“Es la política. Es brava la política”, solía decir el expresidente Jorge Batlle, cuando se le preguntaba sobre acercamientos, alejamientos, reacomodos y dardos cruzados, algunos protagonizados o sufridos por él, en la interna del Partido Colorado. A veces lo decía con esa sonrisa burlona tan suya. A veces lo soltaba como masticando pólvora.
“Los reagrupamientos tras las internas son parte de la política”, dijo a Búsqueda el prosecretario del Partido Colorado, Gustavo Osta. Lo afirmó días antes de la convención nacional del sábado 17, en la sede partidaria, que deberá aprobar la fórmula para octubre. También lo dijo en medio de una semana de una intensidad pocas veces vista en ese tema, todos con Pedro Bordaberry como eje.
“Hay intereses políticos, personales y sectoriales. El tema es que la reagrupación se dé en un clima de razonable armonía”, agregó Osta. No se espera nada raro este sábado, cuando los convencionales deberán aprobar a Andrés Ojeda como candidato a presidente y a Robert Silva para vicepresidente. Esta es la única convención partidaria que debe aprobar lo primero, ya que Ojeda no alcanzó al 40% de los votos colorados. Igualmente, nadie vislumbra otro escenario.
Lo de la “razonable armonía” corre por otras vías. Hoy el partido quedó dividido en dos bandos bien diferenciados, cuyos respectivos referentes son Ojeda y Bordaberry. El candidato a la presidencia estuvo en su búnker el lunes 12 para presentar el sublema Unir para Crecer, una alianza con el sector de su compañero de fórmula. En esta ala están la lista 25 de Ojeda, la 600 de Silva, la 9007 del diputado Gustavo Zubía y la 15 del senador Raúl Batlle.
El segundo bloque es liderado por Bordaberry, uno de los últimos líderes partidarios que se sumó luego de las internas y se ganó todos los flashes desde el anuncio de su regreso el martes 6, que ya sumó los respaldos de los sectores que en la interna apoyaron a Gabriel Gurméndez y a Tabaré Viera, y también de Ciudadanos, que había estado detrás de Robert Silva. Pretenden tener una lista única, la 10, salvo en Rivera, donde se mantendrá la 2000. Tamaño magnetismo, que Viera dijo que los tenía “agradablemente sorprendidos”, provocó preocupación en el propio Ojeda, dijeron a Búsqueda fuentes coloradas.
“Por este tipo de cosas es que (Ernesto) Talvi no quiso que Bordaberry presentara una lista en 2019”, dijo a Búsqueda una de ellas. Recordó además que el economista había ganado esa interna con un respaldo mucho mayor (54%) que el que obtuvo Ojeda y aun así le cerró el paso porque no era "estratégico" sumarlo.
Movida de Ciudadanos
Ante los micrófonos, el discurso es unánime. De un sector y otro se habla de unión, de sumas, de alcanzar el balotaje (algo respaldado por la mejoría en las encuestas, que aún no han medido el regreso de Bordaberry), de liderar la coalición de gobierno, de avatares “de la política”. Al apagarse las luces, afloran sentimientos más humanos.
“Nosotros nos quedamos donde siempre, no nos mueven las conveniencias electorales. Con esta alianza fortalecemos el centro, ahora que en el partido hay un ala más conservadora”, dijo a Búsqueda un dirigente de Crece, creado a partir de Ciudadanos para respaldar la precandidatura de Robert Silva. “¿Una lista única? ¿En todos los departamentos? Se van a sacar los ojos por los lugares”, ironizó otro.
Con Silva se quedó Crece. Esto incluye a los diputados Felipe Schipani, María Eugenia Roselló, Ope Pasquet y Martín Melazzi, más otras figuras técnicas, como el vicecanciller, Nicolás Albertoni, el asesor del Ministerio del Interior Diego Sanjurjo y el director del Ministerio de Desarrollo Social Antonio Manzi. Se buscó un divorcio lo más apacible posible con sus viejos compañeros de ruta: salomónicamente, Crece se quedó con el número 600 y Ciudadanos con la denominación.
“Acá está Ciudadanos”, resaltó el diputado canario Walter Cervini a la hora de presentar la unión con Bordaberry, el martes 13 en el anexo al Palacio Legislativo. Con él estaban la diputada Nibia Reisch, el senador Pablo Lanz y los ministros de Ganadería y Ambiente, Fernando Mattos y Robert Bouvier. En la interna del grupo, a Cervini se lo considera el sucesor del fallecido Adrián Peña, quien creó la estructura del sector.
Peña, que murió en abril en un accidente de tránsito, fue una ausencia presente en esta partición. Fuentes de Ciudadanos dijeron a Búsqueda que la estructura del interior apoyó la precandidatura de Robert Silva “más por Adrián (Peña), que era el líder natural, que por él”. Desde Crece, en cambio, se divulgaron declaraciones de Peña de junio de 2023 que lo ubicaban a él y a Ciudadanos en una “visión socialdemócrata” contra una “más de derecha, que representa Bordaberry”.
Respuesta en las elecciones
Muchos dirigentes otrora vinculados a la lista 15 (que hoy apoya a Ojeda) y al último gobierno colorado, el de Jorge Batlle, fueron a dar su apoyo a Bordaberry y Gurméndez cuando presentaron su acuerdo el martes 13 de mañana en el hotel Radisson. “Ahora con Pedro esto parece la época de la ley de lemas, con candidatos múltiples”, ironizó uno de esa vieja guardia.
Ya en las internas, Gurméndez fue el precandidato más cercano a Bordaberry. Las conversaciones entre ambos se iniciaron el 2 de julio y se hicieron más intensas durante el mes. A mediados de julio se sumaron a las negociaciones Tabaré Viera y Germán Coutinho, de Batllistas. Cuando Bordaberry oficializó su regreso, si bien no nombró a nadie, ya estaba prácticamente todo atado.
“Nosotros vamos a apuntar a una lista única, con diputados fuertes para todos los departamentos. Cómo harán los otros para tener diputados con tantas listas, que lo expliquen ellos”, agregó un referente de este nuevo bando. Según fuentes de la 10, esta tendrá a Bordaberry en el primer lugar al Senado y a Gurméndez como su suplente; en la segunda línea, respectivamente, irán Viera y Coutinho, senador y exintendente de Salto. Las planchas a Diputados recién empiezan a negociarse.
Salto es otro terreno de disputa. En la presentación de Unir para Crecer estaba Marcelo Malaquina, titular de la lista 1, ganador de la interna colorada en ese departamento, casi seguro candidato a intendente por la Coalición Republicana en 2025. Ojeda la definió como “la agrupación más codiciada del país”. Junto a ellos estaba Horacio de Brum, quien peleará por una banca a Diputados en octubre, quien en las internas respaldara a Gurméndez. Al igual que Malaquina, De Brum siempre se ha ubicado en la vereda opuesta a Coutinho en la interna colorada. Al situarse Gurméndez y Coutinho en Vamos Uruguay, De Brum optó por cambiar de aires.
“Estamos apoyando la renovación a nivel nacional y también en Salto”, dijo Ojeda. La carta de la “renovación” es una de las jugadas que tiene el presidenciable, considerando que muchos de los viejos dirigentes (a los que sitúa en los peores momentos históricos colorados) se fueron con Bordaberry. La otra, la del “centro” o la “socialdemocracia”, es una apuesta de Crece frente a lo que perciben como un excesivo escoramiento a la derecha de Vamos Uruguay. Sin embargo, el exfiscal Gustavo Zubía, con un discurso de mano dura y en cuyo entorno hablan de ser el “contrapeso para tanto centrismo”, también está con Ojeda, con lista propia y un segundo lugar al Senado en la 25.
Durante la anexión a la 10 de Batllistas, el miércoles 14 en la antesala del Senado, en el Palacio Legislativo, Bordaberry afirmó que “la época de armar las listas hace aflorar sentimientos 'normales' en muchos” y que “quedan heridas”. Pero apelando a una frase que leyó en la sede del Partido Colorado en Mercedes, dijo que “ni en política ni en la vida se crece a partir el rencor sino de la generosidad”. Fue la frase más aplaudida de su intervención.
A la luz de los resultados de las elecciones de 2019, la decisión de Talvi de desalentar a Bordaberry de presentar una lista al Senado es vista hoy como un error por varios dirigentes. El 27 de octubre se comenzará a valorar el beneficio de la coyuntura actual, coinciden fuentes políticas, algunas sonriendo y otras con una desconfianza cada vez más difícil de disimular.
