“Con eso tenemos que lidiar”, graficó a Búsqueda un integrante de la Dirección de Investigaciones de la Policía. Aunque ni Marset ni su pareja tienen causas abiertas ni requisitorias en Uruguay, distintas unidades policiales locales están colaborando para encontrarlo: Marset es uruguayo, mantiene operaciones de narcotráfico en el país, parte de su familia vive aquí y detenerlo supone para el gobierno solucionar un problema político que se volvió recurrente durante la campaña electoral. La principal hipótesis es que, al menos desde 2019, Dubái es un enclave para algunos de sus ingresos económicos y también un refugio físico, con evidencias de que tanto él como su mujer y sus hijos estuvieron allí.
A inicios de año, ambos países intentaron crear un lazo bilateral. En enero el Ministerio del Interior recibió una invitación del Ministerio del Interior de EAU y de la oficina de Interpol en Abu Dhabi —junto con Dubái, uno de los siete emiratos que conforman el país— para participar en un programa sobre desarrollo y liderazgo que se realizó durante 16 semanas en la Academia de Policía de Dubai. Viajó un oficial de la Dirección Nacional Guardia Republicana, quien cumplió con la capacitación, pero los contactos no prosperaron como se esperaba.
¿Por qué Dubái es elegido por Sebastián Marset?
Dubai Unlocked fue una investigación publicada en 2020 por la organización Proyecto de información sobre la delincuencia organizada y la corrupción (OCCRP, por sus siglas en inglés), que reveló cómo diferentes empresas y personas utilizaban Dubái como un punto de entrada para el blanqueo de fondos ilícitos, atraídos por la falta de regulación en ciertos sectores, como el inmobiliario.
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Dubái ha lidiado en los últimos años con acusaciones de ser un centro de lavado de activos, principalmente en el sector inmobiliario
Oficina de Turismo de Dubái
Este y otros reportes y denuncias impulsaron un mayor énfasis contra el lavado de dinero por parte del gobierno de EAU, que en 2022 ingresó a la lista gris del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), donde se agrupan las jurisdicciones con debilidades para el control del lavado de activos. El GAFI destacó entonces el riesgo de blanqueo de fondos del terrorismo y del narcotráfico, entre otros, a través de propiedades, bancos, metales y piedras preciosas. Tras un exhaustivo monitoreo, en febrero de este año EAU fue eliminado de la lista de riesgo de flujos de dinero ilícitos.
Más allá de los esfuerzos emiratíes a nivel gubernamental para disminuir el lavado de activos, en el terreno policial y de la seguridad pública la principal preocupación es el narcotráfico dentro de sus fronteras, concretamente el consumo. En Uruguay entienden que esta estrategia resulte en un reducido interés por arrestar a Marset, ya que no hay pruebas que indiquen que dentro de Emiratos Árabes Unidos ejecuta operaciones de tráfico, distribución o venta.
Dentro del país, la aplicación de la ley es responsabilidad de la Policía de cada emirato y la Policía de Dubái tiene un Departamento General Antidrogas que en el segundo trimestre de 2023 alcanzó el arresto récord del 49,6% del total de sospechosos buscados por casos relacionados con drogas y la promoción de sustancias psicotrópicas. “Durante el mismo período también se produjeron confiscaciones sustanciales, incluyendo 491 kilogramos de drogas y 3.333.916 pastillas narcóticas. Las drogas confiscadas incluyeron cocaína, heroína, cristal (metanfetamina), opio, marihuana, hachís y varios tipos de pastillas narcóticas”, informó entonces WAM, la agencia oficial de noticias de EAU.
Las campañas públicas de la Policía de Dubái también se enfocan en la reducción del consumo. En julio se realizó un evento de concienciación de tres días en ocasión del Día Internacional contra el Abuso de Drogas y el Tráfico Ilícito. El evento, organizado por el Departamento General Antidrogas, tuvo como objetivo aumentar la conciencia de la comunidad del emirato sobre los peligros de los narcóticos y las sustancias psicotrópicas, y se presentó una plataforma digital (denominada E-Crime) para que la ciudadanía reporte anónimamente delitos asociados al narcotráfico. “Animamos al público a utilizar canales de comunicación confidenciales con la Policía de Dubái para proporcionar información y comentarios”, manifestó Eid Mohammed Thani Harib, director del Departamento General Antidrogas.
Dubái, Uruguay y agencias policiales con prioridades distintas
García Troche fue detenida por oficiales de la Policía Nacional de España en Barajas, al tanto de que la mujer que buscaba ingresar a Madrid era una fugitiva acusada por los delitos de tráfico de drogas, organización criminal y blanqueo de capitales, sobre quien pesaba una orden internacional de detención emitida por la Justicia de Paraguay para que cumpla una pena máxima de 22 años y seis meses de prisión.
“La prófuga está vinculada con el transporte de cargamentos de varias toneladas de estupefaciente a través de Uruguay, Argentina, Paraguay y Bolivia hacía Europa y África. Concretamente, su marido está siendo buscado por Interpol por presuntamente transportar al menos 16 toneladas de cocaína entre Paraguay y Europa a través de Uruguay. La arrestada obtuvo ganancias provenientes del tráfico internacional de droga, constituyó una supuesta sociedad y abrió una cuenta bancaria con el objeto de poner en circulación en el sistema financiero el dinero de origen ilícito”, señaló la Policía Nacional de España en un comunicado de prensa publicado horas después de su arresto.
Mientras el abogado de la familia Marset sostiene que García Troche se entregó voluntariamente a la Policía con la intención de cumplir su pena en España y no ser extraditada a Paraguay, las fuerzas de seguridad españolas y uruguayas aseguran que la detención fue fruto de una operación policial conjunta. “Gracias al intercambio continuo de información entre el Departamento de Capturas Internacionales de Interpol Uruguay y la Sección de Localización de Fugitivos de la Policía Nacional se tuvo conocimiento de que tenía intención de viajar de Dubái hasta Madrid, por lo que se estableció un dispositivo que culminó con su detención”, agregó el comunicado de la Policía española.
En Uruguay, la Policía brindó una conferencia de prensa el mismo 17 de julio, cuando la pareja de Marset fue capturada en España. Juan Rodríguez Reina, director de Investigaciones, resaltó el trabajo con España y agencias de seguridad regionales, que incluyó de parte de la Policía uruguaya más de 20 informes de inteligencia y más de 300 comunicaciones internacionales. Al igual que la Policía Nacional de España, Rodríguez Reina fue cuidadoso de no mencionar a la Policía de Dubái como partícipe de la operación e incluso criticó abiertamente su accionar: “Debería preguntarme por qué no fue detenida por Interpol en Dubái”, cuestionó.
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Esta casa de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, es el último destino oficialmente confirmado en el que estuvo Sebastián Marset
Miguel Surubí/AFP
Una posición similar mantienen en la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay, según consultas realizadas por Búsqueda. La Operación Ultranza PY, iniciada en febrero de 2022 en Asunción, golpeó duramente a la organización delictiva de Marset y culminó con varios de sus líderes arrestados. Casi tres años después, sin embargo, el narco uruguayo permanece prófugo y las agencias policiales sudamericanas no logran entablar un diálogo fluido con sus pares de Dubái, donde suponen que se esconde o se ha escondido. El último lugar en el que se informó oficialmente que Marset se ocultó fue Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, desde donde se fugó en julio del año pasado.
El 22 de julio la ministra de Estado para la Cooperación Internacional de Emiratos Árabes Unidos, Reem bint Ebrahim Al Hashimy, visitó Paraguay para reforzar la cooperación entre los dos países en los ámbitos político, económico y comercial. La delegación de EAU incluyó a Saeed Abdullah Al Qamzi, embajador emiratí en Argentina y embajador no residente en Uruguay y Paraguay. Durante la visita, Al Hashimy se reunió con Santiago Peña, presidente de Paraguay, para discutir sobre relaciones bilaterales en diversos campos. También conversaron sobre las negociaciones entre el Mercosur y EAU para un acuerdo comercial. La seguridad no fue uno de los temas de la agenda.
Tampoco fue el narcotráfico uno de los ejes de la cuarta edición del Programa de Líderes Globales Jóvenes de Interpol (YGPLP, por sus siglas en inglés), desarrollado en agosto en Dubái bajo el título La Policía en la era de la inteligencia artificial y con la participación de Jürgen Stock, secretario general de Interpol, y representantes de 34 naciones. “A medida que transitamos hacia una era de rápido crecimiento de la IA, adaptarse a la tecnología no debe verse como un desafío, sino como una oportunidad para inspirar la innovación y asegurar que nuestros equipos estén bien preparados para los desafíos futuros”, enfatizó Stock.
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La Policía de Dubái promociona festivales y competencias de deportes electrónicos
Dubai Police
A las diferencias de prioridades políticas entre Uruguay y Dubái deben sumarse las económicas y culturales intrínsecas de cada Policía.
Marcas como Bugatti, Lamborghini, Ferrari, Aston Martin y Mercedes-Benz forman parte de la flota automotriz de la Policía de Dubái, que incluye además costosos side by side (S×S o SSV), un tipo de vehículo pequeño con tracción en las cuatro ruedas. La flota busca mostrar el estatus y la riqueza del emirato, la modernización de su Policía y el uso de tecnología de avanzada en las reparticiones de gobierno.
Otras iniciativas apuntan a solidificar esta imagen positiva a escala global y profundizar el compromiso de la Policía de Dubái con la comunidad, siempre alineada con la tecnología y la innovación. En diciembre, en una de las sedes de la institución, se organizó la tercera edición del Torneo Esports de la Policía de Dubái, con multinacionales como patrocinantes y la participación de 48 equipos y 900 jugadores en algunos de los videojuegos más populares del mundo. El total de premios fue de US$ 50.000.
La Policía de Dubái tiene incluso un equipo de ciclismo profesional registrado ante la Union Cycliste Internationale (UCI, la FIFA del ciclismo), para participar en competiciones locales y regionales.