En Uruguay se escribe mucho teatro, pero se publica muy poco. Algunas editoriales se han dedicado a la dramaturgia, y a veces aparecieron esfuerzos especializados, como Salvadora, una luz que brilló fuerte pero no se sostuvo. Están los premios que financian impresiones. Está el festival Nuestra, dedicado a la dramaturgia uruguaya. Está el portal Dramaturgia Uruguay, pero no es una plataforma que llegue al público sino más bien una herramienta utilitaria para que los autores difundan su obra. Y algunos pocos logran plasmar eso que en el teatro porteño o el español es tan común: que en la puerta del teatro se venda el libro con el texto de la obra. Las reducidas dimensiones del mercado responden los involucrados. En estos últimos años un emprendimiento editorial estatal está haciendo un aporte más que interesante para revertir esta carencia.
Desde el 2020 el Instituto Nacional de Artes Escénicas (INAE) lleva adelante la Colección Teatro, una serie de libros que compilan textos de autores teatrales uruguayos contemporáneos. Este acervo representa un considerable abanico estético, geográfico y generacional de la escena local de los últimos 50 años. Con los cuatro títulos publicados en diciembre de 2023 —dedicados a Leonardo Martínez Russo, Leticia Scottini, Beatriz Massons, y a la escena del interior—, la colección llegó a 24 volúmenes. Se trata, sin dudas, de una de las líneas más visibles y distintivas de la gestión de Álvaro Ahunchain como coordinador del INAE. El proyecto (encargado a Editorial Fin de Siglo), con dirección y curaduría de Franklin Rodríguez, reúne textos de dramaturgos y cuatro libros de investigación sobre circo, danza y la serie Territorialidades Escénicas en el Interior del Uruguay.
Entre los autores presentes en la colección figuran referentes de los 70 y 80 como Alberto Paredes (el primer libro de la colección, publicado en 2020), exponentes de la dramaturgia del interior del país como la fraybentina Estela Golovchenko, históricos como Jorge Denevi, presente en la escena uruguaya desde hace más de 60 años, y talentos recientes como Jimena Márquez y Vachi Gutiérrez.
Un valor diferencial de la Colección Teatro radica en que todas sus ediciones son prologadas por especialistas que dan contexto a las obras. Los ejemplares tienen un diseño que ha permanecido invariable desde el primero: la portada es ocupada por una foto en blanco y negro del autor y los lomos y contratapa tienen fondo amarillo (salvo los de investigación, de color naranja). Al tratarse de una publicación de un sello privado, pero con financiamiento público, la política de distribución es mixta. Un contingente de cada tirada se distribuye en forma gratuita a instituciones teatrales como la Comedia Nacional y la EMAD, a compañías como El Galpón, Circular y El Tinglado, a decenas de escuelas de teatro, a investigadores, críticos y prensa, departamentos de cultura y compañías teatrales del interior, embajadas y otras representaciones diplomáticas. La editorial también los distribuye en el circuito comercial de librerías, con un costo entre $ 500 y $ 600.
Los experientes
La serie está destinada a los experientes, los emergentes y los ensayos de investigación. En los experientes —en algunos casos históricos— hay una decena de autores. Apareció en primer lugar Alberto Paredes (1939-1998), autor que se destacó por su capacidad de observación de la realidad montevideana de clase media. “No creo tener, me parece, un estilo propio, pero una temática sí, y tiene que ver con la realidad uruguaya y con nuestra identidad”, dijo en una entrevista citada en el prólogo. “Los viajes son hacia dentro de uno mismo”, dijo en otra oportunidad, interrogado sobre su aversión a viajar. El libro contiene cuatro de sus textos que tienen como común denominador la problemática de pareja cruzada con las dificultades económicas: Tres de última, Aquella pareja, Dos almas y El poder nuestro de cada día.
La vida artística de Jorge Denevi podría alimentar varios tomos. Además de traducir y dirigir cientos de espectáculos, posee una interesante producción dramatúrgica con el cine, las letras y la historia del arte como telón de fondo. “Nadie como un director para aplicar y optimizar los resortes teatrales de la escritura”, dice Álvaro Ahunchain en el prólogo. Esta publicación es ideal para recordar un concepto del Flaco en un reportaje a Búsqueda en febrero de 2017: “El texto es una realidad en el papel y el teatro es la realidad en carne y hueso”.
Aquí están cuatro de sus obras: La muerte de Tarzán (1977), que fue interpretada en el Circular por Julio Calcagno, es una muestra de grotesco y absurdo sobre una familia que tiene secuestrado a Tarzán en el altillo de su casa. Esta noche, Oscar Wilde (1978) es un monólogo que repasa la impresionante existencia del literato inglés que tuvo el valor de enfrentar a la sociedad del siglo XIX y pagar su condición de homosexual con la cárcel e incluso con su vida. Tardes enteras en el cine (2010) es la pieza más autobiográfica de la obra del Flaco y La violación de Artemisia (2020) es una historia de ribetes históricos, inspirada en la malograda pintora barroca italiana Artemisia Gentileschi.
Dino Armas, otro referente de la dramaturgia uruguaya de los últimos 40 años, también está representado con cuatro textos: Sus ojos se cerraron, Los raros, Lucas o el contrato y Pasionarias. Armas es otro gran artesano de la vida privada, si es que aún se puede hablar de vida privada en algún ámbito de la existencia humana.
La obra de Omar Varela abarcó unos 20 años, entre los 90 y los 2000. Dejó una huella nítida en la escena nacional, con una serie de comedias y musicales ambientados en Montevideo, desbordantes de personalidad. En el volumen están los textos de Un poco de suerte, El país de las maravillas, Fue mi culpa, lo hice por amor y Estoy sola porque quiero.
Otro nombre importante en la comedia uruguaya es Fernando Schmidt, gran comediógrafo uruguayo quien aporta para esta serie cuatro éxitos de taquilla: ¡Buena, macho!, Servicio a la habitación, ¿Quién fue el gracioso? y Radojka, que si bien no fue estrenada en Uruguay, llegó recientemente en su versión argentina. Dice Jorge Denevi en el texto introductorio: “En la comedia no se trata solo de hacer reír. No es el mejor escritor de comedias aquel que hace reír más al público, porque en la comedia no es solo el cuánto sino también el cómo. (…) Fernando, en cada cosa que escribe, en cada personaje que crea, establece una visión del mundo. Ahí está el cómo. Ahí está lo difícil de hacer comedia”.
Sandra Massera es una autora y directora incansable, que desde la compañía Teatro del Umbral ha sido protagonista de la escena uruguaya en los últimos 25 años. Su obra tiene un alto componente histórico. Episodios como la Segunda guerra mundial, con personajes como Ana Frank y Luce Mangione, son combustible permanente de su dramaturgia. También ha buceado en episodios notables de la historia del arte, como la Secesión vienesa, de la que extrajo historias de gran intensidad como las de Alma Mahler, Gustav Mahler y Oskar Kokoshka. Sus obras están afectadas por la perturbación, por lo ominoso, lo fantástico y lo que resplandece apenas tenue en la oscuridad. En la colección se publicaron La bailarina de Maguncia, sobre la peripecia de la italiana Luce Mangione en los campos de concentración alemanes, Kafka, la última noche, Danza con personaje, Tulipanes para Hermine y El caso inevitable del señor Méndez.
Don Pepe en el jardín, Viejo smoking y La perseguida hasta el catre son algunas de las obras del tomo dedicado a Ana Magnabosco, una prolífica autora con más de 30 obras estrenadas en Latinoamérica y Europa. Estela Golovchenko, fundadora de la compañía fraybentina Sin Fogón, grupo que desde hace 20 años tiene su sala propia en esa ciudad y es uno de los principales bastiones del teatro del litoral, aporta El disparo, Punto y coma y La canción de las palabras esdrújulas. El elenco de El Galpón cuenta entre sus filas con una dramaturga y directora con varios estrenos a cargo de la compañía. Uno de los que tuvo más repercusión fue La embajada, obra que reconstruye la historia del asilo político que el embajador mexicano en Uruguay, Vicente Muñiz Arroyo ofreció en 1973 a decenas de integrantes de esa institución teatral.
Jimena Márquez y Vachi Gutiérrez son dos talentos que hace rato están instalados entre lo más destacado de la escena local. De Márquez están, entre otras, Lítost, La sospechosa puntualidad de la casualidad y Nociones básicas para la construcción de puentes, estas dos últimas estrenadas por la Comedia Nacional. De Gutiérrez están Verte me salva, Y un día me empecé a despedir y Bienvenido todo, comedia sobre el proceso de resiliencia de una mujer tras una ruptura afectiva, estrenada en 2023 en Fray Bentos y Montevideo. Otros jóvenes autores presentes en la serie son Lorena Rochón, Alejandra Weigle, Sebastián Barrios y Federico Roca, autor de Buscando a Copi y La desmesura, dos piezas muy bien recibidas por público y crítica.
Un volumen de la colección está dedicado a autores egresados de la Tecnicatura Universitaria de Dramaturgia (TUD) que se comenzó a dictar recientemente en forma conjunta entre la Facultad de Humanidades de la Udelar y la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático. Ellos son Bruno Acevedo, Gustavo Kreiman, Elaine Lacey, Alejandra Gregorio y Marcel Sawchik.
La separata dedicada a los ensayos de investigación incluye un estudio profundo de la dramaturgia del interior. Los dos tomos de Territorialidades Escénicas en el Interior del Uruguay, a cargo de investigadores como Gustavo Remedi, María Pollak, Juan Estrades, Pilar de León y Estíbaliz Solís, incluyen una docena de estudios que repasan la historia de las compañías y salas teatrales en Lavalleja, San José, Soriano y Rivera, además de estudios transversales como las voces femeninas en la dramaturgia uruguaya y el cruce entre teatro y carnaval en el interior del país. Además, hay un ensayo de Juan González Urtiaga dedicado a la historia del circo criollo (Circo eterno, glorioso e inefable) y un extenso trabajo de Carolina Silveira sobre la historia local de la danza contemporánea (Montevideo Danza).
Según han manifestado Ahunchain y Rodríguez, hay planes para que la Colección Teatro continúe en 2024, con varios tomos de autores y un ensayo de Mariana Percovich sobre los estilos de actuación a lo largo de la historia del teatro uruguayo. Al decir de Rodríguez en un reportaje a Voces, la intención es que siga más allá de este período: “La idea es que sea algo que quede y que permita estudiar la época. Y sacale el color político, si se instala este trabajo editorial en el INAE después es difícil que venga quien venga decida cortarlo”.