el arreglo de la sirena de otra unidad.

Para el Ministerio del Interior, la reparación y mantenimiento de sus vehículos es un rubro importante de gasto. Entre sus adjudicaciones del año pasado —casi siempre por compra directa— figuran muchas compras de repuestos, pero también de materiales de obra, alimentos e insumos de oficina. Para los perros de su Unidad K9, también compró antipulgas y garrapatas.

Eventos

Ciertos gastos, a primera vista para algunos, pueden parecer superfluos o excesivos.

El Ministerio de Industria, Energía y Minería arrendó, con un costo de $ 800 cada uno más impuestos, 40 “centros de mesa” en una compra directa a Somos Uruguay S.R.L.

Como compra de excepción, el Centro Regional Este de la Universidad de la República —que ofrece carreras en las áreas de ciencias de la naturaleza y el hábitat, entre otras— alquiló una lancha por $ 320.000.

Algunos gastos son una tradición en algunas instituciones. En insumos para el Día de la Familia Naval, el Comando General de la Armada gastó $ 223.278 en 2.000 helados palito base agua, 4.008 frankfruters y similar cantidad de panes de viena, 1.000 litros de refrescos cola, máquina de algodón de azúcar, juegos mecánicos y vinchas, entre otras cosas.

Entre las adjudicaciones del año pasado hubo, también, inversiones. La Cámara de Representantes compró la sustitución del equipamiento —siete cámaras y una consola— del canal de televisión vinculado a la transmisión audiovisual de sus sesiones en sala. El monto total adjudicado fue por US$ 192.565.

Piedra, semáforos y motocarros

Las intendencias departamentales prestan servicios diversos y eso se refleja en sus rubros de adquisiciones.

Por ejemplo, entre las adjudicaciones de la Intendencia de Artigas del año pasado hubo varias compras de “piedra triturada”, de bolsas de cemento portland y también de nueve motos cero kilómetro (por $ 1.772.402).

En general, la Intendencia de Montevideo recurre al procedimiento de la compra directa. Acorde con la diversidad de áreas que involucran a esa comuna, adquirió desde 295 “artefactos de semáforos” con luces LED a Grupo Teros (US$ 118.340) a 80 motocarros para su División Limpieza ($ 11.559.158) y hasta un arco inflable de fútbol-waterpolo para uso en la playa. También contrató la vigilancia privada en los cementerios Central y Buceo por $ 23.392.670 y, por $ 58.000, un servicio para ahuyentar palomas (cetrería).