En el Partido Nacional ya discuten fórmula y evalúan las posibilidades de Argimón

escribe Federico Castillo 
7 minutos Comentar

El último domingo de junio de 2019, cuando ya estaban prontos los resultados de las elecciones internas, los dirigentes del Partido Nacional actuaron rápido. Hubo distintas reuniones de apuro con un solo objetivo: definir con celeridad la fórmula presidencial. Se tenía que anunciar esa misma noche, una muestra de unidad y determinación que además significaba ganar tiempo, despejar obstáculos de cara a las elecciones nacionales. Pegar primero.

Las discusiones las lideró el precandidato ganador, Luis Lacalle Pou, que obtuvo el 53% de los votos. Y entonces habló con Juan Sartori, la sorpresa absoluta de las internas con 20%, y se reunió con Jorge Larrañaga, el gran derrotado, con 17%. Y también con Enrique Antía, que había cosechado 7% de los votos. Y entre todos se consensuó la fórmula. Beatriz Argimón, dirigente del riñón de Lacalle Pou, una figura del mismo sector del ganador, pero que recogía unanimidades, sería la candidata a vicepresidenta. Salió la foto. Lacalle Pou y Argimón con los brazos en alto en las afueras de la sede del Partido Nacional prometiendo el triunfo nacional en la noche misma de las siempre peleadas internas de los blancos. Fue todo un cambio.

Ahora, cuando todavía faltan algo más de tres meses para las elecciones de junio, y con mucha tela para cortar en esta campaña electoral, la posible fórmula presidencial es un asunto arriba de la mesa de distintas figuras nacionalistas. Es un tema de pasillo, prematuro, pero con el ruido suficiente como para prestarle atención. Los que se anticipan y ya orejean las cartas que se van a desplegar en la noche del 30 de junio son, con evidente ánimo triunfalista, los dirigentes que respaldan la precandidatura de Álvaro Delgado, que lidera el sector Uruguay para Adelante.

Anclados en el determinante peso de las estructuras militantes a su favor y los números que marcan las encuestas, los dirigentes de Delgado imaginan escenarios distintos al de una fórmula con Laura Raffo, que es quien le sigue en las consultas de opinión pública en una interna que hoy luce despareja. Según el último muestreo difundido ayer miércoles por la empresa Opción, Delgado tiene una ventaja de 61% a 19% sobre Raffo. Hoy la foto es esa. Y con esa foto, con alguna “preocupación” sobre un posible “estancamiento” de Raffo en esos números, ya se exploran otras opciones.

Desde hace unos meses se le vienen poniendo fichas, con relativa discreción, sin prisa ni pausa, a la posibilidad de que la ministra de Economía, Azucena Arbeleche, sea uno de esos activos políticos a potenciar. Una novedad en campaña, alguien que salga de los límites de lo técnico y se zambulla en la política pura y dura. Lo informó Búsqueda en setiembre de 2023 y su nombre sigue siendo una propuesta que seduce entre los cercanos a Delgado. “Es un nombre fuerte”, es una “cara nueva” en política, y es la imagen de una “gestión exitosa” en un terreno árido y clave como el económico. Por eso hay muchos que la ven defendiendo logros en esa área en los actos de campaña como compañera de fórmula del candidato.

Pero hay más. Porque en los últimos días, en los que la palabra reelección ha cobrado fuerza de eslogan y ha sido usada como concepto de campaña por el propio Delgado, algunos dirigentes pensaron qué pasaría si Argimón repite una fórmula presidencial. Tanto así que se hicieron consultas jurídicas para zanjar si la actual vicepresidenta de la República está o no impedida constitucionalmente para volver a ocupar ese mismo cargo en otro eventual gobierno de la coalición multicolor.

Según pudo saber Búsqueda, la propia Argimón fue informada sobre estas consultas legales para impulsar su nombre. A priori hay dos doctrinas. Sin embargo, la Constitución en su artículo 152 dice: "el Presidente y el Vicepresidente durarán cinco años en sus funciones, y para volver a desempeñarlas se requerirá que hayan transcurrido cinco años desde la fecha de su cese".

Laura Raffo y Beatriz Argimón conversan en el Café del Teatro Solís, febrero 2020. Foto: Facebook de Beatriz Argimón

¿Y Raffo?

Todas estas especulaciones son observadas desde la vereda de Raffo con cierto resquemor. Una fuente de su comando dijo a Búsqueda que evalúan como algo “soberbio” que ya se dé como ganador a Delgado. “Están en la posición de yo gano y elijo”, señaló la fuente y destacó el optimismo que existe para pelear una elección que “no está laudada”.

“Nosotros estamos en un piso de un 20% del que no nos mueve nadie para abajo. Ese es el piso, de ahí vamos a seguir creciendo y el techo puede ser ganar”, agregó. “Yo le preguntaría a la gente de Delgado qué planificación están haciendo en caso de perder. Hay que analizar todos los escenarios”.

Otras fuentes del entorno de Raffo, bien al tanto de los nombres que se manejan para una fórmula hipotética con el precandidato de la Torre Ejecutiva, dijeron que se trata de “puras y complejas maniobras de ingeniería electoral” que se hacen para “posicionar a distintos dirigentes en lugares de preferencia en las listas” o “inflar sectores que están disminuidos”.

“Decidir una fórmula ahora es pasar a que haya una candidatura única e hipotecar la elección. La fórmula se define en la noche de las internas y de acuerdo a la perfomance electoral de cada uno”, afirmó a Búsqueda una de las fuentes. “Laura y Álvaro es una buena fórmula”, agregó.

En julio de 2023, Raffo fue consultada sobre la posibilidad de acompañar a Delgado como vice. “Creo que ambos, en caso de salir primeros o segundos, acompañaremos al otro”, respondió durante una entrevista en radio Universal. Pero hay quienes están convencidos de que si Raffo no supera la barrera del 30% de los votos, el que decidirá compañera de fórmula será el sector de Delgado. Sobre lo que hay consenso en el Partido Nacional es de que la dupla que compita por la presidencia tiene que ser paritaria.

Juan Sartori durante el desfile de la Patria Gaucha 2024 en la ciudad de Tacuarembó. Foto: Mauricio Zina / adhocFOTOS

El factor Sartori

Pero las largas discusiones, consultas jurídicas y los análisis previos sobre posibles fórmulas pueden quedar en la nada si no se contempla el enigma Sartori. El senador ha dado varias pistas sobre su precandidatura, pero mantiene hermetismo sobre lo que hará finalmente. No confirma ni desmiente. Genera expectativa desde las redes sociales. Mantiene el misterio y especula.

En su entorno más estrecho aseguran que su irrupción como un nuevo competidor en las internas es inminente y cambiará la lógica actual. Ya no será la misma foto de hoy. E incluso se animan a decir que desplazará a Raffo de un segundo lugar. Según las últimas encuestas, Sartori, aún sin presentarse como candidato, orilla un 10% de la intención de voto del electorado blanco. El empresario millonario que sorprendió en las pasadas elecciones busca crear una nueva estructura política, la que destruyó ni bien terminó el proceso electoral y salió electo senador. Uno de sus padrinos políticos, el veterano dirigente Alem García, está en la tarea de trillar telefónicamente a distintos dirigentes de todo Uruguay para convencerlos de volver a subirse al barco de Sartori. Si logra rearmar ese músculo militante, hará una campaña corta e intensa que cambiará el tablero de los blancos.

Información Nacional
2024-03-14T01:16:00